Gattuso compareció frente a los medios de comunicación en la sala de prensa del Emirates Stadium tras la eliminación de los suyos en los octavos de final de la Europa League frente al Arsenal.

El técnico calabrés se mostró satisfecho de la "buena actuación del equipo, estoy contento con el partido, pero tengo claro que la clasificación la perdimos en San Siro".

Además se mostró comedido a la hora de comentar algo sobre la actuación arbitral, con el polémico penalti que dio lugar al empate a uno por parte del Arsenal, evitando buscar "una coartada hoy, porque sería fácil seguir con el tema del árbitro".  

Sin embargo también dejó claro que "hay ira, porque en unos años nuestros aficionados mirarán el marcador y será de 3-1 para ellos. No podemos darnos el lujo de darnos por vencidos, estoy muy enojado, no deberíamos haber concedido el tercer gol, por ello esta derrota debe quemarnos: cuatro goles de diferencia en la eliminatoria son demasiados, tenemos que partir de aquí, de lo que estamos haciendo en los últimos tres meses ".

El técnico rossonero además destacó la actuación de uno de sus hombres, Hakan Çalhanoglu, del que puntualizó que no fue la mejor noche en conjunto, pudiendo mejorar en global, y que en concreto "a veces le falta lucidez", pero sin embargo se mostró "muy feliz por su actuación, no solo por él, sino por el desempeño de todos".

Tras analizar la situación del equipo tras la derrota en Londres, Gattuso quiso centrar ya toda su atención a los próximos objetivos, los más relacionados con la competición doméstica; alcanzar los puestos de clasificación a Champions League. Para ello la primera piedra en el camino será el Chievo Verona, un equipo del que Gennaro destacó que "no hay oponentes fáciles en el fútbol. El Chievo está necesitado de puntos para lograr la salvación, así que el próximo domingo ante nosotros irán a mil".