Una larga travesía de desiertos. Ese es el camino que recorren desde hace años Argentina e Italia. Cierto es que a punto estuvieron de saborear un oasis entre tanta arena. Los argentinos hasta en tres ocasiones consecutivas, aunque se saldaron con derrota. Mientras que los italianos probaron las mismas mieles hace seis años.

Por tanto, la última década de ambas selecciones se puede resumir como un mero paralelismo entre las dos. Una larga sequía que en el caso de los transalpinos se verá alargada, al menos, dos años más tras su rotundo fracaso al no clasificarse para el Mundial de Rusia. Mientras que la Albiceleste tendrá en su mano una de las últimas -y grandes- oportunidades de alzarse con una Copa del Mundo en la época de Leo Messi.

Un siglo XX dorado

Argentina e Italia se instalaron desde bien pronto en el olimpo del panorama futbolístico. La Albiceleste suma dos Mundiales y hasta 14 Copas América, unida a una Copa Confederaciones. Esos números se pudieron ver enormemente agrandados con muchos más títulos, ya que son numerosos los subcampeonatos que tienen: tres de la Copa del Mundo y otros 14 continentales. Grandes nombres de aquellas selecciones son los Alfredo Di Stéfano, Leopoldo Luque, Diego Armando Maradona, Mario Kempes, Daniel Bertoni, Daniel Passarella o Claudio Caniggia. No obstante, todo esto tiene su fecha en el siglo XX, por lo que esas vitrinas empiezan a coger más que polvo.

Italia cuando ganó el Mundial 1982, levantado por Dino Zoff. / Foto: fifa.com
Italia cuando ganó el Mundial 1982, levantado por Dino Zoff. / Foto: fifa.com

Algo similar ocurrió con la Nazionale. Desde 1934 empezó a grabar su nombre con letras de oro en la historia balompédica con su primer Mundial, seguido del siguiente en 1938. Luego sufrieron una larga espera de 44 años para ganar el tercero (1982), aunque entre medias levantaron su primera y única Eurocopa en 1968.

Una década pobre y gafada

Dos selecciones tan laureadas como ellas dos no tuvieron uno de sus mejores arranques de siglo XXI. Argentina no alcanzaba ninguna final, tan siquiera, en ocasiones, acceder a la fase eliminatoria. Y en el bando de la Nazionale, lograron resarcirse de la final perdida en la Eurocopa del 2000 con su cuarto entorchado mundial seis años después, en Alemania. Allí, tras una agónica tanda de penaltis ante Francia, Fabio Cannavaro elevó al cielo de Berlín el cetro más ansiado por cualquier país.

Sin embargo, desde ese instante, no han vuelto a rellenar sus vitrinas. Uniéndose así a la tendencia de los argentinos: llegar a finales y perderlas. Y es que la Albiceleste ha chocado tres veces -y de forma seguida- contra su mal fario. Dos Copas América ante su particular Yoko Ono, Chile (2015 y 2016), y un Mundial ante Alemania (2014). Por tanto, el último título fue la Copa América de 1993 en la que se impusieron a México. Y para ver su último Mundial (de los dos que tiene) hay que remontarse al del '86, venciendo a Alemania. Cierto es que han conseguido la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de 2004 y 2008.

Leo Messi, Alejandro Sabella y el resto de la plantilla de Argentina tras perder el Mundial de 2014. / Foto: Gettyimages
Leo Messi, Alejandro Sabella y el resto de la plantilla de Argentina tras perder el Mundial de 2014. / Foto: Gettyimages

Un nuevo integrante de ese "gafe" es Italia. Tras ese inmaculado 2006, comenzó un trayecto de sequía para la Azzurra, encontrándose también en dos ocasiones con su 'archienemigo', España: los 1/4 de la Euro 2008, apeados en penaltis; y la final de la Euro 2012, cayendo goleados por un sonrojante 4-0, en una de las mayores exhibiciones de La Roja. 

Generaciones perdidas

Ante esos sucesos, entendidos para muchos como fracasos, da la sensación de haber desaprovechado generaciones más que listas para ampliar su palmarés. Por ejemplo, en el caso de Argentina se encuentran varias figuras, las cuales jamás supieron lo que es celebrar un título con la Albiceleste, como Javier Zanetti, Roberto AyalaHernán Crespo. Una lista que se puede ver ampliada por nada más y nada menos que Leo Messi, Javier MascheranoGonzalo Higuaín, o el Kun Agüero, futbolistas que pueden estar ante su última oportunidad de ponerse la medalla de campeón mundial.

Italia puede perder una gran generación sin éxito. / Foto: Gettyimages
Italia puede perder una gran generación sin éxito. / Foto: Gettyimages

Lo mismo ocurre con la Nazionale, aunque por su parte esto se ve más agravado aún. Para empezar, jugadores como Giorgio Chiellini, Leonardo Bonucci -quizás este sí pueda, aunque no con la misma plenitud física-, o Claudio Marchisio se despedirán del fútbol sin saber lo que es ganar un Mundial o Eurocopa. Mientras que otra terna que se puede añadir es aquella que se encuentra en la treintena, quienes también ven su fin en la selección italiana, en la cual no podrán disfrutar de una última posibilidad al quedarse sin billete para Rusia. Marco Parolo, Antonio Candreva, o, al igual que Bonucci, que puedan llegar justos de gasolina como Matteo Darmian (tendría 31 años), Florenzi e Insigne (tendrían 30 años) o Ciro Immobile (pasaría a tener 31 años). También los Buffon, Barzagli o De Rossi, campeones del mundo, los cuales están viviendo sus últimos partidos nacionales.