En el día de ayer, el medio italiano Tuttosport difundió la noticia de que Kamel Glik, actual central del Mónaco, podría estar pensando en volver al Torino, equipo del que salió rumbo al cuadro monegasco. No obstante, no se esperan que las negociaciones vayan a ser del todo sencillas con el equipo del principado, ya que su contrato finaliza en 2021.

El internacional polaco llegó a la escuadra granata procedente del Bari. Eso sí, antes pasó por el Palermo y el GSK Piast Gliwice. Fue en Turín donde comenzó a labrarse un nombre en Europa. Cinco temporadas siendo el mariscal de la zaga del Toro le sirvieron para dar el salto al Mónaco, donde se hizo el jefe de la zaga desde el primer instante. Jugador clave para Leonardo Jardim, su gran año coincidió con la brillante campaña de los monegascos, los cuales levantaron el trofeo de la Ligue 1, llegando además a las semifinales de Champions League, de donde apearon a grandes favoritos como el Manchester City o el Borussia Dortmund.

Glik ejerciendo de capitán con el Torino. / Foto: gettyimages
Glik ejerciendo de capitán con el Torino. / Foto: gettyimages

No obstante, a su seguridad defensiva, hay que añadirle los grandes números que ostenta en cuanto a balance ofensivo. Es indudable que ese 1'90 le ayuda, y bastante, a la hora de atacar el cuero en los balones parados. Un as bajo la manga, o comodín, como se quiera llamarlo, cuando los partidos se encuentran atascados. En su primer año, sumó un total de 53 partidos, ocho goles y tres asistencias entre todas las competiciones. Mientras que en el actual curso, mantiene 40 duelos, cuatro dianas y otros cuatro pases de gol.

Quizá este sea su último año en el Mónaco, pero lo que es seguro, es que en el Torino le echan bastante de menos, especialmente la jerarquía que imponía en compromisos importantes. La llegada de N'Koulou buscaba reforzar esa zona, pero a Emiliano Moretti (36 años), la que solía ser la pareja de baile del polaco, se le va notando justo de gasolina. Obviamente, todo este sueño dependerá de diversas partes, como el próximo técnico granata -si no sigue Walter Mazzarri-, la idea del Mónaco... Pero si Glik quiere, su futuro podrá estar todavía más cerca de Turín.