Los ‘Royals’ salieron victoriosos en un partido en el que tuvieron que llegar a los últimos minutos de cada mitas para decantar un resultado que los canadienses maquillaron en el tiempo de descuento. La primera mitad estuvo muy igualada y sin apenas ocasiones de peligro, salgo una acción aislada en el tiempo de descuento en la que Silva puso por delante a su equipo. En la segunda mitad los visitantes insistieron sobre la portería rival sin mucho éxito, y sólo pudieron anotar en los minutos finales. Pero antes, el equipo rival ya había anotado un gol que sirvió para dejar la victoria en casa.
Máxima igualdad hasta el final
Desde los primeros minutes del partido se pudo ver claramente las intenciones de cada equipo y la manera en la que buscarían llevar peligro sobre la portería del rival. Mientras que el conjunto local buscó el control de la pelota, tratando de generar espacios en la defensa rival, los canadienses insistieron con acciones por banda. Buscaron aprovechar la velocidad de sus jugadores en banda para aprovecharse de a espalda de los laterales.
Conforme fue transcurriendo el partido, el conjunto local consiguió tener mayor presencia en el ataque, obligando a su rival a replegarse. A balón parado consiguió llevar peligro, pero sus disparos se marcharon por encima del larguero.
La respuesta del conjunto visitante no se hizo espera y con algunas acciones al contraataque, logró presentarse con peligro en el área rival, aunque no consiguieron que estas finalizasen con un disparo a puerta. La más clara fue un centro desde la banda izquierda que nadie consiguió rematar en el segundo palo.
Llegando a los minutos finales de la primera parte, los canadienses gozaron de la mejor oportunidad para haberse colocado por delante en el marcador. Fue gracias a una acción por la banda derecha en la Marcelo Silva a despejar, estuvo a punto de introducir el balón en su propia portería.
Sin embargo, en el tiempo de descuento llegó la acción que desequilibró el partido hacia el lado local. En una jugada embarullada en el área visitante, Silva consiguió hacerse con el balón y tras girar sobre sí mismo, disparó a puerta y consiguió poner en ventaja a su equipo. Con este resultado se llegó al descanso en donde ambos entrenadores debían buscar solución a los problemas que estaban teniendo sus equipos para llegar con peligro a la portería rival.
Final frenético
La segunda mitad comenzó con mucha intensidad por parte de ambos equipos. Ninguno de ellos quiso concederles espacios a su rival, convirtiendo el partido en un constante cambio en la posesión del balón. De esta manera las acciones de peligro quedaron en un segundo plano, y sólo alguna jugada a balón parado fue la única manera de llegar por parte de ambos rivales. En estos minutos fueron los locales los que estuvieron más cerca de lograr de nuevo el gol, pero no estuvieron acertados.
Cerca de la hora de partido, Vancouver Whitecaps dio un paso hacia adelante, buscando claramente tener mayor control sobre el balón para tener así tener más ocasiones de llegar sobre la portería rival. El mantenerse con un gol de desventaja en el marcador, propició también que dejasen espacios en la defensa que no fueron aprovechados por el equipo local.
Los minutos pasaban y las acciones contra la portería de los canadienses eran cada vez más peligrosas. Lograban claramente llegar hasta las inmediaciones, pero fallaban en el último pase, haciendo desesperarse a un Kei Kamara que no estaba consiguiendo tener oportunidades de anotar.
Sin embargo, un error en la defensa canadiense propició que todas sus esperanzas de igualar el resultado se fueran al traste. En una acción al contraataque, el equipo local cogió a su rival mal posicionado y desde el interior del área Savarino hizo el segundo gol para su equipo, dando por cerrado el partido a falta de dos minutos para el tiempo reglamentario.
Pero los Whitecaps no se rindieron. Continuaron insistiendo sobre la portería rival en busca de un gol que llegó en el tiempo de descuento. Brek Shea cazó un balón en el interior del área y de volea, mandó el balón a guardar, dejando así un resultado que fue definitivo. Una victoria para el conjunto local, que llevaba varias semanas buscándola.