Este martes el Bayern Múnich lograría su pase a la final de la Dfb Pokal con un contundente 6-2 al Bayer Leverkusen, resultado que sembró el miedo en los dos rivales que este miércoles saltaron a la cancha para definir quien sería el segundo clasificado a la final de la Copa de Alemania.

El equipo que salió victorioso en este cruce fue el Eintracht Frankfurt con un solitario gol de Luka Jovic en el minuto 75, tras un encuentro más que igualada, el encuentro se llevó acabo en el Veltins Arena, casa del Schalke 04 ante 60.000 espectadores que se dieron cita para ver a su equipo que venía inspirado ante un gran partido realizado ante el Borussia Dortmund en el Revierderby.

Ambos equipos antes de este partido, se habían enfrentado en 88 ocasiones, con un historial muy pero que muy igualado con 31 victorias para el Eintracht, por 33 victorias para el Schalke y 24 empates, por lo que se vaticinaba un partido que estuviera igualado en todas sus vertientes. Algo importante a resaltar en estos enfrentamientos directos, es que la última visita del Eintracht al Veltins Arena por Bundesliga, se finitquitó con victoria por la mínima de los visitantes.

El colegiado encargado en impartir la justicia en este partido sería Robert Hartmann de 38 años quien tras dar el pitazo inicial, comenzaban las acciones de este encuentro tan importante para la campaña de estos equipos. Este cotejo desde el inicio se presentó muy igualado, ambos combinados estaban bien organizados en defensa y se cuidaban muy bien de las salidas veloces de los atacantes rivales, muy pronto en el partido, el Eintracht iba a tener una mala noticia, en el minuto 16 Kevin Prince Boateng se lesionaba y pesar que lo intentó, finalmente sería sustituido en el minuto 43 por Mijat Gracinovic, algo que le quitó un poco de peligrosidad a los visitantes, sin embargo no cesarían en sus intentos por atacar. 

Foto: Twitter @Eintracht
Foto: Twitter @Eintracht

El Schalke intentó hacer un golpe de efecto en el minuto 52 con la entrada de Konoplyanka, uno de los mejores jugadores del revierderby, quien se cansó de incomodar por la banda izquierda al Borussia Dortmund, en esta ocasión haría lo mismo, pero contaba con el 2-1 que le hacían Wolf y Abraham. El gol no llegaría sino hasta el minuto 75, y fue un contraste de la realidad del encuentro, llegó desde un tiro de esquina que fue cobrado de forma milimétrica por Jonathan de Guzmán, para que Luka Jovic se anticipara a la defensa y de forma muy poco ortodoxa definió de tacón para darle la ventaja a los visitantes que no perderían a pesar de la expulsión de Gelson Fernandes en el minuto 81 tras un pisotón innecesario en el medio del campo a Leon Goretzka, el arbitro determinó la tarjeta roja luego de utilizar el VAR, porque en primera instancia había sacado la tarjeta amarilla.

El encuentro finalizaría con ese marcador de 0-1 que le dio el pase a la final al Eintracht Frankfurt de la mano de Niko Kovac que el próximo 19 de mayo se estará enfrentando al gigante de baviera. Este resultado dejó un sabor agridulce a sus aficionados que venían muy contentos por imponerse en el revierderby con mucha autoridad al Borussia Dortmund, además de afianzarse en el segundo puesto y esta semifinal en su estadio era una gran oportunidad para plantarse en una final, pero los de Tedesco no pudieron cumplir con los objetivos.

Algo que es muy importante de destacar de este partido, es que el entrenador del Eintracht Frankfurt es Niko Kovac, quien fue recientemente nombrado como el próximo entrenador del Bayern Múnich, contrato que comenzará a tener vigencia a partir del 1 de julio, por lo que esta final será muy especial para él, porque tendrá 2 sentimientos encontrados, por una parte conseguir el título de la Dfb Pokal 30 años después de la última vez que el equipo lo consiguió además de la posibilidad de desempolvar las vitrinas del equipo que tiene muchos años sin llevar un trofeo nuevo, y por otra parte, quitarle un título al equipo que lo vio defender sus colores y al que dirigirá a partir del final de esta campaña.

Foto: Twitter @Eintracht
Foto: Twitter @Eintracht

Lo que se viene ahora es la super final donde el Bayern Múnich buscará seguir con su ilusión del triplete que está muy vivo, mientras que el Eintracht buscará romper esa mala racha de tres décadas y llevar un nuevo trofeo a sus vitrinas. Previo a esta final se estarán enfrentando en el partido de vuelta por Bundesliga en el Allianz Arena el próximo 28 de abril, en el partido de ida el encuentro quedó 0-1 para los actuales campeones de la liga con un solitario gol de Arturo Vidal que se perderá ambos encuentros.