Victoria de vital importancia la lograda por Chicago Fire ante un rival al que llevaba más de dos años sin conseguirlo. En la primera mitad, los locales tuvieron mayor control de la pelota, pero fue su rival el que tuvo la suerte de cara para adelantarse en el marcador. En la segunda mitad, pese a que lo intentaron, los locales no consiguieron superar a un rival que tuvo en el portero al verdadero héroe, deteniendo varias de las ocasiones de peligro que generaron.
Chicago sorprende
Buen inicio por parte del conjunto visitante que buscó con insistencia la portería rival, teniendo dos ocasiones en los primeros minutos, aunque no estuvieron acertados. Los locales se mantuvieron firmes y tratando de no conceder más balones de peligro. Trataron con el paso de los minutos de controlar el balón, buscando así tranquilizar el ritmo de partido.
Cerca del minuto 20, el conjunto neoyorkino gozó de una buena ocasión para haberse adelantado en el marcador, pero la falta de comunicación entre los delanteros les impidió aprovecharla. Bradley Wright-Phillips a la media vuelta y de volea mandó el balón ligeramente por encima del larguero.
El partido continuó siendo una constante disputa de balón en el centro del campo, aunque eran los locales los que conseguían materializar su domino en ocasiones de peligro. ‘Kaku’ Gamarra tuvo una ocasión en este período con un mano a mano con el portero, pero este consiguió desviar el balón a saque de esquina.
En los siguientes minutos se vio una respuesta del Chicago Fire, que al contraataque consiguió una ocasión clara de peligro que Robles mandó a saque de esquina. Fue gracias a esa acción con la que los visitantes consiguieron adelantarse en el marcador. La defensa local despejó el balón al borde del área, y según caía, Katai conectó una volea que mandó el balón a la escuadra, dejando en silencio a todo el estadio.
La respuesta de los locales no se hizo esperar y en la siguiente acción, Wright-Phillips y ‘Kaku’ Gamarra tuvieron una doble ocasión para haber igualado el encuentro, pero el portero visitante consiguió detener los dos disparos. Durante muchos minutos mantuvieron el control de la pelota, pero les fue muy difícil superar a la defensa rival.
Sin embargo en estos minutos los visitantes tuvieron en sus pies una oportunidad de aumentar la ventaja, pero en esta ocasión, Katai no estuvo acertado de cara a gol. Esto llevó a que se llegase al descanso con la victoria parcial del Fire.
Respuesta tardía
La segunda parte comenzó con el guión esperado por todos. Un equipo local totalmente volcado en el ataque, mientras que su rival trataría de aguantar las embestidas. Durante michos minutos mantuvo una intensa presión sobre portería, pero no fue hasta llegado a la hora de partido cuando tuvo las mejores ocasiones.
La primera de ellas fue un disparo desde fuera del área de Royer que se estrelló en la escuadra izquierda del portero, con un sonido que silenció a todo el estadio. Pero sin que la jugada finalizase, los locales tuvieron nuevamente un disparo sobre la portería del Fire, pero en esta ocasión fue de nuevo Richard Sánchez el que malogró la ocasión local.
Sin embargo el fútbol es caprichoso, y cuando uno menos se lo espera, puede surgir un contratiempo. Eso es lo que le ocurrió al conjunto local. En la primera ocasión en la que Chicago Fire consiguió deshacerse de la presión, generó una contra que acabó con un gol que ampliaba el marcador. Katai fue derribado en el interior del área, permitiendo a su compañero Nikolic anotar el segundo gol para su equipo.
New York Red Bulls, a pesar de la desventaja, continuó apretando sobre la portería de su rival. Confiaba en que todavía podía sacar un resultado positivo del encuentro. Durante muchos minutos el portero Sánchez se convirtió en un muro, despejando todas las llegadas a su área salvo una, que les costó el gol.
Fue gracias a un despiste de la defensa visitante en un saque de esquina, dejando un balón suelto en el interior del área, permitiendo a Bradley Wright-Phillips tener que empujarlo al interior del área.
A partir de ese momento, las acometidas del conjunto local se intensificaron, pero no consiguieron volver a llevar peligro. Las prisas hicieron que cometiesen impresiones, provocando que los goles no llegasen y los visitantes hiciesen saltar la sorpresa en el Red Bull Arena, consiguiendo así los tres puntos.