La victoria del FC Dallas pudo ser mayor de lo que marcó el resultado final. En la primera parte el conjunto texano tuvo una gran cantidad de ocasiones para haber decantado el marcador, pero la buena actuación de Blake impidió que el partido finalizase tan temprano. En la segunda parte, los locales no estuvieron tan insistentes en el ataque, aunque si más contundentes, consiguiendo los goles con los que se llevó los tres puntos.
Blake salva a su equipo
Juego muy directo por parte de ambos equipos en los primeros minutos que permitió ver algún que otro acercamiento sobre la portería, siendo el equipo local el más incisivo. Antes de que se cumpliesen los diez primeros minutos, ya había mandado dos serios avisos a un Blake que estuvo atento para blocar los disparos.
Pero la respuesta del equipo del Union no se hizo esperar ya que después de pasar el minuto diez, un balón mal despejado por la defensa local, a punto estuvo de costarles caro. Dockal recuperó el balón en el borde del área y sin pensárselo, soltó un disparo que pasó cerca de la escuadra defendida por Maurer.
Conforme el partido fue llegando al ecuador de la primera mitad, la presencia en ataque del FC Dallas era cada vez mayor, generando mayor número de acciones sobre la portería rival. Una de las más claras fue una contra de Mosquera en la que se plantó mano a mano con el portero, superándolo, con un disparo que se marchó cerca del palo.
A partir de ese momento surgió la figura del portero visitante, que una vez tras otra, consiguió repeler todos los disparos que su rival realizaba a puerta. Primero fue con un mano a mano en el que Barrios se quedó sólo ante Blake, aprovechando os espacios a la espalda de los defensores.. Trató de superar al guardameta, pero su definición fue tapada por este.
Unos minutos después de esta ocasión, volvió a aparecer la figura del guardameta, desquiciando por completo al conjunto local. Un disparo desde fuera del área, fue despejado por el portero cuando arecía que el balón entraría con total seguridad.
A partir de ese momento el partido fue un auténtico monólogo del FC Dallas, que mantuvo a su rival encerrado en campo propio, impidiéndole llegar salir con el balón controlado. La presión ejercida en salida de balón hizo que apenas se viese un disparo lejano.
En los minutos previos al descanso fue Lamah el que aprovechó el enésimo balón a la espalda de la defensa para superar a esta en velocidad, pero su disparo volvía a toparse con el mismo de siempre, Blake. El portero sacó de nuevo una mano que mandó el balón a saque de esquina. Con esta acción se llegó al final de los primeros 45 minutos en los que el conjunto local no consiguió llegar con ventaja en el marcador, a pesar de las innumerables ocasiones que tuvo.
Seriedad texana
La segunda mitad comenzó de la misma manera a como acabase la anterior, con el FC Dallas dominando en todos los aspectos. Durante los primeros minutos consiguió tener a su rival encerrado en campo propio y generándole algún disparo de peligro sobre su portería, que fueron fácilmente rechazables por la defensa.
Sólo cuando se pasó de los primeros instantes, el Philadelphia Union se presentó con peligro en el área texana, teniendo la primera ocasión de peligro en mucho tiempo. Este llegó tras un remate de cabeza de Picault en el área pequeña que se marchó cerca del larguero. Pero no contetos con ello, unos instantes después generó la mejor ocasión del partido.
Fue una doble oportunidad en la que primero un disparo de Accam fue detenido por Maurer con una gran estirada, pero seguidamente llegó la ocasión más clara, que a su vez significó la más que posible, parada de año. El balón llegó rechazado a Sapong a un metro del área y con toda la portería para marcar disparo. Sin embargo apareció la mano del guardameta texano de manera milagrosa para dejar el partido como estaba.
Sin embrago, llegados a la hora de partido, una acción cambió el desarrollo del partido. Trusty derribó a un rival en un saque de esquina, llevando al colegiado a señalar la pena máxima. El recién incorporado al terreno de juego, Mauro Díaz, fue el encargado de anotar el primer gol de su equipo.
Esto obligó a Philadelphia Union a tener que adelantar sus líneas y a buscar un gol que les permitiese volver a igualar el marcador. Pero los riesgos tomados en defensa le hicieron conceder una ocasión a su rival, que no desaprovechó. Urruti fue quien sorprendió a la defensa rival y tras superar al portero, consiguió anotar el segundo y definitivo gol.
A partir de ese momento el partido se abrió para ambos lados con constantes intercambio de golpes entre ambos equipos. Las llegadas fueron para los dos equipos, sin embargo, el que tuvo mejores opciones fuero los locales, pero finalmente no consiguieron decantar aún más el resultado, llegando así al final de los 90 minutos.