"Haría como en el ordenador, un copia y pega de la prestación contra el Barcelona". Con estas palabras definía Di Francesco lo que espera de sus jugadores, otro partido perfecto en el cual todo se ponga de cara. Aunque reconoció que el club blaugrana y el inglés, tienen poco que ver: "Nos enfrentamos a un equipo totalmente diferente desde el punto de vista táctico, de mentalidad, dan menos pases y juegan más en vertical".

Sobre las bajas de Perotti y Strootman: "Decidiré hoy el once, aunque hay jugadores que faltarán seguro y tengo menos piezas disponibles". Por lo cual, se prevé un cambio táctico de la Roma para esta vuelta.

El estratega sabe que el factor local juega un papel fundamental y no lo quiso dejar pasar por alto: "Para competir con el Liverpool hay que aumentar la calidad de nuestro rendimiento. Hay que tener la capacidad de marcar lo antes posible para entusiasmar al público"

"No me conformo, tenemos que dar lo mejor de nosotros para llegar a Kiev. Nuestra voluntad tiene que ser llegar hasta la final. Desde hoy trataré de motivar a estos chicos para que estén convencidos de que pueden hacer algo grande. ¿Esperan que nos rindamos en una semifinal ante 70.000 espectadores? Tenemos que ser un equipo batallador que dé todo lo que pueda", añadió.

Preguntado por el histórico choque de la final de Champions del 84 en Roma entre Roma y Liverpool, que se decantó por el lado inglés, Di Francesco concluyó: "Ha pasado demasiado tiempo, eso se siente más en el corazón de la hinchada".