La temporada 2015 – 2016 dejó al mundo del futbol con un nombre propio en la boca de todos. El nombre en cuestión era Renato Sanchés, un joven mediocentro portugués de, en ese entonces, 18 años, que despuntaba con sus actuaciones en el Benfica. El prometedor jugador que usaba el número 85 en su espalda se estaba construyendo un nombre dentro de los mejores jugadores jóvenes de todo el mundo.
Dicha temporada terminó, para él, con seis goles en 47 apariciones para su club y con el debut en la selección mayor de Portugal, con la cual asistió a la Euro de ese año realizada en Francia. Sanchés impresiono tanto con la elástica de ‘las águilas’, que fue merecedor del reconocimiento del Golden Boy de la temporada 2016, coronándose por encima de jugadores como Marco Asensio, Leroy Sané o Dele Alli.
Su gran presente y su prometedor futuro le otorgaron la oportunidad de fichar por el Bayern Múnich, por una cifra cercana a los 35 millones de euros. No obstante, su primer año en la institución bávara no fue el mejor. Jugó en 25 oportunidades, donde no consiguió anotar ni asistir en ninguna ocasión, además, su desempeño bajo la dirección de Carlo Ancelotti fue bastante pobre. Este bajón produjo que el portugués tuviera que buscar club en el verano del año 2017 y, tras una sola temporada en Múnich, armó las maletas y se fue cedido a la Premier League.
El futuro, nuevamente, auguraba éxitos, pues su capacidad física y condiciones técnicas parecían ser idóneas para el estilo de la liga inglesa y, en especial, del Swansea, club con el que firmó una cesión por más de ocho millones de euros. Sin embargo, tal como en Alemania, Renato no pudo mostrar su mejores condiciones, pues, aunque comenzó de gran manera en Inglaterra, poco a poco su rendimiento fue bajando y la confianza de su DT también. Finalmente, Sanchés jugó 15 encuentros con los ‘cisnes’ asistiendo un gol y sin poder anotar.
Con los pobres resultados que ha obtenido el portugués desde su fichaje por el Bayern Múnich se especuló mucho sobre su futuro, el cual apuntaba muy claramente a una nueva cesión en el periodo de transferencias que está a punto de comenzar. Pero desde Múnich piensan distinto. Así lo expresó Karl-Heinz Rummenigge, el CEO de la institución. En declaraciones dadas a medios de comunicación, Rummenigge expresó que Renato va a volver a Múnich y que “Niko Kovac intentará devolverlo a su nivel anterior”.
Aunque esto prometa, quedará por ver cómo se acopla el jugador portugués a la plantilla bávara, pues la competencia será muy dura. Los nombres que están para esa posición son varios y de calidad, por ejemplo, deberá "luchar contra” Goretzka, Tolisso, Rudy, Thiago, Martínez, Vidal, etc.