La costumbre más antigua de todo equipo de fútbol que se está jugando algo gordo, pero que tuvo una temporada algo inconsistente es la de dejar las cosas para el último instante del curso.

Este recurso puede salir bien y transformarse en un ascenso de categoría o en una salvación o puede salir mal y que no consiga el objetivo establecido a principio de temporada y por el que ha estado luchando durante un incansable año futbolístico.

La aplicación de dicho recurso suele verse en las últimas jornadas de cada competición, independientemente del país donde sea o la categoría que se esté disputando.

Este viernes tenía lugar la última jornada de la Serie B, la que es la segunda categoría del fútbol italiano. Antes del comienzo de la jornada, la clasificación estaba de la siguiente manera. Empoli primero y ya ascendido con 82 puntos seguido de un Frosinone que cerraba las plazas de ascenso directo con 71 unidades. Fuera de plazas de ascenso directo, se encontraban el Parma con 69 puntos y el Palermo con 68, por lo que cualquiera de los dos podrían dar caza al Frosinone si este conseguía un traspiés en casa ante el Foggia Calcio.

La jornada enfrentaba al Parma en el campo de la Spezia, que no tenía ningún objetivo por cumplir y a un Palermo que, al igual que su rival, visitaba el campo de una Salernitana que no tenía nada en juego. El único contendiente de los que se disputaban el ascenso directo que jugaba en casa era el Frosinone que recibía a un Foggia, que salvo goleada abultada, podría dar alcance a uno de los puestos de play off.

La jornada comenzaba con un Parma que mandaría presión al campo del Frosinone con un gol de Ceravolo a pase de Cicciretti en el minuto 11 de juego.

El éxtasis llegaría a la grada parmesana con en el 35 de juego, el Foggia Calcio se adelantaba en el marcador por medio de un tanto de Mazzeo.

Tras la finalización de sendas primeras mitades, la situación sería diferente a con la que se comenzó la jornada, ya que gracias a la victoria del Foggia Calcio y del Parma, sería el conjunto parmesano quien alcanzaría la segunda plaza que daría acceso a la Serie A.

Tras el paso por vestuarios, el Parma reforzaría sus opciones de conseguir la primera premisa para ascender, que era ganar el partido, ya que un segundo tanto marcado por Cicciretti ponía tierra de por medio en favor del Parma, pero poco duraría la alegría, ya que en cinco minutos de locura en el campo del Frosinone pondría el 2-1 favorable para los canarini gracias a los goles de Paganini y Rubin en propia portería.

La jornada encaraba ya los minutos finales y una jugada desdichada podría cambiar el curso de lo conseguido y peleado durante todo el año y eso pasó ya que en el 89 de juego, un gol de Floriano a pase de Deli pondría el 2-2 en el electrónico del Estadio Benito Stirpe lo que devolvería al Parma a la segunda plaza de la Serie B y su consiguiente ascenso de categoría.

Tras el final en el partido del Parma, a los jugadores parmesanos solo les quedaba esperar que el resultado en el estadio del Frosinone se mantuviese y tras varios minutos de incertidumbre, el árbitro finalizó el partido dando oficialidad al ascenso del Parma cuatro años después de que fuese relegado a la cuarta categoría del fútbol italiano hace tres años por la acumulación de deudas por parte del club parmesano.

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