El entrenador es la cabeza visible de cualquier equipo. Aclamado y querido en muchos momentos, las cruces a veces cargan contra él y debe ser difícil de soportar. Aunque en muchas otras ocasiones disfrutan de noches y etapas históricas y felices. Este es el caso de Hervé Renard, seleccionador del combinado marroquí.
Marruecos regresa a un Mundial 20 años después de su última aparición entre las mejores selecciones del mundo. Por entonces, corría el año 1998 y Francia acogía esta competición y 'Los Leones del Atlas' cayó en la fase de grupos. Ahora, Renard ha devuelto a Marruecos entre los más grandes.
Inicios
Hervé Renard nunca llegó a destacar como futbolista profesional. Comenzó a jugar de defensa en el Cannes y más tarde pasó a las filas del Stade de Vallauris y al SC Draguignan hasta que se retiró en 1998, última aparición de Marruecos en un Mundial.
Tras anunciar su retirada, dirigió a su último club, el SC Draguignan, durante dos temporadas para iniciar su andadura en los banquillos. Después de su primera experiencia como técnico, puso rumbo a China para ser asistente de Claude Le Roy, en el Shanghai COSCO, a lo largo de una temporada para volver a Europa para dirigir al Cambridge United, de la cuarta división inglesa, aunque sin mucha fortuna. Después de dejar el país británico regresó a Francia para entrenar al AS Cherbourg dos temporadas.
Llegada a África
Dejó las categorías inferiores de Europa para emigrar a África y probar fortuna en un fútbol más exótico. Se marchó de la mano de Claude Le Roy, nuevamente, quien lo reclutó para su cuerpo técnico cuando fue contratado como seleccionador de Ghana y este puesto le permitió dirigir sus propias selecciones. Primero fue Zambia con un gran éxito llevándola al tercer puesto en el Campeonato Africano de Naciones de 2009. En 2010 cambió Zambia por Angola pero tras seis meses en el cargo, dimitió como máximo dirigente del combinado nacional por impago.
Claude Le Roy fue el mentor de Hervé Renard y le abrió las puertas de África.
Su buen cartel en el continente africano le convirtió en el nuevo entrenador del USM Alger, club argelino, pero a las pocos meses de estar al frente, dimite de la entidad argelina y regresa a la selección de Zambia en su segunda etapa dirigiendo a este combinado. Si su primera vez fue exitosa, esta segunda fase lo superó porque logró proclamarse campeón de la Copa Africana de Naciones 2012 por primera vez en la historia de este país al vencer en la tanda de penaltis a Costa de Marfil.
Entre Francia y África
El gran trabajo en África llamó la atención de Francia y le llegó la oportunidad de dirigir al Sochaux, su primer equipo en la máxima categoría de una liga europea. Debía salvar al equipo del descenso y tras un turbio comienzo, encarriló al equipo después del mercado invernal y llegó a la última jornada con posibilidades de mantener la categoría. Aunque el encuentro lo ganó su rival, el Évian TG, por 0-3, lo que condenó al Sochaux a descender y a Renard a dejar el club el día siguiente.
Su próximo desafío llegó en verano de 2014, como nuevo seleccionador de Costa de Marfil. Al mando de 'Los Elefantes', ganó su segunda Copa África, siendo también la segunda para el combinado marfileño, en 2015 al derrotar a Ghana en la tanda de penaltis.
Es el primer entrenador que gana dos Copas de África con selecciones diferentes.
Dejó Costa de Marfil para volver a Francia a entrenar al Lille aunque volvió desilusionar. Con solo una victoria en los primeros ocho partidos ligueros, la situación no encontró mejoría y la entidad decidió cesarlo en noviembre de 2015.
Pero el caché que mantenía en África volvió a salvar a Renard y Marruecos lo contrató en 2016 hasta 2018. Llevó a Marruecos a los cuartos de final de la Copa África, donde Egipto eliminó al combinado marroquí aunque lo mejor estaba por llegar. Y no era otra hazaña que el volver a clasificar a Marruecos para un Mundial tras 20 años. Esto propició la renovación de Renard como seleccionador marroquí hasta 2022.
Renard es una prueba de un entrenador que ha debido labrarse un nombre en los banquillos. Comenzó desde lo más bajo y ha conseguido alcanzar clasificar a una humilde selección al Mundial. Ha mostrado dotes para el fútbol africano y se ha especializado en lograr hitos muy importantes en África licenciándose en este continente.