La Mannschaft: una selección cuya etiqueta de candidata no se quita por más que pasen los años. El espectáculo que brindó a lo largo del grupo C en las Eliminatorias europeas fue el que nos tiene acostumbrados. Y para sumarle méritos al gran desempeño futbolístico, fue capas de ganar un título de por medio sin caer en ningún encuentro.
Tras el sorteo anunciado en 2015, se dio a conocer que Alemania (bombo 1) formaría parte del grupo C junto a Republica Checa (bombo 2), Irlanda de Norte (bombo 3), Noruega (bombo 4), Azerbaiyán (bombo 5) y San Marino (bombo 6). Con solo una posibilidad y media de clasificar al Mundial, los teutones debían sacar la mayor cantidad de puntos posibles para permanecer tranquilos, ya que en los dos años siguientes tendrían un par de competiciones a las cuales acudir (Eurocopa 2016 y Copa Confederaciones 2017).
Los primeros tres: un juego de niños
El 4 de septiembre de 2016, luego de la copa continental disputada en Francia (fueron eliminados por el anfitrión en la semifinal), inició oficialmente la carrera de los alemanes en busca de la clasificación. La ''accesibilidad'' del grupo saltaba a la vista, y ello quedó demostrado en el primer encuentro.
La apertura para la Mannschaft fue Noruega, a quien superó con facilidad con doblete de Thomas Müller y uno de Kimmich. En ese entonces aparecían nombres propios calificados como promesas, a quienes Joachim Löw convocó para otorgarles rodaje. Jugadores como Julian Brandt, Julian Weigl y Maximilian Meyer vieron minutos dentro del campo una vez que el resultado estuvo asegurado.
Las jornadas dos y tres (Republica Checa e Irlanda del Norte respectivamente) fueron un calco. Thomas Müller volvió a marcar por duplicado ante los checos y el restante fue de Toni Kroos. Por otro lado, los irlandeses opusieron un poco más de resistencia, pero aparecieron la nueva y vieja escuela del combinado alemán: Julian Draxler y Sami Khedira.
Tres partidos y nueve puntos. Ningún gol en contra. La aplanadora alemana comenzaba a saborear el pasaje a Rusia con autoridad y determinación, además de poseer a un Müller totalmente en llamas de cara a la portería rival.
Un trio de goleadas y el título de por medio
Transcurría la jornada cuatro y Alemania se medía ante San Marino en Serravalle. Si bien se preveía una victoria teutona, el resultado fue tan abultado que las anotaciones cayeron como gotas de lluvia en un terreno árido. Uno de Khedira y Volland, dos de Jonas Héctor, tres de Serge Gnabry y otro en contra sellaron una goleada (0-8) aplastante.
Alemania: 15 goles a favor y 0 en contra frente a San Marino.
Al año siguiente visitaron a Azerbaiyán, donde por fin una selección logró batir la portería alemana. Sin embargo, un 4-1 (Mario Gomez, Thomas Müller y dos de Andre Schürrle) fue suficiente para darle la victoria al conjunto dirigido por Löw. Tras este enorme rendimiento, se jugó la fecha seis, la cual sirvió como pre calentamiento para afrontar la Copa Confederaciones en Rusia. El combinado germano le propinó otra paliza a San Marino (7-0). Esta vez, Draxler, Younes, Mustafi, Brandt y Wagner en tres ocasiones fueron los autores.
Líder e invicto dentro del grupo C, Alemania se dirigió en busca de la Copa Confederaciones. Esta vez, el país que los vería levantar una nueva copa fue Rusia, en donde lograron derrotar a Chile 1-0 en la final y así conseguir la segunda coronación en tres años. Löw había tomado la decisión de afrontar el compromiso con jugadores alternativos a las Eliminatorias, lo que le sirvió para observar y detallar promesas que podrían resultar útiles en la segunda mitad del camino al Mundial 2018.
Broche de oro
Luego de la hazaña en Rusia, el combinado alemán se volvió a centrar en las Eliminatorias a falta de cuatro partidos para el cierre. El regreso de la Mannschaft pudo terminar mal cuando Darida igualó el encuentro para Republica Checa, pero apareció Mats Hummels para impedirlo cuando restaban dos minutos para el pitido final (1-2). Tres días después, en la jornada ocho, despejaron cualquier duda con una apabullante victoria de seis a cero ante Noruega. Mario Gómez, Goretzka, Özil, Draxler y Wegner en dos ocasiones se anotaron en la lista de goleadores.
| Partidos | Triunfos | Igualdades | Derrotas | Goles a favor | Goles en contra | Diferencia | Puntos |
| 10 | 10 | 0 | 0 | 43 | 4 | +39 | 30 |
Ya clasificados, las dos jornadas restantes fueron casi de entrenamiento para los alemanes. En primera instancia relegaron a Irlanda del Norte al segundo puesto con un triunfo tres a uno. Y por último golearon cinco a uno a Azerbaiyán gracias a Emre Can, Rüdiger, Wagne y Goretzka por duplicado.
| Jornada | Rival | Resultado |
| 1 | Noruega | 0-3 |
| 2 | Republica Checa | 3-0 |
| 3 | Irlanda del Norte | 2-0 |
| 4 | San Marino | 0-8 |
| 5 | Azerbaiyán | 1-4 |
| 6 | San Marino | 7-0 |
| 7 | Republica Checa | 1-2 |
| 8 | Noruega | 6-0 |
| 9 | Irlanda del Norte | 1-3 |
| 10 | Azerbaiyán | 5-1 |
El combinado teutón dio lecciones de fútbol por momentos, más allá de los rivales que padecieron su continua paternidad. Una vez más, Alemania clasificó con facilidad a un Mundial. En esta ocasión será el encargado de defender el título, y para lograrlo deberá superar un grupo conformado por México, Suecia y Corea del Sur. En el caso de clasificar a octavos podría medirse con Brasil nuevamente en una Copa del Mundo, lo que para el público amante éste deporte significaría una final anticipada en el torneo más apasionante a nivel de selecciones.