Todo está preparado para que la Copa del Mundo arranque. Un total de 32 equipos buscarán la gloria. Uno de ellos es la Selección Belga, que tras dos intentos fracasados de llegar más lejos de cuartos de final, sabe que, por plantilla, por nuevo entrenador, y sobre todo, por la fase de clasificación realizada, puede ser su torneo.
Los de Roberto Martínez cerraron su clasificación con 28 puntos, tan solo dejándose dos puntos en toda la fase de clasificación, en la que se midió a Grecia, Bosnia, Chipre, Estonia y Gibraltar.
Un arranque espectacular
La fase de clasificación comenzó para la Selección de Bélgica con una visita a Chipre, que se resolvería en la segunda mitad, aunque en la primera Romelu Lukaku ya había visto puerta por primera vez, a los 16 minutos de partido, poniendo el 0-1 con el que se llegaría al descanso. Ya en la segunda mitad, de nuevo Lukaku y Carrasco finiquitaron el choque con el definitivo 0-3.
El segundo encuentro del grupo fue contra Bosnia, en el mes de octubre, los belgas volvieron a ponerse en modo apisonadora y a la media hora, con dos goles en tres minutos, uno de Spahic en propia puerta, y otro de Hazard, ya habían puesto tierra de por medio. Alderweireld y Lukaku en la segunda mitad volvieron a cerrar una goleada en dos encuentros.
La primera parte de la fase de clasificación se cerró tres días después, con una nueva goleada, y de nuevo sin encajar goles por parte de los belgas, que pese a realizar una rotación bastante notable, Gibraltar no opuso resistencia, 0-6 con tres goles en cada periodo, Witsel, y doblete de Benteke, que anotó en el primer minuto, fueron los goleadores del primer periodo. Mertens, de nuevo Benteke y Hazard cerraron la cuenta para los belgas.
Un empate entre dos grandes actuaciones
La fase de clasificación continuó en el mes de marzo, donde Bélgica recibiría a Estonia, y encajaría el primer gol en la competición a la media hora de partido, pero daría igual, cuando la selección de Roberto Martínez encajó el tanto de Anier, los reds devils ya ganaban 3-0, goles obra de Meunier, Mertens y Hazard. En la segunda mitad, otros cinco goles, obra de Carrasco, Mertens, Klavan en propia puerta y doblete de Lukaku cerraron el definitivo 8-1.
Y en el mes de marzo llegó el tropiezo. Duelo directo para evitar la repesca entre Bélgica y Grecia, y partido gris de los de Roberto Martínez, que vieron como la selección helena se adelantaba en el marcador al borde del descanso con gol de Mitroglou, y después de mucho apretar, y de alguna que otra ocasión visitante, Lukaku empataba en el 89, dando un gran punto a los belgas.
La segunda vuelta de la fase de clasificación comenzó con una visita de Bélgica a Estonia, donde de nuevo se vio una rotación, aunque no supuso ningún problema para que los belgas se llevaran los tres puntos, un gol de Mertens cerca de la media hora, y otro de Chadli al final del encuentro dieron otros tres puntos importantes a Bélgica, que se la jugaría en Grecia en el último tramo.
Último tramo horrible para Grecia, fantástico para Bélgica
Al empezar el último tramo de cuatro partidos, los red devils eran primero de grupo con 16 puntos, cuatro por encima de su máximo rival, la selección helena. Sin embargo, todo iba a cambiar en dos partidos. Mientras Grecia empataba sin goles en casa frente a Estonia, Bélgica goleaba de nuevo a Gibraltar por 9-0 con hat tricks de Meunier y Lukaku y tres goles de Mertens, Witsel y Hazard.
Seis puntos de Bélgica por uno de Grecia cerraron el grupo
Y llegó el partido definitivo. Bélgica visitaba a la Selección Griega en el Giorgios Karaiskakis, en un encuentro que se decidió en cuatro minutos en la segunda mitad. Verthongen adelantaba en el minuto 70 a los belgas tras una jugada a balón parado, pero tan solo tres minutos después, Zeca igualó el choque. Lukaku tardó tan solo un minuto en poner el definitivo 1-2 para poner a Bélgica matemáticamente en la Copa del Mundo.
Pese a estar ya en Rusia, Bélgica consiguió dos victorias más. La primera, frente a Bosnia, remontando un 2-1, Meunier a los cuatro minutos ponía el 0-1, sin embargo, Medunjanin y Visca ponían por delante a Bosnia antes del descanso. Verthongen y Batshuayi remontaban el partido para los red devils, que todavía verían como Dumic ponía por delante a Bosnia a ocho minutos del final. Tan solo dos minutos después, Carrasco cerró con el 3-4.
La fase de clasificación se cerró con otra goleada, la última de la fase, en la visita de Chipre al estadio Rey Balduino, donde obtuvieron una nueva goleada por 4-0, con doblete de Eden Hazard, y goles de Thorgan Hazard y Romelu Lukaku, por lo que los red devils cerraron la fase de clasificación cediendo tan solo un punto.