Rusia contra Egipto. Zares contra faraones. El próximo martes estas selecciones abrirán la segunda jornada del grupo A de este Mundial de Rusia 2018, y la victoria se antoja providencial para ambos equipos. De alzarse con ella los anfitriones, sellarían su clasificación para los octavos de final. Por el otro lado, también eliminarían a los egipcios, que en la primera jornada cayeron derrotados ante Uruguay con un gol de Giménez en el minuto 89.
El encuentro llega como el primer enfrentamiento de la historia entre los combinados de Rusia y Egipto, y llegará con esa vital importancia los egipcios, aunque recuperarán a su estrella Mohamed Salah.
Bajo palos: Akinfeev contra El Shenawy
Igor Akinfeev ,el veterano portero de 32 años, sigue guardando desde hace ya bastantes años tanto la portería de la selección rusa como la de su club, el CSKA de Moscú. En el anterior encuentro, en el que su equipo se impuso por 5-0 a Arabia Saudí, ni siquiera tuvo que intervenir puesto que su rival no llegó a disparar el esférico entre los tres palos que defendía.
Del otro lado estará seguramente Mohamed El Shenawy, que ante Uruguay atajó todos los tiros charruas que llegaron a su portería, salvo el del gol de Giménez. De hecho, le fue otorgado el premio de mejor jugador del partido, que no aceptó por motivos religiosos al estar patrocinado por una marca de cerveza. Aunque no debutó con el combinado de su país hasta el pasado 23 de marzo, toda su carrera la ha desarrollado en importantes clubs de la Liga Egipcia, de la que ha sido campeón esta temporada con el Al-Ahly.
En las defensas: experiencia en ambos bandos
En el encuentro de ida, ambos combinados introdujeron experiencia en los cuatro puestos de atrás. Aunque en el plantel de Rusia, estaba la duda de si Kutepov (con sólo siete internacionalidades) y Mario Fernandes (con cinco) darían la talla en un campeonato como el Mundial, realizaron un gran encuentro. De todos modos, estaban respaldados por los eternos Ignasevich (122 encuentros con Rusia) y Zhirkov (84).
Algunos encuentros más sumaban con su selección los cuatro defensores que puso en el verde Héctor Cúper ante Uruguay, y que se dejaron todo a pesar de la derrota final. A las 117 apariciones internacionales del capitán Ahmed Fathy (con tres Copas África en su palmarés), habría que sumarle las 52 de Abdel Shafy, las 46 de Hegazy y las 22 de Omar Gabr.
Manejando el centro del campo: velocidad y calidad
A partir del centro del campo, ambos equipos empiezan ya a tener piezas de gran calidad y velocidad en su plantilla, también algo menos veteranos que los defensores. Aunque en el primer encuentro Rusia alineó al experimentado extremo del Spartak de Moscú Aleksandr Samedov (33 años), ninguno de los que lo acompañaban en la medular del campo superaban los 28 años. Además de Zobnin (24 años) le acompañaban Gazinskiy y Dzagoev (ambos con 28) y Golovin (sólo 22 años) que se lució con un gol y dos asistencias. Tampoco pasaba de los 28 años Denis Cheryshev (27), que sustituyó a Dzagoev tras lesionarse.
Caso parecido ocurrió con el medio campo de Egipto frente a Uruguay. Al veterano El Said Bekhit (32 años), le acompañaron Tarek Hamed (29) ayudando a los defensas, Mohamed Elneny (25) repartiendo juego, y los extremos Amr Warda (24) y Trezeguet (23) aportando velocidad en las contras. Sin embargo, se espera que Warda deje su sitio a Sallah en el vital encuentro ante los rusos.
Los dos nueves: centímetros y potencia
Ambas selecciones cuentan con bastantes centímetros entre sus delanteros centro. Aunque Smolov (1,85 metros de altura) fue el elegido por Cherchesov en el primer encuentro, su sustituto en el segundo tiempo, Artem Dzyuba (1,96) respondió a su técnico aportando un gol a la media decena que anotó su equipo.
Por parte de los faraones, Marwan Mohsen (con 1,87 metros de alto) ayudó bastante a la hora de proteger el balón y descargar el juego a las bandas para montar contraataques, a pesar de tener que vérselas con Godín y Giménez.
Las estrellas: Golovin y Salah
La estrella de Rusia en el primer encuentro, con permiso de los dos goles de Cheryshev, fue Aleksandr Golovin, que realizó un impecable encuentro (un gol y dos asistencias) tras dejar Dzagoev libre la posición de mediapunta.
En la parte egipcia parece que ya está completamente listo para jugar Mohamed Salah. La estrella del Liverpool, que se lesionó en la última final de la Champions League, aportó a su equipo 32 goles y 14 asistencias en la Premier League, lo que le valió para llevarse el trofeo de mejor jugador de la temporada. Además, marcó los dos goles que clasificaron a Egipto para el Mundial en el partido definitivo ante Congo.
Los místers: Cherchesov contra Cúper
Habiendo participado como jugador en el Mudial de 1994 y en las Eurocopas de 1992 y 1996, Stanislav Cherchesov lleva entrenando a la selección rusa desde 2016, en un total de 26 encuentros. A nivel de clubes, dirigió a varios equipos de Rusia, Austria y Polonia.
Bastante más experiencia lleva a sus espaldas Héctor Cúper. A parte de haber logrado la Supercopa de España con Mallorca y Valencia y la Copa Conmebol en las filas de Lanús, el técnico argentino cuenta con hasta ocho subcampeonatos, repartidos por su país natal, España, Italia y Grecia, además de la Copa África del pasado año ya con Egipto. Al combinado faraón lleva dirigiéndolo desde el año 2015, con 36 partidos en su haber.
Máxima igualdad
En definitiva será un partido bastante igualado, aunque Rusia parta como ligera favorita tras conseguir los primeros 3 puntos del campeonato y jugar ante su afición. Sin embargo, ahí estará Mohamed Salah para intentar contrarrestarlo y evitar que Egipto caiga eliminada de la competición.