Bélgica y Túnez se verán las caras este sábado a las 14:00 en el Otkrytie Arena. Ambos equipos, de la mano de sus entrenadores, irán a por la victoria. Si la selección belga gana el encuentro, se clasifica matemáticamente a octavos de final; por su parte, los tunecinos tienen que ganar si quieren meterse en la lucha por los dos primeros puestos para no quedar eliminados en la primera fase.

Roberto Martínez lleva en los banquillos de Bélgica desde agosto de 2016. El técnico español ha trabajado prácticamente durante toda su carrera en Inglaterra. Bob ha hecho de Bélgica un equipo ofensivo, basado en un esquema 3-5-2, y comandado en el campo por los mejores jugadores. Este sistema le sirvió para lograr la victoria contundente por 3-0 ante Panamá. Con este estilo y juego, Martínez quiere que su equipo gane por contundencia a Túnez, una selección teóricamente inferior a la belga, y clasificarse así a octavos de final.

Por su parte, Nabil Maâloul lleva dirigiendo a Túnez desde abril de 2017. Viene de comandar a los tunecinos en una gran clasificación a la Copa del Mundo, y de perder en el descuento ante Inglaterra in extremis​ en la primera jornada. La formación del combinado nacional africano es 4-2-3-1. El técnico tunecino apuesta por un juego de calidad con futbolistas talentosos, y quiere que con esto su equipo marque la diferencia para el partido frente a Bélgica, y ganar así la segunda victoria de la historia de Túnez en un Mundial que le daría opciones de pasar a octavos en la siguiente fase, algo que sería una osadía y con lo que sueña el país africano.

El sábado todos estarán pendiente del duelo táctico de ambos técnicos, de quién se llevará el gato al agua y de quién logrará el triunfo vital. O, de lo contrario, un empate.