Desde el sorteo de los grupos de esta Copa del Mundo, parecía obvio que el que terminaría en primer lugar en el Grupo E sería Brasil. Serbia, Costa Rica y Suiza, serían los otros tres equipos que lucharían por un puesto que da el billete para jugar los octavos de final. 

Quizás el favorito entre estos tres fuera Suiza, pero Serbia ha acabado llegando al Mundial de Rusia con varios jugadores en un estado de forma excepcional y, además, tras la participación de Costa Rica en el Mundial de Brasil, donde cayeron en cuartos de final, en la tanda penaltis, contra la que en ese momento era la subcampeona del mundo, tampoco se les podía descartar para colarse entre los dieciséis mejores de esta Copa del Mundo.

El Mundial de las sorpresas 

Tras el pinchazo de Argentina contra la debutante Islandia y la derrota de la vigente campeona del Mundo, Alemania, frente a México, Brasil debutaba contra Suiza en un partido que se le pondría de cara en el minuto 20. Sin embargo, la canarinha seguiría engordando la lista de sorpresas de la primera jornada, ya que Zuber empataría el partido en el minuto 50, haciendo el definitivo 1-1. 

Por su parte, Serbia venció por 1-0 a Costa Rica, gracias a un buen gol de falta de Kolarov, que dejaba a los de Krstajic como líderes en solitario tras la segunda jornada.

La jornada del minuto 90

La segunda jornada estuvo a punto de dejar bastante tocados a los de Tite, que hasta el minuto 90 fueron incapaces de hacer gol a Costa Rica. Finalmente, marcaron Coutinho y Neymar en el descuento y Brasil se llevó su primera victoria de este Mundial.

En el otro partido del grupo, Serbia se adelantó en el marcador en el minuto 5 y, al descanso, era matemáticamente equipo de octavos de final. Sin embargo, los suizos consiguieron darle la vuelta al marcador y vencer 2-1, con el tanto decisivo de Shaqiri en el minuto 90. 

Por tanto, de no haberse producido los goles en los descuentos, Brasil habría terminado la segunda jornada como tercer clasificado, con dos puntos, por detrás de Suiza, también con dos puntos pero con más goles a favor; y de Serbia, que tendría cuatro puntos.

Relativa calma

A pesar de que ningún equipo llegó clasificado a la última jornada, las cosas estaban muy de cara para Brasil y Suiza. Los suizos jugarían contra una Costa Rica ya eliminada y la canarinha contra una Serbia a la que solo le valía ganar o el empate, en caso de que Costa Rica ganase por más de un gol a los suizos, algo que parecía impensable, ya que no había nada en juego para los ticos. Finalmente, comenzó a rodar el balón simultáneamente en ambos partidos y en ninguno saltó la sorpresa. 

Brasil desplegó un gran juego en su partido frente a Serbia, que se despidió del Mundial cayendo 2-0 frente a la pentacampeona del mundo, mientras que, en el otro partido, los ticos se llevaron un punto del Mundial gracias a un penalti en el último minuto del descuento que dio en el larguero, rebotó en la espalda del portero y se coló por la otra escuadra de la portería.

Por tanto, a pesar de estar en el Mundial más imprevisible de los últimos tiempos, y de haber pasado varios apuros, terminaron clasificándose las favoritas, Brasil y Suiza. Al ser primera de grupo, Brasil se enfrentará en octavos a México; mientras que los suizos, que van por el lado a priori más asequible del cuadro, se medirán a Suecia por un puesto entre los ocho mejores del mundo.