Se disiparon los rumores, tras haber quedado eliminado en fase de grupos por primera vez en la historia, la directiva del seleccionado alemán ratifica en su puesto a su entrenador Joachim Löw pese a los comentarios que lo alejaban de Die Mannschaft.

Dirigir a la selección germana es un gran reto para cualquier entrenador, haber ganado la Copa del Mundo en Brasil 2014 fue una de las claves por las que el técnico continuará en su cargo, el mismo entrenador se sintió decepcionado por la actuación en Rusia 2018 sintió que podía dar mas y que  no iba a dar un paso al costado sino todo lo contrario, la motivación extra para cambiar la situación fue clave.

“Hemos tenido un intercambio muy abierto, estamos convencido que  no podemos analizar al entrenador  por un mal torneo”

Reinhald Grinder lo respaldó, el entrenador tiene contrato vigente hasta el año 2022, para el presidente de la DFB es el indicado para reflotar al equipo alemán en lo que fue la peor prestación de los germanos en la historia de los mundiales.
Su vínculo se había extendido previo al comienzo de la Copa del Mundo por lo que el bajo rendimiento de sus dirigidos no cambio el parecer de los directivos de la selección alemana.

Tomó el equipo tras el Mundial 2006 disputado en Alemania donde cayeron en semifinales frente a Italia, en ese entonces el entrenador era Jurgen Klinsmann y el segundo entrenador era Joachim Löw.

Con el correr del tiempo él y su cuerpo técnico deberán hacer un análisis profundo y tomar decisiones al respecto, en la agenda se disputará un amistoso en el mes de septiembre frente a Francia por lo que comenzará cuanto antes los trabajos del combinado nacional teutón de cara al próximo encuentro donde pueden haber sorpresas.

Pese a ser criticado duramente por la prensa, el seleccionador consiguió llegar a la final de la Eurocopa 2008 cayendo frente a España, logró el tercer puesto en Sudáfrica 2010 venciendo a Uruguay y llego a las semifinales de las Eurocopa del 2012 y 2016.