Inglaterra avanza con paso firme y está a noventa minutos de alcanzar una nueva final mundialista, algo que no logra desde que fueran campeones del mundo en el año 1966, precisamente el torneo que ellos mismos organizaron. Desde entonces, la ronda máxima que han alcanzado, en tan solo una ocasión, han sido las semifinales, en Italia 1990, por lo que este Mundial la selección capitaneada desde el banquillo por Southgate está logrando algo histórico. Además, ante Croacia, todos los jugadores ingleses llegan limpios, por lo que no se perderá ninguno la semifinal.

Ante Suecia, el combinado inglés tenía el riesgo de que cuatro de sus jugadores pudieran perderse la semifinal, en caso de que pasaran, como así hicieron, y ellos eran: Walker, Loftus-Cheek, Henderson y Lingard, que venían arrastrando una amarilla desde el inicio del torneo. En el caso de Walker, Henderson y Lingard, era un verdadero problema porque para Southgate son piezas fundamentales en el equipo, sobre todo el defensa, una de las sorpresas más notables en este Mundial. Sin embargo, ante Suecia, sólo el defensa y goleador Maguire vio la cartulina amarilla, por lo que los jugadores mencionados anteriormente, y el propio central inglés, jugarán las semifinales ante Croacia con todos sus jugadores disponibles, ya que las amarillas se limpian en semifinales.

En Croacia, tampoco habrá nadie que se pierda las semifinales, por lo que se vivirá un choque digno de unas semifinales de una Copa del Mundo. Ambos combinados han merecido llegar a esta ronda. En el caso inglés, solo han perdido un encuentro, el que tuvo lugar ante Bélgica en la tercera jornada de la fase de grupos, mientras que Croacia, aún no sabe lo que es perder. Además, los croatas han pasado sus dos últimas rondas, (octavos y cuartos de final) mediante la tanda de penaltis.

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Sobre el autor
Alejandro López
Espíritu competitivo. Lo dificil se hace, lo imposible se intenta. Me puedes leer en @Alemania_Vavel y @GranadaCF_VAVEL. Hay gente que dice que el fútbol no tiene nada que ver con la vida. No sé cuánto saben de la vida, pero de fútbol, poco.