El partido que todos quieren disputar en una Copa del Mundo ya tiene definidos a sus dos protagonistas. Francia con una camada de jóvenes talentosos enfrenta al caballo negro Croacia que busca su primer titulo. Las figuras Mbappé y Modrić tendrán la responsabilidad de crear oportunidades de gol, e inclusive marcar el gol de la diferencia.
Mbappé, 19 años de puro talento
Se venía advirtiendo que Kylian Mbappé podría consolidarse como un gran jugador en su primer mundial y siendo de verdad el jugador que marcara la diferencia en el ataque. Se adueñó de la titularidad y el francés jugando como extremo por derecha que aprovecha su gran velocidad para hacer los ataques desde su propio terreno hasta el otro extremo.
Durante este mundial se ha desempeñado siempre como el hombre referente de Francia por la banda derecha y haciendo una gran pareja por ese costado con Pavard. Pero las variantes son tantas con los galos, que también se le ha visto por la banda izquierda. En los partidos de la fase de eliminatoria, el parisino ha tomado el mando en la delantera; sobre todo en los octavos de final ante Argentina donde convirtió un doblete y participó en la jugada del penal. Han sido tres goles hasta el momento para colocarse como el máximo candidato a ganar al jugador joven y tal vez el mejor jugador.
Modrić, a por el balón de oro
Desde el primer juego, el capitán de Croacia ha tomado el mando del mediocampo y con una parte en ese sector de la cancha dominado por Rakitić y Perišić ha sido más fácil para Modrić poder tomar el estandarte de los balcánicos. Podemos ver al croata a un lado de su portería y tan solo unos segundos más tarde, darle un pase para gol a un compañero mejor colocado.
Lo que ha hecho Luka Modrić en estos seis partidos hasta el momento es fenomenal, no se ha cansado de recuperar pelotas y convertirlas en algo más que una aproximación. Deberá sobreponerse al cansancio que tiene en sus piernas, porque con un partido más encima deberá quitarle la pelota a la pareja de Kanté y Pogba, para poder ser los mandones en ese sector de la cancha y buscar que Mario Mandžukić defina las opciones de peligro.