Nueva victoria de Minnesota ante un rival directo para la clasificación a PlayOff´s. En la primera mitad ninguno de los dos equipos consiguió demostrar superioridad sobre el rival, lo que llevó a que se llegase al descanso con el empate a cero inicial. Fue en la segunda parte en la que los locales aprovecharon varias acciones a la contra para decantar el resultado a su favor y llevarse unos tres puntos muy valiosos.
Batalla sin ocasiones
Buen comienzo por parte del conjunto local que mantuvo el control de la pelota que insistió con mayor determinación sobre la portería rival, aunque la suerte no les fue de cara. Generó un par de acercamiento en el que sólo la falta de acierto en el pase final les privó de haberse puesto por delante en el luminoso.
Pasados los diez primeros minutos, Real Salt Lake comenzó a tener mayor protagonismo en el partido, discutiéndole el control de la pelota a su rival, aunque fueron estos los que gozaron de una maravillosa ocasión para haber anotado. Darwin Quintero controló un balón en las inmediaciones del área y con un fuerte disparo estuvo a punto se sorprender a Rimando.
Sobre el ecuador de la primera parte, el conjunto visitante se había conseguido sacudir por completo la presión a la que su rival le sometió, y como si fuese un partido de fútbol americano, poco a poco fue sumando terreno y jugando más cerca del área de su rival.
Sin embargo, fueron los locales los que una vez perdido el control del juego, tuvieron las mejores ocasiones. Al contraataque, Minnesota United logró coger desprevenida a la defensa visitante y tanto Ramirez como Ibarra generaron varios disparos a portería, que estuvieron muy cerca de convertirse en gol.
Conforme el partido se fue acercando al final de los primeros 45 minutos, las fuerzas entre ambos equipos se igualaron, aunque fueron los locales los que más presencia tuvieron en el área. Con acciones a balón parado estuvieron a punto de decantar el resultado de su lado, pero sus remates se marcharon cerca de la portería.
Bacanal goleadora
La segunda parte comenzó de igual manera a como acabó la anterior, con el equipo visitante teniendo mayor presencia en el ataque y su rival buscando contraatacar. Y fue con una de estas acciones con las que a los primeros minutos, ‘Los Loons’ se pusieron por delante en el marcador. En una polémica acción, Quintero se zafó de su defensor y coloco un centro al interior del área donde apareció Ibson desde segunda línea. El mediocentro brasileño sólo tuvo que empujar el balón al fondo de la red.
La respuesta del conjunto visitante no se hizo esperar y adelantó varios metros sus líneas con la firme intención de conseguir el gol que les permitiese empatar el encuentro. Pero este planteamiento no les llevó a otra cosa que a recibir un segundo gol, que echaba por tierra todas las esperanzas de sus aficionados.
Darwin Quintero apareció nuevamente con espacios, algo que el delantero colombiano saca mucho provecho, y con una definición escandalosa aumento la distancia en el marcador. Al igual que hiciese la pasada semana, vio al guardameta adelantado y con una vaselina superó a este, dejando al estadio atónito.
Sin embargo hay alegrías que nunca legan solas y a los pocos minutos de esta obra de arte de Quintero, un nuevo contraataque permitió a los locales colocar el tercer y definitivo gol, que daba casi por segura la victoria. Ibarra recibió un balón a la espalda de la defensa para presentarse solo ante el guardameta y al que superó con un disparo cruzado.
Con este amplio marcador, Minnesota United retrasó ligeramente sus líneas y se encerró en campo propio, permitiendo a su rival poder sorprenderle con cualquier ocasión. Y fue de esa manera como los ‘Royals’ aprovecharon una falta en el borde del área para que Plata recortase distancia con un libre directo muy potente.
Con diez minutos por disputarse y las esperanzas intactas, Real Salt Lake continuó insistiendo sobre la portería, lo que permitió al pequeño atacante ecuatoriano encontrar un segundo gol que les ponía muy cerca el posible empate.
Estos goles provocaron que el equipo local tuviese nuevamente que adelantar sus líneas de presión, sino quería que el buen resultado que había conseguido, se convirtiese en una pesadilla. Consiguió en los últimos minutos acumular varias llegadas, pero finalmente el resultado finalizó con una nueva victoria como local tras la conseguida ante Toronto la pasada semana.