Ante la duda, el que aporte algo

Había ganas de saber cuáles eran las situaciones que iban a cambiar con la llegada de Unai Emery, pero lo cierto es que poco o nada se nota de momento su aparición a los mandos del conjunto gunner. Los resultados siguen sin llegar ante rivales directos, la defensa sigue haciendo aguas, el esquema es inamovible y la apuesta por los jóvenes sigue en todo lo alto. Para lo bueno y lo malo, el reemplazo de Arsène Wenger parece haber desestimado la idea del riesgo. Emery se ha basado en los pilares, sólidos, por otra parte, establecidos por el francés y, a partir de ahí, ir construyendo su imperio. Sin embargo, da la sensación de que esa vía parece no ser la correcta, pues si algo esperaba el aficionado gunner era un cambio de rumbo.

No obstante, una de esas ideas arraigadas con Wenger al mando es la de depositar confianza en los más jóvenes. Las estrellas del mañana que comienzan a brillar hoy. Al término del partido ante el Chelsea, el técnico de Hondarribia subrayaba el hecho de haber terminado en Stamford Bridge con un centro del campo formado por Lucas Torreira y Mattéo Guendouzi. O lo que es lo mismo, por un jugador de 22 años y otro de 19. Es este último el que ha brillado con luz propia en el inicio de temporada gunner, aunque a decir verdad ya lo venía haciendo desde la pretemporada.

Una grata sorpresa

Muchas particularidades comparten Guendouzi y Torreira, aunque ninguna de ellas tiene que ver con la repercusión de su fichaje. Mientras que la llegada del uruguayo era un secreto a voces desde antes del inicio de la cita mundialista, la contratación del francés fue rápida y discreta. En un abrir y cerrar de ojos el Arsenal presentaba al mediocentro que había brillado con Uruguay en Rusia y a un joven francés de apellido impronunciable que nadie sabía muy bien para qué llegaba a Londres. Sin embargo, y con el balón rodando sobre el césped, pronto los aficionados se dieron cuenta de que aquel fino y espigado centrocampista de pelo rizado tenía mucho que contar sobre el rectángulo verde.

Matteo Guendouzi. Gunner.#GunnerGuendouzi  pic.twitter.com/FP7cY3d9Yi

— Arsenal FC (@Arsenal) 11 de julio de 2018

Guendouzi solo contaba con 417 minutos de experiencia al más alto nivel

Joven, muy joven, Guendouzi puede presumir de estar viviendo sus primeros pasos en la élite del fútbol europeo. Y es que, toda su experiencia al más alto nivel se reducía a la disputa de 417 minutos en Ligue 1 con la camiseta del FC Lorient, club que en 2017 descendió a la segunda división francesa donde el actual jugador del Arsenal ya acumuló 18 duelos. Con este curriculum nadie esperaba que se hiciera con un puesto de titular, pero lo cierto es que ha gustado a Unai Emery, que ve en él un ejemplo a seguir para el resto de compañeros. La espectacularidad de su irrupción en el once inicial se entiende mejor si se citan a los jugadores con los que compite por un puesto en el centro del campo gunner: Mohamed Elneny, Aaron Ramsey, Lucas Torreira, Granit Xhaka y Ainsley Maitland-Niles.

Como es lógico, nadie deposita toda su confianza en él, aunque esto viene dado única y exclusivamente por su edad, su nombre y su precio. Con Guendouzi hay una pregunta muy clara, ¿qué sucedería si fuera más veterano, más famoso y más caro? A buen seguro, su titularidad estaría lejos de toda duda, su repercusión en el esquema sería mucho más alta y su nombre resonaría en todos los medios de comunicación. Sin embargo, la realidad es que tiene apenas 19 años, que se llama Mattéo Guendouzi y que ha llegado sin cartel publicitario alguno y por apenas ocho millones de euros. De nuevo se demuestra que todo lo que rodea a un futbolista le hace ser o no importante, aunque hay ocasiones en las que, para beneficio del deporte, priman los atributos técnicos, tácticos y físicos.

Guendouzi contra todo

Y todo esto sin un esquema que le beneficie. Porque la realidad es que el planteamiento de 4-2-3-1 por el que se ha decidido Unai Emery beneficia poco o nada a un jugador de las características del franco-marroquí. Desde luego, y como es lógico, Guendouzi tiene muchas carencias, casi tantas como virtudes. De su falta de experiencia se desprenden sus fallos en la colocación, errores en el pase y ausencia de lectura de juego. Se podría decir que no es un jugador ni ofensivo ni defensivo, que es equilibrado para bien y para mal. Además, el pobre nivel de Granit Xhaka, su acompañante en los dos partidos oficiales, le ha hecho acaparar más focos negativos que positivos. Su entendimiento con el suizo está lejos de ser el idóneo, algo que se resume con facilidad. Si Xhaka sube, Guendouzi hace su cobertura. Si es Guendouzi el que se anima a ir al ataque, el suizo le acompaña. Así, cualquier fallo del recién llegado llama mucho más la atención. Así, Guendouzi parece que comete más errores de los que realmente le corresponden.

Guendouzi tiene errores propios de un jugador joven y sin experiencia

La solución puede estar, de nuevo, en Lucas Torreira. Se desconoce si el uruguayo es suplente por falta de estado físico o por una decisión de un Unai Emery que, eso sí, le ha terminado situando en el terreno de juego en los dos partidos ligueros. Con el sudamericano sobre el césped ejerciendo de pivote defensivo, tanto Guendouzi como su otro compañero en la línea de tres jugarían con red. Fallar no importaría tanto. Errar estaría permitido al tener a un futbolista detrás que mejora en los conceptos defensivos.

Siempre se muestra

La otra gran capacidad de Guendouzi es la de acaparar las miradas. Es uno de esos jugadores a los que les gusta estar en escena, sentirse importante, decir aquí estoy yo. Independientemente de que lo haga mejor o peor, es un futbolista que no se esconde y esos son los jugadores que siempre tienen que estar en el terreno de juego. Si sale a tapar y le regatean, en lugar de lamentarse se levanta y continúa persiguiendo a su rival. Si falla un pase, lo vuelve a intentar. A pundonor, ganas y esfuerzo no le gana nadie.

Guendouzi es el jugador del Arsenal que más veces ha entrado en contacto con el balón

Además, cabe destacar su serenidad en momentos de tensión. Al igual que no ha sido fácil para el Arsenal como equipo el inicio de liga, enfrentándose a Manchester City y Chelsea, tampoco lo ha sido para Guendouzi tener delante a futbolistas de la talla de Mahrez, Sterling, Agüero, Jorginho, Kanté o Morata. Han sido dos partidos en los que ha disputado los noventa minutos, rayando a un alto nivel. Siendo la principal vía de salida de su equipo, pues no por nada es el jugador gunner que más veces ha entrado en contacto con el balón, con 139 toques, dos más que Mustafi, único jugador que le aventaja en número de pases, con 104 por los 96 del franco-marroquí.

Un ejemplo y un aviso

Finalmente, hay que destacar que Mattéo Guendouzi se ha postulado como un ejemplo dentro del vestuario gunner. Su llegada directamente al once inicial utilizando su compromiso y ganas como principal atributo son todo un ejemplo para aquellos que tienen que ganarse el puesto. Por si esto no fuera poco en un club como el Arsenal, con estrellas al más alto nivel, el centrocampista es todo un aviso para el resto de compañeros, que no pueden relajarse dado el nivel del recién llegado. Destacan en este último apartado sus compañeros en el centro del campo Mesut Özil y Granit Xhaka.

Ambos están realizando un inicio de temporada para olvidar, pues ni el alemán es aquel que llegó del Real Madrid, ni el suizo el que dejó un buen sabor de boca la pasada temporada. Tras unos malos años en la parroquia gunner, el aficionado del Emirates Stadium quiere ver a más jugadores como Guendouzi y menos futbolistas apáticos, de los que andan sin rumbo sobre el terreno de juego. Hay ocasiones en las que los datos hablan por sí solos, por eso se antoja necesaria una tabla en la que se comparan las estadísticas de estos tres integrantes de la plantilla de Unai Emery en los partidos ante Manchester City y Chelsea.

Reflejada a la perfección la incidencia de Mattéo Guendouzi en el Arsenal a través de estos datos, solo queda saber si esta va a ser la línea del joven centrocampista a lo largo del año. Por ganas, ambición e ímpetu no va a ser, pues estos son los principales atributos de un futbolista que, aunque está comenzando su andadura al más alto nivel, ya está dejando tras de sí una hilera de titulares que sirven como ejemplo para el resto de compañeros de profesión.