El Liverpool se ha posicionado como un firme candidato a la Premier League. Su buena temporada en el curso 2017/18 y sus fichajes en verano le permiten ser, a priori en todas las apuestas, el único equipo capaz de pelear con el Manchester City. Sin embargo, no pasa desapercibido que lo ha logrado a base de invertir más dinero que tiempo. Los canteranos de los Reds cada vez sufren más para tener un hueco en la plantilla y acaban marchándose para encontrar minutos.

Esta es una tendencia muy acusada en los equipos que marcan el ritmo de la actual Premier League, con la excepción del Tottenham. Los grandes desembolsos en los mercados acaban con el espacio de jugadores formados en las canteras que podrían ser respuestas a las necesidades.

Fuente: www.liverpoolfc.com
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En el periodo de transferencias estival ha sido el Liverpool uno de los encargados de saltar la banca, dejando 182 millones de euros por Europa para pelear por los títulos. Además, ha permitido las cesiones de los más prometedores de su Academia a excepción de Brewster -actualmente lesionado-, para buscar minutos de formación que les permitan jugar para el Liverpool en el futuro.

Una rutina veraniega en Anfield

De hecho, desde hace algunas campañas, el flujo de salida de los jóvenes se ha acelerado. En el verano de 2013, Tiago Ilori, Jordon Ibe, Sebastián Coates, Andre Wisdom, Joao Teixeira y Suso fueron cedidos tras no encontrar minutos. El año siguiente, Suso fue vendido, mientras que los otros volvieron a salir en cesiones.

Otros nombres que dejaron la disciplina durante una campaña fueron Danny Ward, Luis Alberto y Kevin Stewart, entre otros. Estos futbolistas fueron encadenando cesiones durante varios cursos hasta abandonar el Liverpool definitivamente. El último de ellos ha sido Danny Ward, hacia el Leicester en este 2018, tras solo jugar 270 minutos en las dos de las últimas temporadas que pasó en Anfield.

Fuente: www.liverpoolfc.com
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Sin embargo, la Academia de Kirkby sigue dando grandes proyectos de futbolistas. Woodburn, Jones, Alexander-Arnold, Ejaria, Phillips, Awoniyi, Wilson y Brewster son los grandes nombres que deberían cubrir al Liverpool de gloria en la próxima década. Sumados a Grujic, Gomez, Camacho, Solanke y Grabara, que fueron fichados para terminar su formación en Anfield, los Reds podrían presentar un once repleto de juventud y calidad.

Klopp no termina de darles paso

Pero parecen encontrarse con un obstáculo inesperado: el entrenador. Desde que llegara el alemán a Anfield, los jóvenes no han tenido mucho recorrido dentro del equipo. Contando con que la primera temporada que pasó en Inglaterra -la 15/16- no la dirigió entera, se puede ver que usó con asiduidad a algunos canteranos, como Jordon Ibe, Brad Smith, Kevin Stewart o Sheyi Ojo. Sin embargo, en cuanto llegó el primer mercado veraniego, muchos de estos salieron.

Hasta siete futbolistas dejaron el Liverpool en el verano de 2016 habiendo pasado antes por la cantera. Connor Randall, Stewart, Ojo y Joe Gomez fueron algunos de los que se mantuvieron, mientras comenzaban a aparecer otros como Alexander-Arnold, Ejaria y Woodburn. Aunque ninguno tenía verdadero protagonismo, la Copa de la Liga les daba espacio para vestirse con el Liverbird y jugar en el primer equipo. Pero, después de que ninguno sumara 600 minutos en toda la temporada -entre las tres competiciones que jugó el equipo-, en el pasado mercado se repitió la larga lista de salidas.

Fuente: www.liverpoolfc.com
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En 2017, solo Trent y Gomez sumaron minutos de calidad. También jugó Solanke, que tuvo 727 minutos de fútbol en su primera temporada en Liverpool. Ben Woodburn repitió con momentos residuales, jugando solo 50 minutos en todo el curso. Mientras que otros como Ojo, Ejaria o Wilson tuvieron que salir en enero tras pasar la primera mitad de la temporada entre el sub 23 y la grada del primer equipo.

Durante el actual verano se confirmó que Ryan Kent, Ejaria, Woodburn y Wilson jugarían en Escocia y la Segunda División inglesa, respectivamente. Mientras, algunos aún esperan resolver su futuro.

La situación de los jóvenes Reds parece fructífera en las categorías inferiores, hasta que llega el momento de dar el salto al escalón más alto. Solo Alexander-Arnold ha logrado ganarse el sitio haciendo este recorrido, y parece que los demás tendrán muchas dificultades. Además, los grandes fichajes y las aspiraciones de ganarlo todo hacen que el club busque en el mercado antes que darle la confianza a los chicos que esperan en la Academia.

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TAA o cómo encontrar un resquicio

Las necesidades por lesiones les han permitido jugar y consolidarse. El principal ejemplo de ello es Trent Alexander-Arnold. El joven inglés fue la opción de Klopp cuando Clyne se lesionó y sus actuaciones en el lateral derecho le llevaron a ser titular en la final de Champions y a ganarse una plaza en la convocatoria inglesa para el Mundial de Rusia 2018. De hecho, se ha convertido en la principal opción para muchos aficionados de cara a la nueva campaña.

"Queremos que muchos de la Academia sean el próximo Trent", Neil Critchley, técnico del sub 23

Joe Gomez es otro que, a base de trabajo, ha entrado en el equipo como una pieza valiosa. El inglés, fichado del Charlton hace tres veranos, compartió con Trent el puesto de lateral durante el curso 2017/18, pero su polivalencia para jugar en cualquier lugar de la defensa le sitúa en buen lugar de cara a la nueva campaña. Algo parecido debía ocurrir con Solanke, pero sus cifras goleadoras sumadas al resurgir de Sturridge hacen indicar que se verá relegado a ver los partidos desde la grada.

Fuente: www.liverpoolfc.com
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Las rotaciones de Klopp, la única opción

Tras la gran pretemporada realizada por el club de Anfield, algunos jóvenes han destacado, ilusionando a los aficionados. Curtis Jones, Nathaniel Phillips, Rafael Camacho y Kamil Grabara deben formar el Liverpool del futuro. Los cuatro deberían formar parte de los principales equipos de la Academia durante esta temporada, de forma que Klopp pudiera acceder a su formación y adaptarlos al grupo en cualquier momento de necesidad. Además, el técnico podría utilizar la gestión de la plantilla para darles minutos de Premier League.

Excepto el portero, que si Mignolet o Karius -o ambos- salen podría convertirse en el segundo o tercer guardameta del equipo, todos los demás podrían tener minutos en FA Cup o Carabao Cup. Además, con las lesiones que suelen asolar al equipo a lo largo de la temporada, podrían disfrutar de más tiempo de juego del que podría ser habitual.

La pasada temporada, el Liverpool sufrió en el último mes de competición al verse corto de futbolistas. La lesión de Oxlade, junto con otras como la de Clyne, Lallana y Matip, obligó a que sólo hubiera 14 jugadores en la rotación. Algo que repercutió notablemente en los resultados, empatando ante Stoke y perdiendo ante el Chelsea cuando aún estaba por asegurar la plaza de Champions League.

Los jóvenes en pretemporada con el primer equipo: "Espero que den a Jürgen algo en lo que pensar en el futuro"

Este año, con una plantilla más extensa y muchos jóvenes de calidad a la espera, la longitud de la temporada no debería ser un problema. Si la gestión de los minutos se realiza contando con los que provienen de la cantera, ayudaría a que los hombres principales tengan más tiempo de descanso, evitando rachas de malos resultados o posibles lesiones. A lo largo de la campaña se espera que, al menos, el Liverpool dispute unos 50 encuentros. Deberían ser más que suficientes para empezar a involucrar a los Jones, Camacho o Phillips de forma que puedan ser piezas útiles de cara a la 2019/20.

El verano de 2019 como fecha clave

Esta será la campaña en la que Klopp deberá demostrar si el nuevo Liverpool, que ha aprendido a gastar grandes cantidades de dinero en el mercado, obtiene sus resultados. En julio regresarán de sus cesiones algunos en los que se tienen puestas grandes esperanzas, como Harry Wilson, Ovie Ejaria o Ben Woodburn. Este curso de protagonismo fuera de Anfield debería ser suficiente para asentarse en la plantilla.

Jugadores como Lallana o Milner, por edad, u otros como Matip, Origi y Sturridge, por rendimiento en los últimos cursos, podrían ser los más propensos a dejar sus plazas a los más jóvenes. Esa es la oportunidad de darle paso a unos canteranos que, si no encuentran su lugar, pueden acabar lejos de Klopp buscando el éxito profesional.

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