Era un partido esperado por la hinchada romanista. Visitaba al Bologna, quien (Así como la propia Roma) venía en un mal momento al encuentro. En lo que respecta a la Serie A 2018 / 2019, sumaba 4 partidos en donde perdió en tres de ellos y solo en un encuentro logró rescatar un empate (Ante el Frosinone). Era uno de los colistas del campeonato, si a eso además se contabiliza que el Bologna no había anotado ningún gol en el Calcio… sin despreciar al elenco local, era un rival para que la Roma pudiera salir del mal momento consiguiendo los 3 puntos Stadio Renato Dall'Ar. Sin embargo, no ocurrió nada de lo previsto, inclusive quien vio el encuentro, se pudo dar cuenta que, a lo largo del partido, Bologna entrego la posesión de balón al rival. pero controlo las acciones quienes contra atacaban con mucha peligrosidad y con transiciones muy rápidas que siempre tomaron por sorpresa a la defensa rival. Un partido muy bien planteado por parte de Filippo Inzaghi.
Por el contrario, AS Roma tampoco venía de un buen momento. Solo contabiliza una victoria en la actual temporada que se dio en la primera fecha del Calcio ante el Torino de visita. Después de aquél partido, disputaron 6 partidos, en donde no logró ninguna victoria. Por la liga local, suma 1 victoria, 2 empates y 2 derrotas. Entre medio se disputo un encuentro ante el Benevento (Que se perdió 2 a 1) y el debut de Champions ante el Real Madrid en donde el equipo cayó derrotado por 3 goles a 0, en una paupérrima actuación del equipo por lo demás. Di Francesco consideraba una excelente oportunidad contra el Bologna para lograr sacudirse del mal momento y poder regresar a las victorias, pero el elenco local lo sorprendió con un muy buen partido. La Roma no juega como en la temporada anterior, en los partidos que le ha tocado disputar, se aprecia que si se genera ocasiones claras para anotar o estirar la ventaja, pero no logra aprovecharlas. Además, el mal juego de La Loba se ha hecho presente en los últimos encuentros. La derrota ante el Bologna significa un golpe duro al equipo que ve cómo se va quedando en la medianía de la tabla.
Bologna, un partido inteligente
Como se decía, el presente del Bologna era complicado, más aún si consideramos que recibía de visita a la Roma, quien pasaba por un mal momento igualmente, pero con la calidad de jugadores que tiene, más de algún problema podría recibir. De hecho, la estrategia del Bologna en el partido fue arriesgada, ceder el balón al rival y esperar en su área para salir rápidamente y contra golpear de manera precisa al rival. Y si bien es cierto que a fin de cuentas la estrategia le funciono a la perfección a Inzaghi, en algunos pasajes del partido sufrió su equipo. Aun así, logró resistir los ataques del visitante para poder llevarse la victoria con claridad. A los 36 minutos del partido, Federico Mattiello aprovecho un mal despeje del arquero Olsen y una muy débil marca, para anotar un verdadero golazo de zurda al costado derecho del arquero, quien no tuvo ninguna posibilidad ante el muy buen remate realizado por el 14.
El resto del encuentro se desarrolló de la misma forma; Roma con el balón y tratando de generar fútbol, pero de manera muy poca precisa. En parte, al gran trabajo defensivo realizado por el equipo, quien trataba de no ceder ningún metro a los peligrosos jugadores rivales. En esa monotonía del encuentro, a los 59 minutos del partido llegaría el golpe de KO para la Roma; Contra ataque muy veloz por parte de los jugadores del Bologna, que finaliza con una asistencia de Diego Falcinelli a Federico Santander, quien solo contra el arquero Olsen, remato con su zurda anotando el golpe definitivo del encuentro, decretando la victoria local. Con estos importantes 3 puntos, Bologna llega a las 4 unidades, anoto sus primeros dos goles en el Calcio y salió de las últimas posiciones ubicándose momentáneamente en la 18° posición, pero con la tranquilidad de al menos, ya poder sumar su primera victoria en la Serie A.
AS Roma, en un pozo sin fin
El equipo romanista tampoco venía bien. De hecho, su último partido fue por su debut en la Champions League ante el Real Madrid, el cual perdió de manera contundente por 3 goles a 0 y si no fuera por Olsen y De Rossi, bien pudo perder por un marcador mucho más abultado. Su fútbol fue muy pobre y la imagen del equipo fue preocupante. Con ese panorama en la cabeza, el equipo visitaba al Bologna buscando regresar a las victorias, pero nada de lo esperado por Di Francesco termino ocurriendo. Muy por el contrario, nuevamente perdió con claridad ante un equipo que estaba en las últimas posiciones del campeonato, además de no haber anotado ningún gol en 4 fechas, la imagen del equipo romanista nuevamente fue preocupante, ya que su fútbol sigue siendo precario y totalmente al debe. A los 10 minutos Roma avisaba a través de un cabezazo de Federico Fazio, que gracias al portero Skorupski no fue gol. La próxima llegada clara de la Roma fue a los 30 minutos, con un muy buen remate de Justin Kluivert, donde nuevamente Lukasz Skorupski estuvo muy atento para enviar el balón al corner. La última gran opción de la Roma en el primer tiempo llegaría nuevamente a través de Federico Fazio, quien a los 42 minutos remato de cabeza desde el punto penal prácticamente, pero Skorupski estuvo brillante para evitar el descuento visitante.
En el segundo tiempo, Roma tuvo mucho más tiempo el balón y también se contabilizaron más remates realizados por los visitantes, pero pocas de tanta claridad. De hecho, Roma tenía el balón y casi siempre estaban ubicados en el sector de la cancha del Bologna, pero daba la impresión que todo era algo planeado por los locales quienes, si bien sufrieron con algunas llegadas, siempre tuvieron control del partido.
Con esta derrota, Di Francesco se encuentra en un momento sumamente complejo, en donde incluso su cargo ya está empezando a estar en dicho. Sus próximos encuentros serán ante el Frosinone y la Lazio, ambos como local. De no obtener buenos resultados, es posible que el entrenador se encuentre en una situación demasiado compleja para tratar de revertir.