Tras vencer a Wolverhampton de visitante en la jornada anterior, el Watford quería continuar su buen momento en Vicarage Road. El cuadro de Javi Gracia cumplió el objetivo con creces, ya que estiró su racha ganadora goleando al más que necesitado Huddersfield Town, que después de esta caída ocupa el último lugar de la clasificación y sigue siendo el único equipo que aún no ha ganado en esta Premier League.

Mejor parado y más efectivo

A pesar de llevar las de perder, los Terriers comenzaron un poco mejor y tuvieron el gol cuando Isaac Mbenza sacó un centro atrás que Alex Pritchard remató apenas por encima del arco. Pero este comienzo no fue más que un espejismo, ya que en la respuesta a ese ataque Watford golpeó primero en el duelo gracias a un Roberto Pereyra en estado de gracia. Antes de los diez minutos, el argentino tomó la pelota sobre la izquierda, se internó dentro del área a pura velocidad y, tras sacarse tres marcadores de encima con un movimiento, mandó el balón a la red ante la salida de Jonas Lössl. Los Hornets no se conformaron con la ventaja, y a los diecinueve arribó el 2-0: Gerard Deulofeu tomó la pelota sobre la derecha, dejó en el suelo a Chris Löwe y, antes de que cualquier rival pudiera reaccionar, fulminó a Lössl con un derechazo al segundo palo.

Deulofeu, uno de los puntos más altos de la goleada del Watford. El catalán quiere volver a su mejor versión.
Deulofeu, uno de los puntos más altos de la goleada del Watford. El catalán quiere volver a su mejor versión. (Foto: Watford FC)

El dueño de casa ya manejaba  a esa altura tanto el resultado como el trámite, recuperando balones -gran partido de Abdoulaye Doucouré-, soltándose cuando el esférico estaba en su dominio y exponiendo la endeblez defensiva de Huddersfield. Una nueva apilada de Deulofeu y un posterior disparo rasante que salió apenas afuera pudo haberse transformado en el 3-0. Del otro lado recién hubo una reacción al dominio rival sobre la media hora de juego, con un par de acciones aisladas. La más clara fue un remate de Chris Löwe que reventó el travesaño, mientras que un minuto después un tiro de Aaron Mooy encontró bien ubicado al arquero Ben Foster. El golero local debió intervenir un poco más tarde, esta vez enviando al córner de gran manera un potente disparo lejano de Phillip Billing.

Le costó, pero lo terminó definiendo

Watford continuó gobernando el partido en el inicio de la segunda etapa e incluso tuvo la oportunidad de liquidar el pleito con dos buenas ocasiones, sin embargo ese tercer tanto iba a tener que esperar. Deulofeu no pudo acertarle al arco tras recibir un pase al espacio de Isaac Success y eludir una salida desesperada de Lössl, en tanto que más tarde Will Hughes se topó con el arquero visitante cuando intentó culminar una muy buena maniobra colectiva de los Hornets. Tras estar unos quince minutos sometido, Huddersfield tuvo un corto momento de respuesta pero no encontró claridad para inquietar al local ni tampoco David Wagner pudo cambiar mucho la historia con los ingresos de Ramadan Sobhi y Steve Mounié. Finalmente, cuando ya el 2-0 parecía inamovible, una acción preparada de balón parado hizo que Watford transformase la victoria en goleada: Etienne Capoué puso un balón largo hacia la derecha, Kiko Femenía trepó desde atrás y le puso un centro exacto a Success, quien decretó el 3-0 final para que la gente salga de Vicarage Road con una sonrisa gigante.

Otra victoria más para los Hornets, cuya realidad en esta Premier League pinta más que bien y, pese a algunos tropiezos que opacaron un poco su gran arranque, han recuperado el ritmo ganador mediante un funcionamiento colectivo más que visible, potenciado por los buenos momentos de forma de jugadores como Doucouré, Pereyra o Hughes, quienes hoy lideraron la victoria. Javi Gracia puede estar más que orgulloso de todos sus muchachos.