Tras un largo parón de selecciones, la Bundesliga volvió a alegrarles la vida a sus fieles aficionados. Y qué mejor manera de reanudarse que con el encuentro protagonizado por el Bayern Múnich y el Fortuna Dusseldorf. El actual campeón y uno de los equipos recientemente ascendidos. Un duelo que, en el papel, solo podría tener un resultado, pero que viendo la realidad de ambos equipos, el resultado adquiere un toque de incertidumbre.
Finalmente, la incertidumbre se convirtió en sorpresa. Pero no hay que adelantarse, pues el primer tiempo comenzó como era el pronóstico. El Bayern Múnich llevaba la iniciativa y buscaba llevarse por delante a su rival, el cual no dejaba de ser peligroso y avisaba tempranamente con incursiones de Usami y Kevin Stöger. Por su parte, los locales mantenían el pie en el acelerador, aunque seguían mostrando los problemas de creación que los han caracterizado en este tramo de la temporada.
Hasta el minuto 15 lo único que habían podido crear eran remates de larga distancia por parte de Boateng y opciones desde el juego aéreo. Precisamente esta última fue la que les dio resultados, en el minuto 17, Niklas Süle aprovechó un balón que quedó botando dentro del área tras un córner y mandó a guardar el esférico con un remate de pierna izquierda. Tres minutos más tarde, Thomas Müller puso el dos a cero en el marcador, presagiando una goleada. El goleador alemán pateó con su pierna derecha ante la apresurada salida del portero y no desaprovechó la profundidad que le estaba entregando Boateng desde la central.
Desde ese momento hasta el minuto 40, todo fue del Bayern. Los locales buscaban por todos los métodos cerrar el partido y asegurar su victoria. El más insistente fue Lewandowski, quien probó en varias oportunidades su suerte desde fuera del área, pero no lo logró. Ni la puntería ni el portero estaban dispuestos a darle la alegría al delantero polaco.
A dos minutos del final del primer tiempo, Lukebakio aprovechó una serie de rebotes dentro del área y con un potente remate de derecha dentro del área chica, marcó el descuento para su equipo. La mejor manera de irse al descanso para el Fortuna, teniendo en cuenta el desarrollo del encuentro.
El segundo tiempo inició en la misma tónica. Los locales se iban encima y consiguieron aumentar nuevamente la ventaja. Al minuto 57, una linda jugada colectiva terminó con Lewandowski de espaldas al arco en el borde del área. El polaco aguantó y dejó el balón rodando para que Müller, de primera intención, rematara de zurda y venciera al portero del Fortuna.
Las inseguridades defensivas empezaron a hacerse evidentes en el Bayern Múnich. A pesar de la amplia ventaja y superioridad, el equipo visitante conseguía desnudar las falencias de su rival y se acercaba al descuento. Fue hasta el minuto 76 cuando la suerte le sonrió al Fortuna. Nuevamente, Lukebakio tuvo el gol en sus pies y no falló. El delantero aprovechó la espalda de la defensa local y corrió solo desde el centro del campo para enfrentarse y vencer a Neuer en el mano a mano.
La remontada estaba muy cerca de materializarse. Y eso fue lo que ocurrió en el minuto 93 del encuentro. En un espectacular y agónico contragolpe, Lukebakio le ganó la carrera a Süle y definió con pierna derecha para empatar el encuentro en la última jugada.
Otros dos puntos que deja escapar el Bayern Múnich y otros dos puntos que comienzan a sumarse al difícil peso que está cargando el entrenador Niko Kovac en su espalda. Por su parte, el Fortuna se lleva un punto merecido y que lo impulsa para buscar salvarse del descenso en su retorno a la Bundesliga.