La Premier League no descansa. Luego de pasar por el Boxing Day, la liga inglesa volvió al ruedo este fin de semana, en donde solamente los equipos más fuertes y preparados serán capaces de soportar el ritmo que impone esta competencia en tan pocos días. 

Entre ellos, el que no quería desaprovechar era el Tottenham. El equipo conducido por Mauricio Pochettino se benefició con la derrota del Manchester City ante el Leicester lo que le permitió ascender a la segunda ubicación con la aspiración de ser el equipo que le pelee el título mano a mano al líder de la competición, el Liverpool.

Pero, para eso, primero debía derrotar en Wembley a unos de los equipos que tuvo la chance de ascender la temporada anterior, el Wolverhampton. Ese equipo de Nuno que, entre el Cardiff y Fulham es el que mejor se adaptó y está transitando en la Premier League consiguiendo resultados importantes lo que le permitió mantenerse dentro de la mitad de tabla.

En ese contexto, en su casa transitoria, el Tottenham tenía una oportunidad única para hacerse fuerte ante un equipo complicado, que como máximo objetivo tenía arruinarle la fiesta al equipo local y permitirse soñar a lo grande, con alguna oportunidad de quedar lo máximo posible. Aunque claro, está lejos con muchos grandes luchando por eso, como Chelsea, Arsenal e incluso, el Manchester United con la conducción de Ole Gunnar Solskjaer.

Harry Kane siempre presente

 Los primeros minutos, el partido se destacó por la dominación y perseverancia del equipo local para hacerse dueño del partido. De todas formas, no generaba peligro a la portería defendida por Rui Patricio.

La primera jugada de peligro estuvo en los pies de Heung-Min Son con un disparo desde fuera del área, pero el balón se fue desviado. Minutos más tarde, el que se lo perdía era Kieran Trippier, con un libre directo que terminó en las manos de Rui Patricio.

La respuesta de la visita no tardó en llegar, cuando Ryan Bennett cabeceó un centro de Ivan Cavaleiro, más allá del que balón se fue por encima de la portería. Sin embargo, la respuesta del Tottenham no tardó en llegar con un contraataque encabezada por Son, que asistió a Dele Alli que pasó cerca de la meta.

El local seguía intentando con un disparo de Eriksen desde fuera del área, que Rui Patricio desvió de gran manera. El esfuerzo realizado por los Spurs tuvo su recompensa en el minuto 22, cuando su capitán recibió un pase de Son que le permitió dirigirse hacia la portería, enganchó, y sacó un estupendo remate desde fuera del área para poner las cosas 1-0.

Harry Kane puso el 1-0. Foto: Premier League.
Harry Kane puso el 1-0. Foto: Premier League.

El gol favoreció al equipo de Pochettino ya que le permitió relajarse y atacar con mayor claridad. Por eso, Son tuvo su oportunidad de anotar el 2-0, pero el balón se marchó ligeramente  desviado.

La última oportunidad del primer tiempo, estaba en los pies de Harry Winks que remato con la derecha desde fuera del área, pero el balón se pasó muy cerca del palo derecho de la portería de Rui Patricio. De esta forma, el Tottenham terminaba la primera parte con una buena diferencia, pero que debía cuidarse porque sólo estaba ganando por la mínima.

Sorpresa

En el segundo tiempo, las cosas iban a cambiar. Para bien para el Wolverhampton, y para muy mal para el Tottenham ya que se quedó, y fue superado por un conjunto visitante que, desde los primeros minutos, se lo veía más peligroso. Eso lo demostró con un disparo de Rui Patricio a las manos de Hugo Lloris.

La visita se acercaba cada vez más a la igualdad, mientras que los Spurs esperaban sin reaccionar ante el juego de los Wolves. De esta forma, en el minuto 72, João Moutinho se encargó de tirar el balón al área en un saque de esquina, Willy Boly ganó en lo alto, cabeceó y puso las cosas iguales.

Boly puso el 1-1. Foto: Premier League.
Boly puso el 1-1. Foto: Premier League.

Los de Pochettino sabían que el empate no les servía, eso hizo que comenzara a atacar más, aunque sin peligro y con centros sin sentido que terminaban en la mano de Rui Patricio, producto de la barrera defensiva del equipo de Nuno.

Agazapado en el fondo y apostando a una salida rápida en la contra, cerca del final, un disparo débil de Raúl Jiménez, desde el centro del área, se metió en la portería de Lloris que no alcanzó a sacar ese balón y, en consecuencia, la visita se estaba llevando tres puntos importantes de Wembley.

Jiménez y el gol para el 2-1. Foto: Premier League.
Jiménez y el gol para el 2-1. Foto: Premier League.

Esto desesperó más al Tottenham ya que necesitaba hacer dos goles para ganar el partido, pero que, al mismo tiempo, no le estaba encontrando la vuelta y se le estaba haciendo muy complicado. Esto produjo, raro en la visita, un desorden defensivo y muy adelantado en sus líneas. Por eso, en unas de las últimas jugadas del encuentro, Matt Doherty habilitó con un gran pase y de manera perfecta Hélder Costa que sólo tuvo que encarar y definir de zurda para sentenciar el partido 3-1.

Hélder Costa define para el 3-1 final. Foto: Premier League.
Hélder Costa define para el 3-1 final. Foto: Premier League.

De esta forma, y luego de cinco triunfos de manera consecutiva, en Prmier League, en donde hizo  17 goles y recibió cuatro, el Tottenham volvió a perder. No lo hacía desde aquella dolorosa derrota en el Derbi del Norte de Londres ante el Arsenal. Además, y con el triunfo del Liverpool sobre los Gunners, ahora, están a nueve puntos de los Klopp, y con la posibilidad de ser destronados del segundo lugar, en caso de que el Manchester City le gane al Southampton.