FC Cincinnati logra los primeros puntos de su historia en la MLS ante nada más y nada menos que el actual campeón. Los locales comenzaron el partid de la mejor manera posible, adelantándose en el marcador con su mejor futbolista, Josef Martínez. Sin embargo, la intensidad del juego de los locales fue disminuyendo tras el gol, permitiendo a su rival poder tener presencia en el ataque, aunque fuese con acciones a balón parado. En la segunda parte, los locales calcaron el juego que en la primea, yendo claramente de más a menos, hasta que en esta ocasión, los visitantes si estuvieron acertados de cara a gol. Lamah anotó el gol del empate, haciendo saltar la sorpresa en el Mercedes-Benz Stadium.
Atlanta marca y desaparece
Atlanta United FC regresó a su estadio donde tan feliz fue la pasada temporada, buscando la primera Victoria de este 2019. La búsqueda de un resultado positivo hizo que los locales se volcasen en el ataque desde el inicio, consiguiendo adelantarse en el marcador a las primeras de cambio. Gressel encontró a Josef Martínez con un balón a la espalda de la defensa y el delantero venezolano no falló. Anotó su primer gol de la temporada.
Esta temprana acción tuvo un extraño efecto en los locales que desde ese momento perdieron parte de su intensidad y dejaron de tener presencia en al ataque salvo alguna acción aislada a la contra.
Esto permitió a FC Cincinnati empezar a tener mayor presencia en el juego, controlando el balón, pero sin transformar esto en ocasiones de peligro. La única manera que encontraron los visitantes de llegar sobre la portería rival fueron con acciones a balón parado.
Fueron pasando los minutos y la inoperancia de ‘Cincy’ en el ataque permitió que los locales tomaran aire y volviesen a tener presencia en el ataque. En este tiempo, fue Barco el más activo, apareciendo desde la banda izquierda y creando peligro con diagonales en las que sus disparos acabaron en manos del portero.
Los minutos finales estuvieron bastante movidos, con mucha actividad por parte de ambos equipos en el ataque aunque ninguna de estas acciones finalizó en el tan ansiado gol. Los locales fueron los que más lo intentaron, buscando ampliar su ventaja en el marcador, pero finalmente no lo lograron y el descanso cayó sobre estos, con todo por decidirse en los siguientes 45 minutos.
Cincinnati da la campanada
La segunda parte comenzó como era de esperar, con Atlanta United llevando el peso del partido y buscando hacer daño a su rival con transiciones rápidas y balones al espacio. Esto hizo que en los primeros minutos tuviesen una par de ocasiones de gol por parte de Martínez, que no consiguió conectar al fondo de la red.
Seguidamente fue el tueno de FC Cincinnati que no quiso perder la cara al partido y en una ocasión aislada estuvo cerca de igualar el resultado con un remate de Fandendo Adi. El delantero nigeriano logró introducir el balón en el fondo de la portería, pero el colegiado anuló la acción por fuera de juego del jugador visitante.
Esta oportunidad dio alas al equipo en expansión, que realizó varios cambios para darle mayor profundidad. Dieron entrada a Mattocks por un Manneh que empezaba a vérsele muy fallón. Los locales también realizaron su pertinente cambio, dando entrada a Nagbe por Barco, dándole de esta manera solidez al centro del campo con mayor control de la pelota, a la vez que mantenía la verticalidad en el ataque.
Superado el ecuador de la segunda mitad, la intensidad del juego por parte de ambos equipos incrementó, dejando el resultado abierto a que ocurriese cualquier cosa. Volcados al ataque, los dos equipos trataron de buscar en la velocidad de sus atacantes la manera de crear peligro, aprovechándose de lo adelantabas que estaban ambas defensas. Sin embargo, hasta el momento, ninguno de los equipo permitió que se les generase alguna ocasión manifiesta de gol.
Pero todo cambió a cinco minutos para el final. Kenny Saief vio un desmarque de Lamah y le puso un pase milimétrico al espacio para quedarse solo ante el portero. El extremo belga definió a la perfección y colocó el empate en el marcador.
Este resultado dejó helado a un estadio tan fogoso como el de Atlanta, con un equipo que trató de sobreponerse a la situación, asediando la portería rival. Buscó el gol pero no lo consiguió, manteniendo la pobre impresión dada en este inicio de la temporada.