Una victoria más para mantenerse en el liderato y aprovechar así el pinchazo de su mayor rival, Los Angeles Galaxy. Los visitantes apenas dejaron tiempo a su rival para entrar al partido y en una de las primeras llegadas, Rossi anotó un golazo que abrió el marcador a favor de su equipo. Tras esta acción se vio un partido muy disputado en los que los locales contaron con varias llegas sobre el arco, pero no fueron capaces de acertar en la definición. En la segunda mitad se pudo ver una mayor igualdad entre ambos equipos, aunque los californianos fueron los que demostraron un mayor peligro, hasta que Blessing aprovechó uno de los pocos despistes de su rival para anotar el segundo y definitivo gol que les dio la victoria.

La magia de Rossi

Inicio departido a la altura de lo que se esperaba entre dos equipos que llegaban con la moral por las nubes tras los buenos resultados de las últimas semanas. Sin miedo al rival que tenían enfrente y con la esperanza de dar la campanada, los locales salieron al partido con una clara intención de adelantarse en el marcador lo antes posible. Buscaron la espalda de la defensa con acciones combinativas y desmarques en profundidad, pero fue su rival el primero en avisar y anotar.

En un pase desde la defensa al extremo, los californianos superaron todas las líneas de presión de su rival y permitió dejar sólo a Diego Rossi. Con campo por delante vio como el portero salía de los tres palos para taparle el máximo espacio posible, pero el uruguayo tiró de magia y con una magnífica vaselina coloco a su equipo por delante en el marcador.

New England Revolution buscó una respuesta en os siguientes minutos, pero no consiguieron llegar con peligro sobre las inmediaciones del área. El aviso más peligroso fue un disparo desde Caicedo desde fuera del área tratando de poner en jaque el sistema defensivo de su rival, pero no lograron su objetivo.

Con el paso de los minutos, el juego entre ambos equipos pasó a equilibrarse, dando protagonismo al centro del campo y dejando de un lado las llegadas al área, salvo alguna de manera aislada por parte de los locales. La intensidad del partido dio la impresión de tener un empate en el luminoso, sin que ninguno de los rivales fuese capaz de decantar el juego a su favor.

En el encuentro entrando en sus últimos momentos de la primera mitad, se pudo ver a un New England Revolution muy incisivo en el ataque, con constantes llegadas a las inmediaciones del área, pero que no consiguió darle a sus acciones la suficiente profundidad para llegar a poner en problemas la portería defendida por Miller. Sin embargo, fueron los californianos los que estuvieron cerca de haber incrementado la ventaja en el marcador, gracias a una rocambolesca jugada, pero Farrell logró sacar el balón de la misma línea de gol.

Bajo este desarrollo se llegó al final de la primera mitad en la que los dos equipos, sobre todos los locales, tendrían que dar un poco más de si para poder sacar un resultado positivo de su estadio.

LAFC pone los goles y los ‘Revs’ las ganas

Con el inicio de la segunda mitad se vio a un New England Revolution mucho más activo en el ataque y consiguiendo tener un mayor número de ocasiones de peligro en apenas cinco primeros minutos. A pesar de la insistencia angelina, los locales buscaron aprovechar los espacios a la espalda de la defensa con desplazamientos en largo y en dos ocasiones fueron capaces de generar ocasiones de peligro. La más clara fue un mano a mano de Burnbury contra el portero en la que mandó el balón lejos de la portería.

Este inicio provocó que los angelinos no se durmiesen en  los laureles y tratasen de generar llegadas sobre la portería de su rival, que obligasen a estos a no lanzarse al ataque sin riesgo alguno y tener que preocuparse por la faceta defensiva del partido.

Sobre la hora de encuentro este tomó un nuevo sentido, convirtiendo el mismo en un intercambio de golpes entre uno y otro. Golpes que significaban llegadas sobre la portería aprovechando la velocidad de sus atacantes. Mientras que los locales fueron los que gozaron de un mayor número de las mismas y en que sólo la falta de decisión en la definición fue lo que les dejó sin el gol; los californianos fueron los que tuvieron un mayor acierto,

A falta de poco menos de 20 minutos para el final del partido, una acción combinativa en el interior del área local permitió a Harvey encontrar a Blessing solo en el interior del área. El centrocampista recibió solo el balón y con un movimiento a la media vuelta se quedó en buena posición para anotar y no falló, ampliando así la ventaja de su equipo en el marcador.

Tras este gol, los ‘Revs’ se vieron obligados a dar un paso adelante. Dos goles de diferencia eran mucho, y más después de un partido en el que no estaban logrando tener éxito de cara a portería. Durante los siguientes minutos, guiados por un Bou muy activo, trataron de poner en problemas a la defensa visitante, pero no fueron capaces de finalizar con éxito sus acciones, acabando con las esperanzas de puntuar.

En los minutos finales con el partido decidido, Los Angeles FC consiguieron mantener el control de la pelota en campo propio, tratando de impedir que su rival llegase a portería y a su vez, generar ocasiones que les permitiese colocar una distancia insalvable en el marcador para los minutos restantes.