Después de tres largos años en la Championship, el Norwich City ha regresado a la primera división inglesa con la ilusión de poder mantenerse al menos un año más en ella. El conjunto de Farke empezó en buena forma la competición, alternando una derrota por 4-1 frente al Liverpool con una importante victoria por 3-1 ante el Newcastle- a priori rival directo por lograr la salvación-. El finlandés Pukki- Pichichi de la Championship la temporada pasada con 29 tantos- ha firmado cinco goles en las primeras tres jornadas y apunta a ser uno de los jugadores revelación de la liga este año.

El nuevo Chelsea de Frankie Lampard llegaba a este encuentro con la necesidad de traducir en resultados las buenas sensaciones mostradas tanto en la Supercopa de Europa como en los dos primeros choques ligueros ante Manchester United y Leicester respectivamente. El técnico inglés apuesta por tener la pelota la mayor parte del tiempo, y en su esquema es clave el dinamismo que aportan jugadores como Pedro o Mount- apuesta personal de Lampard- que, situados por delante de los 3 centrocampistas, son los encargados de iniciar la presión tras pérdida (de esta manera llegó el gol frente al Leicester, gracias a un robo de Mount). 

Inicio accidentado

El encuentro comenzó con un inconveniente para el Chelsea, ya que Pedro, en principio titular en el extremo derecho, sufrió un percance físico en el calentamiento y tuvo que ser sustituido por Barkley minutos antes del pitido inicial. Los blues se ordenaron en su habitual 4-3-3 en el que el mencionado Barkley y Abraham- duramente criticado por fallar el penalti decisivo en la Supercopa de Europa- eran las principales novedades. Por su parte el conjunto local formó en un 4-2-3-1 idéntico al puesto en escena en la jornada anterior frente al Newcastle, con Pukki y Buendía como principales amenazas ofensivas.

Las carencias defensivas se pagan

El equipo londinense salió enchufado a Carrow Road poniéndose por delante en el marcador en el minuto 3 gracias al primer gol de Tammy Abraham. El delantero inglés recibió un balón largo y lo dejó de cara para que Mount y Pulisic continuaran la jugada y él mismo introdujera el esférico al fondo de la red tras un centro preciso de Azpilicueta. Sin embargo, no les duró mucho la ventaja a los de Lampard ya que tan solo tres minutos después Cantwell pondría las tablas al ser asistido por Pukki en boca de gol. El Chelsea dominó el resto del primer tiempo encadenando largas posesiones en las que Pulisic y Mount creaban constantes superioridades, y fue el ex del Derby el que adelantó de nuevo a su equipo culminando una gran jugada individual. No obstante, la constante fragilidad defensiva mostrada esta temporada les impidió conservar el marcador hasta el descanso, y Pukki empató el partido al definir a la perfección una asistencia medida de Buendía.

Abraham marca la diferencia

El paso por los vestuarios no despertó a  los canaries, sino que el dominio del Chelsea incluso se incrementó , generando constantes llegadas al área de Krul. Pulisic desbordaba por fuera y emergió la figura de Ross Barkley alternando conducciones y pases incisivos que hicieron mucho daño a la defensa local. El Norwich no era capaz de salir de su propio campo, pero fue en un contragolpe cuando encajaron el gol de la victoria visitante. Kepa blocó el tiro de Buendía y enseguida puso el balón en juego para que Barkley y Kovacic transitaran a campo abierto y Abraham hiciera su doblete, reivindicándose así ante las feroces críticas que ha recibido estas últimas semanas. El delantero de origen nigeriano celebró el tanto con el entrenador que tanto ha confiado en él volviéndole a poner de titular sin tener en cuenta su error crucial en la final europea.