Liverpool y Leicester se verían las caras en la 8º jornada de la Premier League. Ambos equipos llegaban a este partido tras vencer en sus correspondientes partidos la pasada jornada. La última vez que se enfrentaron en Anfield, el enfrentamiento finalizó con un empate que a la larga le costaría caro al Liverpool en el tramo final de la Premier League.

El Liverpool llegaba a este partido tras vencer por la mínima en casa del Sheffield  United. Además, a esto hay que añadirle la ajustada victoria también en Champions League ante el Salzburgo tras complicarse un partido que los de Klopp comenzaron ganando 3-0.

El Leicester llegaba a este partido tras golear al Newcastle en el King Power Stadium por un amplio resultado de 5-0. El equipo de Brendan Rodgers son la gran revelación de esta temporada situados en el top 3 y buscarán la machada como ya lograron la temporada pasada en Anfield.

Mané adelanta a un Liverpool superior 

Mané no perdona ante Schmeichel./ Foto: Premier League
Mané no perdona ante Schmeichel./ Foto: Premier League

El gran partido de la jornada comenzaba con el Liverpool contando con la primera posesión del encuentro. La primera ocasión la tendría el egipcio Mohamed Salah que probó a Schmeichel con un disparo desde el borde del área demasiado centrado que logra detener el portero danés. Más tarde probaría fortuna James Milner, que con un remate colocado a punto estuvo de sorprender al guardameta del Leicester, pero su intento se marchó por encima del larguero. El Leicester intentaba reaccionar, pero Dennis Praet no estaría afortunado con su oportunidad, y un defensa del Liverpool estaría lo suficiente rápido para desbaratar la ocasión de gol. Por último, Alexander-Arnold con una de sus típicas incorporaciones al ataque, buscaría desajustar la defensa del Leicester con su aparición, pero el equipo de Rodgers se mostró contundente para evitar el centro de Trent.

Después de unos minutos de tanteo entre ambos equipos, James Milner aprovecharía una transición rápido de su equipo para aprovechar los huecos que habían en la defensa del Leicester para enviar un pase al hueco para la carrera de Mané, que solo ante Kasper Schmeichel define a la perfección con disparo raso ajustado a la cepa del poste derecho de la portería, inalcanzable para el portero. Con 1-0 se iría el partido al descanso, con un Liverpool superior y con un Leicester que debía buscar la fórmula para cambiar la tendencia al partido.

Maddison hace saltar las alarmas en Anfield

Maddison pone picante al partido./ Foto: Leicester City
Maddison pone picante al partido./ Foto: Leicester City

La segunda mitad parecía tener un color muy parecido a la primera, con un Liverpool dominando y un Leicester a la espera de su oportunidad. El primero en avisar sería Mohamed Salah, que recibiría un centro peligroso que Schmeichel tuvo que rechazar con una gran parada. Pero la más claro la tendría Sadio Mané, que un balón suelto en las proximidades del área pequeña no lo convertiría en gol, debido a una mala ejecución que mandaría el balón por el lateral derecho de la red de la portería.

A estas grandes oportunidades desperdiciadas, se le sumaba la aparición del Leicester en ataque. El primero en intentarlo sería Marc Albrighton, que tras deshacerse de varios defensores a punto estaría de quedarse mano a mano con Adrián si no fuese por la aparición de van Dijk. A esto respondería Alexander-Arnold con un disparo desde la frontal que saldría rozando el palo izquierdo de la portería. Jamie Vardy, que había pasado un poco desapercibido en estos primeros minutos de la segunda mitad, también lo buscaría el gol en la segunda mitad, pero Adrián estuvo rápido para tapar su ocasión. Por último, Mohamed Salah jugador más activo del Liverpool en esta segunda mitad, tuvo el 2-0 tras una buena jugada colectiva, pero su remate no es del todo bueno y Schmeichel logra detener con comodidad.

Tras este intercambio de golpes, el Leicester encontraría por fin su momento en el partido, y tras una gran jugada colectiva Ayoze serviría el balón al espacio para James Maddison, que en el uno contra uno ante Adrián no perdona y bate al guardameta español con un disparo raso. Empate en el marcador, que nos dejaban unos minutos finales apasionantes.

Milner se convierte en el héroe del partido

Milner ejecuta a la perfección el penalti./ Foto: Premier League
Milner ejecuta a la perfección el penalti./ Foto: Premier League

El Liverpool veía como se le complicaba un partido que tenía controlado. Sin embargo, el empuje de la afición daría fuerza a unos jugadores tocados con el gol. El primero en intentarlo sería Salah de nuevo, que tras deshacerse de varios defensores fue finalmente bloqueado cuando se encara hacia la portería visitante. El siguiente sería Dejan Lovren, titular en el día de hoy, y casi convierte en gol un gran centro de Robertson. Pero la más clara la tendría el holandés Virgil van Dijk, que se impondría en el juego aéreo, pero su remate de cabeza se marchó rozando la red superior de la portería. El Leicester también tendría sus ocasiones con un Liverpool con muchos espacios atrás, pero tanto Vardy como Maddison no estarían acertados para aprovecharlos.

El partido parecía que finalizaba, pero en una jugada aislada, Marc Albrighton comete penalti y da la oportunidad al Liverpool de ponerse por delante en lo que sería la última jugada del partido. James Milner autor de la asistencia del primer gol sería el encargado de ejecutarlo, y con un disparo ajustado a la esquina inferior derecha batía a Kasper Schmeichel y daba la victoria al Liverpool en un partido agónico. Nueva victoria de los pupilos de Jurgen Klopp que llevan 8 de 8 en esta Premier League, y deja al Manchester City con un partido menos a 8 puntos y al Leicester que de momento es tercero a 10 puntos.