letar unlos Anfield, el estadio del Liverpool. Reconocido por ser de los mejores en el mundo como por su ambiente especial, algo que lo hace único. Muchas noches de competiciones europeas se vieron en la casa de los Reds, como también muchas remontadas míticas que quedaran guardadas en la historia.

En este caso, vamos a viajar al año 2016. En esa misma temporada, Jürgen Klopp se había convertido en el entrenador del Liverpool, por lo que la historia entre el entrenador alemán y el club inglés, recién comenzaba. 

En su primer año, el entrenador alemán mostró que el suyo no sería un paso fugaz por el conjunto Red y que quería quedar en la historia. A pesar de que en la Premier League quedó octavo, su foco principal estuvo en la Europa League. 

En su paso por esta competición, terminó primero en el grupo B, por lo que en los dieciseisavos le tocó enfrentarse al Augsburgo de Alemania, al que eliminó por un global de 1-0, gracias al resultado de ida. En los octavos, el rival fue el Manchester United donde el Liverpool venció por 2-0 en la ida e igualaron en uno en la vuelta. 

En los cuartos de final, Jürgen Klopp y su Liverpool tenían que enfrentar nada más y nada menos que su ex equipo, el Borussia Dortmund. Cuando los ingleses viajaron al Signal Iduna Park, el encuentro finalizó 1-1, por los goles de Mats Hummels para los locales, mientras que Divock Origi marcó para los visitantes. 

En la vuelta, el espíritu épico del Liverpool iba a estar presente. Entre tantos encuentros por destacar, el principal hasta ese momento fue el mítico e inolvidable milagro de Estambul frente al Milan en la final de la Champions League del 2005, cuando remontó un 3-0 en contra. 

El Dortmund tenía que viajar a Inglaterra sabiendo que tenía que ser el ganador del partido. Así fue en los primeros minutos, cuando logró ponerse en ventaja por los tantos de Henrikh Mkhitaryan y Pierre Emerick Aubameyang. Así, con la ventaja de 2-0, los alemanes se iban al descanso. 

En la segunda mitad, Origi descontó para los locales, pero Marco Reus marcaba nuevamente para el Dormund, a 33 minutos del final, y obligaba a los Reds a anotar tres tantos para pasar. Y lo haría. Primero marcaba Philippe Coutinho, luego haría lo propio Mamadou Sakho, por lo que los de Klopp estaban a un gol de la clasificación. 

Los minutos transcurrían y el Liverpool no encontraba ese tanto que tanto andaba necesitando. Tuvo que esperar hasta el último suspiro, para que un centro de James Milner desde el sector derecho, finalizase en un cabezazo de Dejan Lovren  que fue la clave para conseguir el pase la semifinal. Hoy, se cumplen cuatro años de esa clasificación histórica. 

Poco quedó de ese equipo que logró la clasificación histórica. Sólo James Milner, Roberto Firmino y Jordan Henderson se destacan en la actualidad. Además de Origi, Lovren y Lallana, que van alternando entre la titularidad y el banquillo. Pero tuvo que sufrir las bajas de jugadores que quisieron buscar otros rumbos como Coutinho y Erme Can. 

Poco le afectó esto a Klopp ya que descubrió talentos como Alexander-Arnold, Andrew Robertson, Sadio Mané o Joe Gomez  y grandes refuerzos como Alisson, van Dijk, Alex Oxlade-Chamberlain o Mohamed Salah, lo que hoy le permiten transformase en uno de los mejores equipos del mundo. 

A pesar de que no consiguió la Europa League en el 2016, era inicio de la gran era de Jürgen Klopp al mando del Liverpool. En 2019 tendría su revancha del 2016 y el 2018, que tampoco pudo completar al quedarse sin la Champions League tras ser derrotado por el Real Madrid. 

Claro, la Champions del año pasado tuvo su toque épico también. Después de perder 3-0 en el Camp Nou, ante el Barcelona en semifinales, el Liverpool consiguió remontar gracias a un 4-0 en Anfield, sin sus grandes figuras como Salah y Firmino. En la final, los Reds vencían al Tottenham y levantaban su sexta orejona. Pero claro,  todavía queda mucho por recorrer para el Liverpool y Klopp, todavía quedan más títulos por sumar.