El esperado "Der Klassiker" germano al fin llegó, y si bien suponía una gran oportunidad tanto para acercarse al liderato por parte del Borussia Dortmund como para dejar la Bundesliga muy encarrilada por parte del Bayern Múnich, fueron los bávaros los que se llevaron la victoria mediante un partido muy serio en el que anularon todo el potencial ofensivo de un desconcertado Borussia Dortmund

Fugaz dominio inicial del BVB

El equipo negriamarillo arrancó el encuentro con intensidad en busca de un gol tempranero que allanara el camino de la victoria, y fruto de ello Erling Haaland estuvo cerca de inaugurar el marcador en el primer minuto de partido, pero su disparo fue despejado por Jérome Boateng sin problemas bajo palos. Parecía que el Borussia Dortmund intentaría quitarle la iniciativa al Bayern Múnich, pero los pupilos de Hansi Flick no tardaron en adueñarse del balón y empezaron a dominar el encuentro. La primera gran ocasión visitante llegó a través de Serge Gnabry, cuyo remate fue despejado por Lukasz Piszczek bajo palos. 

Kimmich, líder y goleador

Liderados por un sublime Joshua Kimmich y por un incansable Alphonso Davies, los jugadores del Bayern Múnich dominaron  el encuentro a través de una ordenada presión en campo contrario que ahogó al Borussia Dortmund, que no supo superar el planteamiento del líder de la Bundesliga y se vio obligado a abandonar su vocación ofensiva para tratar de frenar los envites visitantes. Fue el propio Kimmich quien, al borde del descanso, puso la guinda a su gran primera mitad de partido marcando un tanto que terminaría siendo decisivo. El polivalente centrocampista alemán resolvió  con una vaselina desde fuera del área una jugada que había iniciado él mismo recuperando en campo contrario. Si bien el disparo fue espectacular, Roman Bürki no estuvo acertado en su intento de despejar el balón, que entró en la portería y de ese se estableció el 0-1 con el que se llegó al descanso. 

El Bayern aguantó el marcador sin sufrimiento pero con polémica

Para tratar de dar la vuelta al marcador, Lucien Favre dio entrada a Jadon Sancho y a Emre Can antes del inicio del segundo tiempo. El Bayern Múnich relajó la presión y el Borussia Dortmund mejoró, pero aún así el cuadro local no encontró el camino del gol. Entre esa inofensiva mejoría negriamarilla se produjo la jugada polémica del partido. Un tiro de Erling Haaland fue desviado intencionadamente con el brazo por Jérome Boateng dentro del área. De forma incomprensible, ni el árbitro Tobias Stieler ni el VAR apreciaron nada punible en una acción que pudo haber supuesto una ocasión inmejorable de igualar el marcador para el Borussia Dortmund. Como reza el proverbio, las desgracias nunca vienen solas, y el equipo del Signal Iduna Park lo demostró cuando, al mal partido y al mal resultado, se sumó la lesión de su principal referencia ofensiva, Erling Haaland. El noruego, visiblemente dolido, fue sustituido por Giovanni Reyna

El Bayern Múnich, muy cerca del título

Tras un tramo final en el que Manuel Neuer intervino para detener un buen tiro de Mahmoud Dahoud y Robert Lewandowski disparó al palo con la zurda, el Bayern Múnich terminó haciéndose con la victoria sin demasiado sufrimiento ante el inexistente intento desesperado del Borussia Dortmund. "Der Klassiker" pasó sin pena ni gloria para el cuadro de la Región del Ruhr, superado en todo momento por un gigante bávaro que no necesitó su mejor versión ofensiva para afianzar su liderato en la Bundesliga. A falta de 18 puntos por disputarse, el Bayern Múnich se encuentra a 7 puntos de sus perseguidores, una distancia que, teniendo en cuenta que los bávaros han ganado 17 de los últimos 18 encuentros, se antoja decisiva y los hombres de Hansi Flick ya cuentan las jornadas para alzarse con el campeonato liguero alemán.