Pocas semanas antes de que arranque el mercado de fichajes, el Chelsea ha dado un golpe sobre la mesa en el panorama futbolístico, y se ha hecho con uno de los grandes delanteros del mercado, Timo Werner. El delantero procedente del Leipzig tenía una suculenta cláusula de 60 millones que el club londinense ha materializado, conviritiéndose así en el segundo gran fichaje de la entidad para la próxima temporada, tras la contratación de Hakim Ziyech el pasado mes de febrero.

Además, ambos clubes han confirmado, en respectivos comunicados, que el futbolista terminará la Bundesliga con el Leipzig, pero se incorporará en julio a los entrenamientos con el Chelsea, por lo que no podrá disputar la UEFA Champions League con su actual equipo. Los alemanes pierden a su gran estrella de cara a los futuros cuartos de final, que se disputarán en una especie de "Final a 8" en Lisboa.

¿Qué puede aportar?

Con apenas 24 años, el punta germano se ha convertido en uno de los delanteros más deseados del fútbol europeo, por lo que estamos ante un movimiento magistral del club londinense para hacerse con uno de los grandes fichajes del verano. FC Barcelona, Liverpool y Real Madrid han tanteado en numerosas ocasiones su fichaje, pero finalmente, el Chelsea lo ha logrado convencer gracias a su prometedor proyecto.Con su incorporación a la plantilla, el equipo resuelve una de sus grandes cuentas pendientes esta temporada: la voracidad goleadora. Tras la lesión de Tammy Abraham, los de Lampard sufrieron una escasez de cara a puerta que se verá paliada con la llegada de Werner. 

El delantero se caracteriza por un vertiginoso ritmo aupado por su movilidad en el área y en los puestos de ataque, donde ha actuado como extremo, delantero o segundo punta. El gol está anexionado a él, ya que esta temporada ha anotado 32 tantos en 43 encuentros, pero su presencia y relevancia en el juego del equipo va más allá. 13 asistencias corroboran que el jugador también se desenvuelven bien como acompañante de otro delantero de categoría, como pueden ser Abraham o Giroud, y como ha sido Schick esta temporada. Su velocidad y regate le convierten en una figura explosiva, temible al contragolpe, aunque no se encuentra incómodo ante rivales replegados, pues es un especialista en encontrar espacios entre los centrales rivales. 

Aún le quedan dos partidos con su actual club, pero el futbolista se ha querido dirigir a los aficionados de ambos equipos para mostrar su agradecimiento y satisfacción por esta nueva etapa que va a comenzar: "Estoy encantado de fichar por el Chelsea, es un momento muy orgulloso para mí unirme a este gran club. Por supuesto, quiero agradecer a RB Leipzig, al club y a los fans, por cuatro años fantásticos. Siempre estarán en mi corazón. Espero con ansias la próxima temporada con mis nuevos compañeros de equipo, mi nuevo entrenador y, por supuesto, los fans del Chelsea. Juntos tenemos un futuro muy exitoso por delante".

 

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