La sabiduría del refranero popular es cada vez más inquebrantable e incontestable. Y es que el tiempo pone a cada uno en su sitio; al Liverpool en la cúspide de Inglaterra tras una temporada casi inmaculada. Al Arsenal fuera de Europa, relegándolo así a un lugar impropio a causa de su mal fútbol y del buen hacer del resto que, lejos de acortar distancias con los 'Gunners', los han sobrepasado sin poner el intermitente. 

En el precedente del año pasado, con el Liverpool sembrando las semillas del crecimiento y con el Arsenal aún entre los grandes de la Premier, el resultado quedó en tablas. En aquella ocasión, el dominio de la tropa de Klopp fue palmario, pero en el partido de la primera vuelta de la presente temporada Salah fulminó al entonces equipo de Emery, que a la larga sería destituido. 

Las matemáticas dicen que sí se puede, pero no depende de sí mismo

A los evidentes problemas clasificatorios del Arsenal se suma el gran rendimiento de Manchester, Sheffield United y Wolves, que a cada jornada que pasa se reafirman como acreedores a ocupar plazas europeas por encima de los Gunners. De otra parte, cabe destacar la resolución del TAS en favor del Manchester City, la cual afecta negativamente a todos los equipos que se postulaban a entrar en competición continental, ya que el número de plazas europeas se ha reducido. No obstante, conserva la bala de la FA Cup.

Y es que los de Arteta, pese a haber cosechado más resultados positivos que negativos en la vuelta del fútbol, tenían un camino muy complicado para asentarse en Europa. Es el problema de no depender de uno mismo. 

La pasada jornada, el Arsenal pereció ante el Tottenham de Mou, otra escuadra que no pasa por su mejor momento en lo que a tabla y juego se refiere. Lo cierto es que comenzaron los visitantes por delante en el luminoso, pero los locales hicieron buenos dos catastróficas acciones en defensa del equipo del Emirates para voltear el partido. 

Teniendo en cuenta que restan 9 puntos por jugar, se antoja complicado que el elenco de Arteta pueda hacer frente a los equipos que lo aventajan. 

En lo que al capítulo bajas respecta, el técnico español hospedará al campeón de la Premier sin Calum Chambers, Martinelli o Bernd Leno, este último aún renqueante de sus molestias en la rodilla derecha por su percance ante el Brighton. La principal duda es la de Özil, sobre quien se decidirá horas antes del choque. 

"Lo que han hecho es fenomenal"

El campeón, despreocupado de todo

Por su parte, los de Klopp llevan en un estado de calma más que patente desde que el 25 de junio se proclamaron campeones. Tanto es así, que se han podido permitir incluso tropiezos que han llegado a ruborizar a la afición de The Kop, como el del Manchester City. 

Pero en lo que al último partido se refiere, los 'Scouse', con jugadores del filial sobre el tapete, empataron ante un Burnley que llegó a la casa del Señor de Inglaterra con las tareas más que completadas. El incentivo que podía azuzar a ambos equipos era el orgullo de ganar y así contentar a sus hinchadas, pero los goles de Andrew Robertson y Jay Rodríguez fueron suficientes. No obstante, Nick Pope tuvo gran parte de culpa de que el marcador final fuera de 1-1. 

A las bajas de Henderson y Matip es probable que se adhiera Milner, de quien habló el míster en rueda de prensa: "Milner es duda, pero es muy probable que reaparezca ante el Chelsea".

Posibles onces

  • Arsenal: Emilinano Martínez, Mustafi, David Luiz, Kolasinac, Bellerín, Tierney, Ceballos, Xhaka, Lacazette, Aubameyang y Pepé. 

 

  • Liverpool: Alisson, Arnold, van Dijk, Gomez, Robertson, KeÏta, Fabinho, Wijnaldum, Salah, Mané y Firmino.

 

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