Liverpool y Chelsea se enfrentaban en la penúltima jornada de Premier League en un partido que estaba marcado por la entrega del trofeo de campeón al equipo de Jürgen Klopp. En lo deportivo, el Chelsea tenía que puntuar para tratar de asegurar los puestos de UEFA Champions League.

Festival "red"

La primera parte fue un auténtico festín para el equipo de Klopp. El partido comenzó con un ritmo lento y pausado, siendo ambos equipos muy previsibles e incapaces de conseguir romper las defensas rivales y generar ocasiones de peligro que inquietasen a los porteros. El Chelsea fue el primero en disfrutar de alguna llegada puntual. Primero fue Mount el que lo intentó con un cabezazo desde dentro del área, pero su remate se marchó alto desviado por encima de la portería defendida por Alisson. Tras este acercamiento, sería Reece James el que probaría suerte con un disparo potente desde la frontal que no consiguió encontrar portería. Tras esto, el Liverpool comenzó a imponerse y daría paso a un auténtico recital por parte del equipo de Merseyside.

En el minuto 23 de partido llegaría el 1-0 por medio de Naby Keïta. El centrocampista guineano, tras una pérdida en salida de balón del Chelsea, engancharía un gran disparo desde la frontal que se colaría en la portería defendida por Kepa tras golpear en el larguero. La respuesta del Chelsea no tardó en llegar, y en el minuto 31 haría el 1-1 que sería posteriormente anulado. Mount definió con precisión un mano a mano tras pase de James, pero el joven inglés estaba en posición de fuera de juego. El 2-0 llegaría en el minuto 37 y sería obra de Trent Alexander-Arnold. El joven lateral inglés ejecutó de manera magistral un lanzamiento de falta al que Kepa sólo pudo seguir con la mirada. El ciclón "red" no había terminado aún, y en el minuto 43 llegó el 3-0 por medio de Wijnaldum. El futbolista neerlandés enganchó desde dentro del área un balón suelto tras un saque de esquina. El Chelsea haría el 3-1 en el tiempo de descuento por medio de Giroud. El atacante francés enganchó un rechace tras una gran parada de Alisson a tiro de Willian e hizo que el Chelsea volviese a acercarse un poco en el marcador.

Los cambios de Lampard revolucionaron el partido

En la segunda parte, la historia cambió poco. El Liverpool, con un resultado muy favorable, se limitaba a disfrutar del partido y buscar tantos para ampliar aún más la ventaja y dejar finiquitado el partido. El 4-1 llegaría en el minuto 54 por medio de Firmino. El atacante brasileño cabeceó dentro del área un envío medido de Alexander-Arnold desde la derecha. El tanto parecía dejar sentenciado el partido, pero Lampard movió ficha y revolucionó el choque. En el minuto 58, el ex futbolista cambió el tridente ofensivo, dando entrada a Abraham, Pulisic y Hudson-Odoi por Giroud, Mount y Willian. El triple relevo hizo que el conjunto londinense mejorase mucho y fuese más incisivo. En este papel, cobró gran importancia Pulisic. El futbolista estadounidense, que tras el parón estaba cuajando unos partidos muy interesantes, siguió con su buena dinámica y fue el mejor de los visitantes. El 4-2 llegaría en el minuto 60 cuando Abraham remató a placer un envío de Pulisic tras una gran acción personal del ex del Borussia Dortmund

Sin embargo, aún se acercaría más el equipo de Lampard. Sería ya en el minuto 72, cuando el propio Pulisic haría el 4-3. Tras un error de comunicación entre Van Dijk y Joe Gomez, el jugador americano lo aprovecharía para batir a Alisson con un disparo desde dentro del área. El Liverpool alejó de toda opción de sumar un punto al Chelsea con un tanto de Oxlade-Chamberlain que anotó tras rematar un envío de Robertson desde la izquierda. 

Ficha técnica

Liverpool (1-4-3-3): Alisson; Alexander-Arnold, Joe Gómez, Van Dijk, Robertson; Fabinho, Wijnaldum (Jones 66'), Keïta (Milner 66'); Salah (Oxlade-Chamberlain 78'), Firmino (Minamino 87'), Mané (Origi 87').

Chelsea (1-5-2-3): Kepa; James, Azpilicueta, Zouma, Rüdiger, Marcos Alonso (Emerson 88'); Jorginho, Kovacic; Mount (Pulisic 58'), Giroud (Abraham 58') y Willian (Hudson-Odoi 58').

Amonestaciones: tan solo vio la amarilla Joe Gomez.

Incidencias: partido disputado en Anfield sin aficionados en las gradas. El Liverpool recibió el trofeo de Premier League al término del partido. Alexander-Arnold fue nombrado jugador del partido.