Inter Miami CF se repuso de la derrota sufrida en #MLSisBack al vencer a Orlando City SC en un partido muy completo donde las dudas por un delantero resolutivo quedaron disipadas. En la primera mitad, el equipo local sorprendió en dos acciones en menos de 10 minutos de Carranza que consiguió anotar su primer doblete, aunque entre ambos, su rival consiguió empatar. A pesar de intentarlo durante más de la mitad de la primera parte, no fueron, los visitantes no consiguieron. La segunda parte comenzó con un gol de Rodolfo Pizarro que dejó el partido prácticamente visto para sentencia, y a pesar que su rival lo intentó, no logró recortar distancias, lo que permitió la primera victoria de Inter Miami.

Carranza es el delantero

Inicio bastante lento en este partido donde se vio una mayor disputa de la pelota en el centro del campo que llegadas a las áreas. Tan solo un par de acciones al contraataque de Inter Miami fueron los mayores acercamientos sobre alguna de las áreas rivales, y estas no consiguieron generar apenas peligro. Durante estos minutos Orlando City puso mostrar algo más de músculo, tratando de tener mayor control de la pelota, pero no fueron capaces de darle profundidad a sus acciones.

Superados los diez primeros minutos, Inter Miami consiguió sorprender en uno de estos contraataques y de la mano de Julián Carranza, los locales se adelantaron en el marcador. Pizarro asistió al delantero argentino con un balón al espacio que este no desaprovechó y encarando al portero lo batió con un disparo al palo corto.

Orlando City SC tomó a partir de ese momento las riendas del partido y con el control de la pelota consiguió encerrar a su rival en su propio campo. Tardó varios minutos en disparar a puerta, pero su presencia en las inmediaciones del área obligo a su rival a no despistarse. En uno de esos primeros disparos a puerta, el equipo logró anotar el gol del empate. Daryl Dike recibió la pelota de espaldas a la portería y con un magnifico movimiento a la media vuelta se deshizo de su marcador y se internó en el área. Sus dos primeros disparos al arco fueron rechazados, pero con el tercero, aprovechándose de un rebote, consiguió llevar la igualdad al luminoso.

Sin embargo, la alegría apenas duró unos minutos. Cinco para ser más concreto. Es lo que tardó el equipo local en volver a ponerse por delante en el marcador. Desde la banda izquierda, Sweat colocó un centro pasado al segundo palo en donde apareció el hombre de la noche, Carranza. El ariete argentino demostró que su equipo no necesita un delantero, que ya lo tiene en casa y con un remate de cabeza cruzado, puso el segundo gol de su equipo.

A partir de ese momento, Orlando City SC se vio obligado a dar un paso adelante. Un equipo que hasta el momento no había logrado ningún punto estaba por delante en el marcador y ellos todavía no habían encontrado su mejor versión. El buen trabajo defensivo de los locales hizo que apenas consiguiesen tirar a puerta, y viendo como el descanso se acercaba, los nervios comenzaron a aparecer, al mismo tiempo que los errores. Intentaron por todos los medios anotar, pero no lo consiguieron y el partido llegó al tiempo de asueto con la victoria parcial a favor de los locales.

Orlando no reacciona

La segunda mitas tuvo un gran e inesperado inicio en el que Inter Miami CF sorprendió con un tercer tanto, cuando todos esperaban que fuese su rival que se hubiese adelantado en el marcador. Pellegrini peinó en el primer palo un centro desde la banda derecha para dejar la pelota franca en el punto de penal. Por esa zona apareció Pizarro libre de marca y de volea mandó la pelota al fondo de la portería. Colocando el tercer gol en el luminoso.

Tras este gol fueron varios minutos los que tardó en verse la respuesta de los ‘leones púrpuras’. Su rival tuvo en sus pies aprovechar esta circunstancia, pero en esta ocasión el palo se interpuso en el cuarto gol. De nuevo Pizarro, en un mano a mano con el portero, estrelló la pelota en el palo, dejando c su rival con opciones aún de entrar en el partido.

Se tuvo que llegar hasta casi la hora de partido para ver de una vez por todas un dominio prácticamente total de la pelota de los visitantes. Los de Pareja mantenían el control de la pelota, mucha circulación de balón y búsqueda de espacios en una defensa que parecía prácticamente impenetrable. Por más que lo intentaban, todas sus acciones se chocaban contra un muro. Dos líneas de cuatro jugadores en apenas tres metros de distancia impidieron generar acciones por el carril central.

Tras la pausa para la hidratación y con 15 minutos todavía por jugarse, Diego Alonso introdujo varios cambios en el equipo que denotaron aún más las intenciones del técnico. Quitó a los dos extremos para dar entrada a un tercer mediocentro defensivo y a un carrilero. El partido tenía que acabar.

A pesar de este planteamiento y de los difíciles que serían los siguientes minutos, Orlando no cejó en su empeño. Encerró a su rival en campo propio, realizó una presión alta en la zona de creación para recuperar la pelota lo más cerca de la portería posible, pero no eran capaces de lograr su objetivo. Tan solo pudieron verse un par de disparos desde fuera del área que no sugirieron ningún peligro para Robles.

Hasta los minutos finales del encuentro, el equipo visitante intentó buscar el gol que no llegó y eso provocó que cayeron derrotados ante el que será su próximo rival en el primer derbi de Florida de la historia de MLS.