El día esperando para el Manchester United llegó: el debut en la UEFA Champions League. El equipo conducido por Ole Gunnar Solskjær tenia una prueba de fuego para empezar con el pie derecho en la competición más importante de Europa, lo que también le iba a permitir darse una idea para que están esta temporada. 

Ese rival tan temido es el PSG. Ese equipo con la calidad de Mbappé y Neymar en sus filas, que llegó a la final de la Champions en la edición anterior, hacen que sea un examen exigente para el equipo inglés. 

El grupo H que integran los ingleses y franceses, también se encuentra el Leipzig, equipo revelación de la temporada anterior y que, a pesar de la partida de su máxima figura, Timo Werner al Chelsea, buscará destronar a los poderosos del grupo y quedarse con un pasaje a la siguiente ronda. 

Todo previa quedó atrás al momento que el árbitro español indicó el inicio del juego. El Manchester United quiso tener el balón en los primeros minutos, aunque no llevó peligro a la portería de Navas

A pesar del intento del control de la visita, la primera oportunidad fue para el PSG. Un disparo de Ángel Di María que se desvía en un defensor, provoca la buena reacción de David De Gea enviando el balón al saque de esquina. En esa misma jugada, un centro para Kurzawa que llega a desviar pero nuevamente responde el portero español salvando su portería. 

Luego de unos minutos en el que el equipo de Tuchel comenzó a ser agresivo, los de Solskjaer comenzó a jugar más cerca de Navas y consiguió un penalti provocado a Martial. Bruno Fernandes se hizo cargo, pero el ex Real Madrid contuvo la oportunidad más clara del partido. Sin embargo, por no tener un pie en la línea, el penalti se volvió a repetir y, esta vez, el portugués no falló y le dio la ventaja al Manchester United. 

El mediocampista portugués, cerca del final de la primera mitad, tuvo la oportunidad de extender la ventaja con un gran disparo desde fuera del área que, a pesar de estar tapado, Navas reaccionó y envió la pelota al saque de esquina. 

Sin tiempo para más emociones, en un partido donde las máximas figuras del PSG no se pudieron destacar producto de la intensa marca de los jugadores del Manchester que aprovechó los momentos de dominio para sacar ventaja con un penalti que le daba la ventaja parcial. 

En la segunda parte, el Paris Saint-Germain salió más decido en búsqueda de la igualdad, los tres delanteros fueron más desequilibrantes y peligrosos en comparación de la segunda parte. 

Lo que parecía que en cualquier momento llegaba el empate, llegó en el minuto 55 de juego, cuando Neymar, tras un córner, quiso asistir a sus compañeros, pero en vez de eso, encontró la cabeza de Martial que marcó contra su propia portería. 

Pasaron algunos minutos para que la visita comience a presionar más arriba y, así, algunas ocasiones para marcar la diferencia. El poste y la mala puntería hicieron que eso no suceda. 

Los minutos seguían transcurriendo y el local estaba cada vez más defendiendo cerca de su arco, mientras que los de Solskjær estaban cada vez más cerca del gol deseado. Finalmente, llegó luego de una jugada colectiva, en el borde del área Rashford da media vuelta y anota el gol del triunfo, a dos minutos del cierre del juego. 

Tres puntos importantes, ante un rival directo del grupo, como el PSG, en la búsqueda de la clasificación a la siguiente ronda, en uno de los grupos más complicados de la Champions