Era el año 2011 y Romelu Lukaku arribaba al Chelsea con apenas 18 años. El máximo desafío de su corta carrera ya golpeaba la puerta, pero encontraría a un delantero inmaduro en su juego, siempre a la sombra de otros futbolistas que integraban esa plantilla, como ni más ni menos que Didier Drogba.

Diez años más tarde, Lukaku vuelve a Stamford Bridge con la etiqueta de ser el fichaje más caro en la historia del Chelsea. A cambio de 115 millones de euros, el belga llega proveniente del Inter de Milan, donde fue una pieza clave para la coronación del equipo de Antonio Conte. Con 28 años y en el pico máximo de su carrera, hoy le toca ser quien lidere a una plantilla llena de jóvenes prometedores.

Pese a esto, no es todo un sueño para algunos de los ‘Blues’, ya que, por ejemplo, Timo Werner, es uno de los que sabe que tendrá que luchar arduamente si quiere hacerse con un lugar en el once titular, especialmente teniendo en cuenta que Lukaku será competencia directa de él.

Comparación

Romelu Lukaku completó una gran temporada en Inter, coronación en Serie A incluida. El delantero belga acabó segundo en la tabla de goleadores, promediando casi un gol por partido disputado y cerrando la campaña con 24 goles, solo por detrás de Cristiano Ronaldo, quien marcó 29.

No solo eso, Lukaku también se hizo un lugar en la tabla de asistidores, quedando nuevamente en segunda posición, con 11 asistencias, escoltando a Ruslan Malinovskyi. Sumando los cinco encuentros que disputó por UEFA Champions League y los tres de Coppa Italia, agrega seis goles a su estadística, dando un total de 30 tantos en 44 partidos.

Por su parte, Timo Werner no se puede jactar demasiado de la que ha sido su primera temporada en Chelsea, ya que el alemán disputó 52 encuentros entre Premier League, UEFA Champions League, FA Cup y EFL Cup, marcando solamente 12 goles, un número muy bajo para la cantidad de ocasiones que generan los ‘Blues’ por partido.

Justamente, en relación a las chances de gol, tomando en cuenta solamente el rendimiento de la última temporada liguera, Lukaku convirtió el 25% de las ocasiones que tuvo, mientras que Werner solo el 8% de ellas.

Opción de reconvertirse

Si se piensa en el Timo Werner que explotó en Red Bull Leipzig, su posición siempre fue la de delantero central, con Marcel Sabitzer muy cerca como mediapunta y a veces la compañía de Poulsen. Pero también supo jugar como extremo, posición donde ya se ha desempeñado en Chelsea, moviéndose a los laterales para arrastrar marcas y abrir el camino en el centro de campo para que lleguen jugadores como Mason Mount, Kai Havertz, Christian Pulisic, etc.

Werner deberá adaptarse a la presencia de Lukaku en el once | Foto: Chelsea
Werner deberá adaptarse a la presencia de Lukaku en el once | Foto: Chelsea

Aunque es una opción tentadora, eso es algo que se podría hacer solo con Werner como único delantero, ya que la presencia de Lukaku fijaría a los centrales rivales y no daría opción a que lleguen los volantes sorprendiendo.

Es por esto que hay una puerta que se le puede abrir a Werner, si es que Thomas Tuchel decide cambiar la formación que tan buenos resultados le ha dado. El rendimiento de Lukaku en Inter fue posible, en parte, gracias al acompañamiento de Lautaro Martínez, quien aprovechaba los balones que el belga aguantaba y se encargaba de trasladar en velocidad hacia el área.

Esa es la función a la que Werner podría reconvertirse, ser quien acompañe y traslade. Liberándolo de la presión de ser quien anote constantemente, incluso se podría disfrutar de un delantero alemán en un mejor nivel, sin esa obligación de ser el que defina siempre.

La maldición del 9

Lukaku eligió el dorsal 9 para esta nueva etapa | Foto: Chelsea
Lukaku eligió el dorsal 9 para esta nueva etapa | Foto: Chelsea

Como dato de interés, Lukaku eligió vestir el dorsal 9, uno que tiene una muy mala reputación en las plantillas del Chelsea, remontándose la superstición a principios del 2000, cuando Chris Sutton fue anunciado como fichaje estelar de los ‘Blues’. El en ese momento ex delantero de los Blackburn Rovers llegaba con un registro de 50 goles en 131 encuentros, pero fracasó estrepitosamente en Stamford Bridge, con un solo tanto en 39 partidos.

Cuatro temporadas más tarde llegaría Mateja Kezman, atacante serbio que venía de una gran campaña en el PSV Eindhoven. Sin embargo, su paso sería de solo 7 goles en 41 partidos disputados. Un año después, Hernán Crespo tendría su revancha con la camiseta del Chelsea y lograría torcer un poco la historia, marcando 13 tantos en 42 partidos.

Pese a ello, los ‘Blues’ dejaban abierta la puerta de salida y el argentino emigraba a Italia, siendo sucedido con el dorsal 9 por Khalid Boulahrouz (06/07), Steve Sidwell (07/08) y Franco Di Santo (08/09 - 09/10). Fernando Torres lo vestiría por cinco temporadas consecutivas, obteniendo una UEFA Champions League, FA Cup y una UEFA Europa League.

Aunque el ‘Niño’ fue un respiro, todo se haría cuesta abajo para quien decidiera utilizar ese número en su camiseta durante los siguientes años. Llegó Falcao a Stamford Bridge y el colombiano tuvo una de las peores temporadas de su carrera, con un año lleno de lesiones y solo un gol en 12 partidos.

Álvaro Morata, Gonzalo Higuaín y Tammy Abraham fueron los siguientes en no estar a la altura de convertirse en ese goleador que el Chelsea tanto necesitaba.

¿Luchar o pensar en una salida?

Los indicadores no son nada buenos para Werner, y todo hace pensar que, salvo que Tuchel cambie el esquema que lo ha llevado a ser campeón de la UEFA Champions League, el alemán tendrá que buscar nuevos horizontes para continuar su carrera y no quedar estancado a sus 25 años.

¿Podrá Werner seguir en Chelsea? | Foto: Premier League
¿Podrá Werner seguir en Chelsea? | Foto: Premier League

¿Dónde podría ser eso? Su valor de mercado actual ronda los 60 millones de euros, una cifra que podría discutirse en caso de aparecer un club interesado. La opción del regreso a la Bundesliga siempre estará presente, aunque también podría ser una opción interesante para ciertos clubes de LaLiga, como Real Madrid, tomando en cuenta que el planteo de Carlo Ancelotti es más acorde a su estilo de juego y, además, compartiría plantilla con su compatriota Toni Kroos.

Por ahora todo se teje en base a meras suposiciones, quedará únicamente esperar al transcurso de la temporada y ver si Lukaku está a la altura de las expectativas o, por el contrario, Werner tiene la oportunidad de redimirse y acaba opacando al fichaje más caro de la historia del Chelsea.