La Premier League está de regreso. Luego de dos semanas sin la Primera División de Inglaterra, este martes se abrió la jornada número 24 de la Liga más competitiva del mundo, con un partido con muchos condimentos en la previa: Manchester United ante Burnely en Turf Moor. 

Los dirigidos por Ralf Rangnick, luego de la eliminación en la FA Cup ante el Middlesbrough por penaltis, ponía todas sus fichas en este encuentro para poder escalar posiciones y afianzarse en zona de Champions League, el gran objetivo de esta temporada irregular. 

Tanto golpeó este resultado en los Diablos Rojos que la noticia más fuerte de la jornada estaba en su alineación, donde Cristiano Ronaldo, luego de mucho tiempo, empezaba el encuentro en el banquillo, tras errar un penalti en la FA Cup. Su lugar fue ocupado por Edinson Cavani.

En frente, el último en la tabla de posiciones: El Burnley. Urgido y necesitado de tres puntos para encontrar una luz en el pozo de su camino de esperanza, para que su final no sea el Championship la próxima temporada. 

En este contexto, uno necesitado para volver a recuperar la confianza perdida luego de la eliminación, mientras que el equipo dueño de casa no tiene otra alternativa que sumar de a tres para no descender. 

El mejor primer tiempo del Manchester

El reloj marcó las 20:00 en Inglaterra, donde fue el momento que el árbitro del encuentro, Mike Dean, dio la orden para el inicio del juego, donde en los primeros minutos se lo vio como el dueño de las intenciones al equipo visitante, pero que no generaba peligro a Nick Pope.  

Esto produjo que los de Manchester llegaron a abrir el marcador al minuto 10 de juego, luego de un libre directo desde la derecha para Raphaël Varane, que logra cabecear cruzado para marcar el 1-0.  Sin embargo, la jugada fue revisada por el VAR y no convalidaron el tanto. 

De todas formas, pocos minutos más tarde, desde un desde la portería de David De Gea, un desvío de cabeza le permitió quedarse con el balón a Marcus Rashford que vio que le pasaba Luke Shaw, se la pasó a su compatriota que lo único que tuvo que hacer es llegar hasta el fondo y lanzar el centro atrás para que Pogba anote el primer tanto del encuentro. 

Paul Pogba festeja con sus compañeros el 1-0 para el Manchester United. Foto: Premier League.
Paul Pogba festeja con sus compañeros el 1-0 para el Manchester United. Foto: Premier League.     

Rápidamente, la visita marcó el segundo gracias al poderío ofensivo de sus extremos, pero centrado en la izquierda. Tanto Rashford o Jordan Sancho cuando atacaban por ese sector lograban marcar la diferencia. Luego de un centro para Cavani del ex Borussia Dortmund, que se desvía en un defensor y marca gol en propia puerta. De todas formas, otra vez era anulado por infracción en ataque. 

Con el correr de los minutos, el Manchester fue creciendo en el juego y hacía notar la superioridad ante el rival. El manejo del balón de un sector a otro, sin que el rival pueda robársela, sin que tampoco recibir peligro, hacían que el 1-0 le quede corto como resultado al partido

Además, como se destaca el juego ofensivo y colectivo del equipo de Ralf Rangnick, el resultado no era más abultado porque Nick Pope estaba en la portería. El portero inglés que estaba volviendo al equipo luego de una lesión y luego de sufrir covid. 

El portero inglés se encargó de bloquear su portería ante Edinson Cavani abajo del arco con una rapidez extraordinaria para tapar el cabezazo del uruguayo, como un mano a mano de Rashford, para bloquear su valla. 

Pope le tapa a Cavani el segundo gol del Manchester. Foto: Premier League.
Pope le tapa a Cavani el segundo gol del Manchester. Foto: Premier League.      

Esa es la única razón por la que el primer tiempo no terminó con un resultado más abultado en favor del Manchester United, gracias al portero del Burnely. Era solo cuestión de esperar los próximos 45 minutos para ver si el local reaccionaba o si la visita daba el golpe de cierre al encuentro. 

Cambio de estrategia 

Para sorpresa de todos, le bastó dos minutos al Burnley cambiar la actitud y la agresividad para que en el primer remate a la portería, signifique un el empate para el dueño de casa. Wout Weghorst dejó a dos hombres en el camino y asistió a Jay Rodríguez que lo único que tuvo que hacer fue definir para anotar el empate. 

No solo consiguió el empate, sino que el neerlandés tuvo la oportunidad con un disparo desde afuera del área para marcar el segundo tanto del partido, pero la mano de De Gea logró salvar a su equipo. 

Gol de Jay Rodríguez para poner el 1-1. Foto: Premier League.
Gol de Jay Rodríguez para poner el 1-1. Foto: Premier League.      

Los minutos iban pasando, el Manchester no estaba siendo superado por el local y todos los ojos estaban puestos en Cristiano Ronaldo, que realizaba la entrada en calor en el banquillo. Mientras tanto, nuevamente el número nueve del Burnley tuvo la oportunidad de anotar, pero su remato quedó en el lado de afuera de la red. 

A pesar del ingreso del ex Real Madrid, el United no mostró la imagen del primer tiempo y le costó encontrarle la vuelta a un más seguro equipo local que, además, podría anotar de contraatque, ya que el Manchester estaba todo jugado en ataque, pero sin claridad.

Es por eso que el resultado no se movió y el encuentro terminó igualado 1-1. Con este resultado, y con el triunfo de West Ham ante Watford, los de Rangnick se ubican en zona de Europa League mientras que los de David Moyes en zona de Champions League, a pesar de que los Diablos Rojos tienen un partido menos. 

Mientras que, por el lado de los de Sean Dyche, este empate los sigue ubicando en la última ubicación, pero con la derrota de Watford solo es un punto de distancia para salir del fondo de la tabla y a cuatro del Newcastle, el primer equipo en salvarse, y lo más importante, con dos partidos más por jugar. 

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