Liverpool consiguió la tan ansiada clasificación a los cuartos de final de la UEFA Champions League y se viste de candidato para quedarse con la orejona, una vez más en su palmares.

De todas formas, todavía tiene mucho que mejorar el equipo inglés para no volver a sufrir, y mucho menos se puede permitir que pasen esas cosas en su casa, Anfield, como sucedió esta noche ante el Inter de Milan.

El equipo de Jurgen Klopp tenía una clara ventaja luego de ganar 2-0 en su visita al Giuseppe Meazza hace dos semanas atrás, pero no lo suficiente para tener total tranquilidad ante el actual campeón de la Serie A de Italia.  

Estaba todo dado para que el Liverpool pudiera conseguir la clasificación. El resultado a su favor, un equipo en buen nivel, la motivación de hace pocas semanas haber conseguido el título de la Copa de la Liga y, lo más importante, definir en Anfield, con su gente, el famoso himno de You'll Never Walk Alone y que sea la UEFA Champions League, a pesar de que no le sería nada fácil. 

Duelo parejo

Como era de esperarse, el partido fue parejo con un principio de empuje del Inter, que comenzaba mejor el encuentro durante los primeros minutos, pero el orden táctico de todo el equipo más Alisson Becker, le permitían al dueño de casa poder hacer pie en el encuentro. 

Los minutos fueron pasando y el Liverpool se fue acomodando y haciéndose fuerte en el encuentro. Comenzó a tener el balón y hacerlo circular de defensa a ataque, a pesar de que no le generaba a Samir Handanovič. 

Para encontrar la primera jugada de peligro, hay que ir a la primera media hora de juego, donde los Reds se hicieron fuertes en el balón detenido, gracias a la gran capacidad en el juego aéreo de sus dos defensores centrales. 

El que logra conectar es Joel Matip, pero el poste es el que le niega. Luego, en un saque de esquina, otro que tendría la oportunidad de anotar su gol era Virgil van Dijk, pero un cabezazo salvador de un defensor del Inter, le seguía dando las esperanzas al equipo italiano.

Salah no pudo anotar en el duelo de esta noche. Foto: Liverpool.
Salah no pudo anotar en el duelo de esta noche. Foto: Liverpool.

Los Azurros respondían por la misma vía. Cerca del final de la primera parte, un remate desde un libre directo de Hakan Çalhanoğlu, cruzado, al ras del suelo, complicado para la vista del portero, hacía temblar los corazones en Anfield, pero Alisson lograba despegar. 

El gol no le sirvió 

A diferencia del inicio de la primera parte, el Liverpool fue quién tomo las riendas del encuentro y adelantó sus líneas para lograr el gol de la tranquilidad para no sufrir. Sin embargo, Inter sabía que en cualquier contra rápida podía aprovechar el poderío ofensivo de su tridente ofensivo. 

Así, la chance más clara del encuentro llegaba. Un pase perfecto de Thiago para Diogo Jota, donde Handanovič no logra calcular bien, le queda a merced de Mohamed Salah para anotar el ansiado 1-0, pero su remate de zurda defectuoso se va apenas al lado del poste. 

El Inter iba a avisar lo que se le venía a los Reds. Lautaro Martínez tuvo la oportunidad de marcar, pero su remate cruzado se fue apenas desviado. De todas manera, tuvo revancha minutos más tarde tras un error en la salida del Liverpool, que le permitía convertir el 1-0 para la visita. 

El gol de Martínez no alcanzó. Foto: Inter.
El gol de Martínez no alcanzó. Foto: Inter.

Con este panorama, todo parecía indicar que los italianos se metían en partido y que se le iba a hacer todo cuesta arriba a los de Klopp por no haber aprovechado las situaciones. Pero, como todo cambia en minutos, una durísima infracción sobre Fabinho de Alexis Sánchez, hace que el chileno vea la tarjeta roja y dejaba con uno menos a su equipo. 

Esto le permitió al equipo local seguir siendo superior en el dominio a su rival, a pesar de que no generaba jugadas de peligro y las pocas que generaba no las convertía o el poste le decía que no, como a Mohamed Salah que no le permitía marcar el gol del empate. 

La última oportunidad clara del partido la tuvo el ingresado en la segunda parte, Luis Díaz en lugar de Diogo Jota, que quedó frente a la portería, pero un defensor se cruzó en el disparo del colombiano para evitar la caída de su valla. 

Sin tiempo para más, y a pesar de la dura derrota en su casa, el Liverpool consiguió la clasificación a los cuartos de final de la UEFA Champions League. Quedará, en los próximos días, conocer quién, una vez finalizada esta ronda, será su próximo rival en búsqueda de un lugar en Francia para la final.