Describir a Lionel Andrés Messi Cuccittini es complicado. Implicaría empezar una lista con agradecimientos cuyo fin sería incapaz de observar. Ante Australia completó su encuentro número 1000 como profesional y volvió a generar una sensación rara: ilusión, esperanza... Llámalo como quieras, pero cada partido hace lo mismo. Por eso te elegirían 1000 veces, Leo. Y que esta historia no termine nunca.

Es el efecto que tiene. Que sus propios rivales lo busquen para inmortalizar una foto, que los niños se queden absortos cuando simplemente esboza una sonrisa. Que levante a semejante cantidad de personas del sofá en cada pelota que toca. Solo él es capaz de mimar el balón con ese tacto, con esa delicadeza que te hace agradecer el haber nacido en su misma época.

Desde aquel 16 de octubre de 2004 hasta este 3 de diciembre de 2022. 6.622 días en los que has batido todos los récords posibles, pero donde todavía queda una espina. Estás ante tu última oportunidad y se te ve más feliz que nunca. Y eso lo compartes con todos tus compañeros. Por eso De Paul te defiende como tu hermano. Por eso Julián busca los espacios y Di María te cuida. Porque tú sueñas y de tu mano tienes a toda Argentina (y a parte del mundo).

Fuente: Twitter @Argentina
Fuente: Twitter @Argentina

Tu partido número 1000 ha parecido el primero. La ilusión sigue vigente, pero ahora eres el líder de una selección que quiere ganar por ti. Cuando pisas el terreno de juego pareces un escritor que está cerca de romper la naturalidad del folio en blanco. Te acusan de no correr, pero la velocidad va más allá de las piernas. En tu mente está todo planeado.

"Es un buen día si gana Messi" o "Si Leo es feliz, yo soy feliz". Como si fueras la solución a problemas ajenos. Muchos te han visto crecer mientras se olvidaban de que ellos también habían hecho lo mismo. 

El final de la historia cada vez está más cerca. Son conscientes de que un día más es un día menos para cerrar el libro. El mejor libro que ha creado el mundo del fútbol. Y se refugian en un sueño del cual no quieren despertar porque se aferran a lo que lleva 18 años creciendo a su par. Por eso te elegirían 1000 veces, Leo.