En este 2023 se cumplirán 10 años de aquella última Premier League de Sir Alex Ferguson, éxito que pondría fin a más de 27 temporadas de vivencias del técnico escocés en el banquillo de Old Trafford. Una inagotable trayectoria que, entremedias, acabaría llevando al Manchester United a su gran época dorada. 

Sin embargo, tras una década salpicada por el tormento, aquellos logros residen como un vago recuerdo, un fugaz recordatorio que intenta convencer al aficionado red devil de que cualquier tiempo pasado fue mejor. 

Ese pensamiento, convertido en obsesión por recuperar lo que alguna vez fue y se ha perdido, no ha cesado en su empeño por devolver la grandeza, por derecho considerada, a un club que un día fue leyenda. 

Han sido 7 entrenadores, más de 1500 mill. € en fichajes y 10 largos años de una búsqueda identitaria que permitiese alzar nuevamente al Manchester United a la primera línea del fútbol. 

Pero justo ahora, a 3 meses de cumplirse esa década desde la última vez que se coronaron como campeones de Inglaterra, un hombre parece haber encontrado el camino de vuelta a las puertas del paraíso: Erik ten Hag

Con una fe ciega en su plan, el neerlandés no ha tardado ni un año en transformar de manera drástica el devenir del equipo.  

Erik ten Hag es el nuevo profeta de Old Trafford / Foto: @ManUtd
Erik, el nuevo profeta de Old Trafford / Foto: @ManUtd

Aunque, como en toda metamorfosis, el cambio esté repleto de aristas, aquí vamos a exponer algunas de las claves más destacadas que han llevado al club a entrar de lleno en la pelea por el título de la Premier League.

  • El equipo, a su imagen y semejanza

Sin duda, una de las grandes apuestas del técnico ha sido, cómo no, el mercado.

Con una inversión de 240 mill. € en verano donde reclutó para la causa a Martin DúbravkaChristian EriksenTyrell Malacia, CasemiroAntony y Lisandro Martínez, siendo estos dos últimos jugadores que ya había tenido a sus mandos en el Ajax, Erik ha podido moldear la plantilla acorde a la idea que tanto desea implantar. 

Antony, el más caro de los fichajes (100 mill. € fueron por su traspaso) se ha hecho un fijo en el extremo diestro. Lisandro, por su parte, ha llegado a sentar a Maguire, quien era hasta el momento gran capitán tanto del equipo como de la selección en estos últimos años, y ha formado una de las mejores parejas de centrales de la competición a la vera de Varane. 

Casemiro y Eriksen, actuando el brasileño de brújula y encargándose el danés del factor creativo, han elevado el centro del campo de los diablos al siguiente nivel. 

Y, aunque a estas alturas no hay dudas de él en lo futbolístico, Casemiro también ha sido una pieza fundamental en el tan necesario cambio de mentalidad que requería la plantilla a todos los niveles. 

El ex madridista ha sido el escogido para volver a impregnar al club de ese gen ganador que tanto parecía resistirse en Old Trafford. Un pilar sobre el que reedificar el proyecto y poder erradicar desde la raíz esa especie de miedo al éxito que ha imperado en estos útimos tiempos.

Carácter y fe en la victoria, un lema que el 18 lleva escrito a fuego en la frente, un lema que se compromete a recordar cada vez que los jugadores salen cada fin de semana al terreno de juego.

Casemiro está siendo fundamental en la reconstrucción red devil / Foto: @ManUtd
Casemiro está siendo el pilar de la reconstrucción red devil / Foto: @ManUtd
  • Separar los caminos con la leyenda 

Posiblemente la piedra más alta que ha tenido que saltar ten Hag desde que se pusiese a los mandos en Mayo: la situación de Cristiano Ronaldo.

Si algo tenía claro el técnico, es que la reconstrucción de la entidad no pasaba por seguir contando con el histórico 7 de los diablos.  

Pese a llegar a los 18 goles la pasada campaña, la presencia de Cristiano, tanto dentro como fuera del campo, parecía oponerse frontalmente a las intenciones de Erik. No en vano, tras dejarlo como suplente en el partido contra el Liverpool, el grupo logró una victoria que, a la postre, supondría un punto de inflexión en el devenir de la temporada.  

Tanto que, una vez sentados el portugués y Maguire, que tampoco se libró de la pugna de egos, el United pasó en unos pocos meses de perder sus dos primeros partidos de liga a encadenar 9 victorias que siguen vigentes a día de hoy. 

Tras aquello, la mejoría del equipo sin la presencia del astro portugués se hizo evidente, y, con un carácter cada vez más explosivo por parte de Ronaldo, llegando a crearse una guerra abierta en los medios de comunicación ingleses, el neerlandés, en un acto de pragmatismo y valentía como pocos se recuerdan, optó por separar los caminos del club y la leyenda. 

Erik tuvo que enfrentarse a Cristiano en varias ocasiones / Foto: @ManUtd
Cristiano dio el adiós final a su carrera en Inglaterra / Foto: @ManUtd

Recuperar a Marcus Rashford para la causa. Esa era una de las prioridades para volver a ver al Manchester United luchar por títulos. Y, sí, parece que Erik también lo está consiguiendo.

Con el gol final que selló definitivamente la victoria para el lado rojo de Manchester en el derby local contra los “vecinos ruidosos”, el joven extremo inglés confirma, más si cabe, que ha vuelto a ser el Rashford que Old Trafford siempre ha necesitado, pero que ya nadie se esperaba.

El 11 acumula ya ocho goles en Premier esta temporada, alzándose como el gran goleador de ten Hag en una plantilla huérfana de un 9 que comande la punta de lanza ofensiva.  

Mérito, más si cabe, porque no hay que olvidar que hace apenas unos meses, cuando el equipo se encotraba bajo la dirección de Ralf Rangnick, el canterano se vio, por primera vez desde que debutase en 2015, apartado de la titularidad de manera sistemática.  

Este Rashford que a día de hoy parece imparable sobre un campo de fútbol, viene, ni más ni menos, de saborear el punto más bajo de su carrera deportiva

Marcus fue decisivo en la histórica victoria en el derby de Manchester / Foto: @ManUtd
Marcus fue decisivo en la histórica victoria en el derby de Manchester / Foto: @ManUtd