El encuentro entre Bayern de Múnich y Borussia Dortmund fue la cita perfecta para los aficionados de la Bundesliga y del gran Der Klassiker. 75.000 almas fueron testigos de un duelo espectacular y de un nuevo relevo en el banquillo del Bayern. Bajo el mando de Thomas Tüchel, el combinado bávaro necesitó tan sólo 24 minutos para mostrar sus dientes. Con su victoria por 4-2 sobre el Borussia Dortmund en el Allianz Arena, el Bayern regresó a dar miedo y a lo más alto de la clasificación de la Bundesliga. Ahora sacan dos puntos de ventaja sobre su máximo rival. Tüchel optó por no hacer cambios importantes en la selección de jugadores, Maxim Choupo-Moting y Kingsley Coman contaron con la confianza del nuevo técnico. 

Pese a caer 2-1 ante el Bayer Leverkusen antes del descanso internacional, la realidad es que el Bayern es mucho Bayern. Es ya una costumbre que en el fútbol alemán mande el de siempre. El equipo de Múnich, FC Bayern. La primera mitad del partido se desarrolló en el espíritu de los bávaros, pese a que el Dortmund tuvo el primer saque de esquina después de solo 18 segundos y la primera buena oportunidad a través de Marco Reus.

No fue suficiente la ocasión de Reus, y es que el Borussia se vio muy inferior ante el gigante. La primera parte fue una absoluta pesadilla para el conjunto de Iduna Park. Más bien pesadilla para Gregor Kobel, quien salió a despejar un pase largo del defensa central Dayot Upamecano. En su intento, el portero no golpeó bien la pelota, ante la mirada de Leroy Sané, y simplemente continuó rodando hacia la portería del cuadro visitante. La acción fue considerada como un gol en propia puerta del portero del Borussia.

Thomas Muller, clave en el triunfo del Bayern. Fuente: @FCBayern
Thomas Muller, clave en el triunfo del Bayern. Fuente: @FCBayern

Müller: olfato goleador

Los amarillos se sorprendieron y los bávaros siguieron arrollando como pudieron. Leon Goretzka tuvo dos grandes oportunidades, una de cabeza y otra con un disparo lejano. Ambas ocasiones terminaron sin ningún éxito. A partir de aquí, comenzó el show de Thomas Müller. La discusión frente a la portería siempre fue uno de los puntos fuertes de Müller y pocos encarnaron ese gusto de oler la sangre que este jugador inacabable de 33 años.

Tuchel, encantado con los suyos, no podría haber deseado un comienzo más convincente del Bayern bajo su vigilancia, ya que nuevamente Thomas Muller anotó por segunda vez. Sin embargo, no fue solo la estrella alemana la que impresionó en el césped, sino que también Kingsley Coman y Leroy Sane demostraron que quieren ser titulares. De hecho, el cuarto gol fue obra de los dos. Fue el jugador francés quien aprovechó un pase de ensueño de Sané para poner el balón en la red.

No todo fue perfecto para el Bayern. La defensa cojeó a ratos. Los jugadores del Bayern se confiaron demasiado y lo pagaron muy caro. Serge Gnabry, recién reemplazado, golpeó la pierna de Jude Bellingham en su propia área de penalti. Emre Can no dejó aprovechar la oportunidad del punto de penalti y transformó el primer tanto de los amarillos en el 72’. Y el ‘jóker’, Donyell Malenincluso aseguró el segundo gol de su equipo.

El Bayern avasalló al Borussia y, desde el error de Kobel, los visitantes no crearon nada de peligro. Los bávaros dieron la vuelta a la tortilla en el primer partido de Tuchel al mando, justo cuando su dominio en la Bundesliga pareció que estaba a punto de desvanecerse. Esta victoria da una ventaja de dos puntos. El Bayern todavía sigue vivo en todas las competiciones, con el principal objetivo de ganar la Champions. Por su larte, el Borussia ya sabe que estando el Bayern arriba, es casi una misión imposible alcanzarlo.