La inteligencia de la que hace gala este jugador sobre el césped, será difícil volver a encontrarla y no pasará poco tiempo hasta que podamos ver algo parecido. Sin duda, en la Eurocopa que se disputa en Francia dentro de escasamente un mes, su selección le echará de menos, ya que fue una de sus piezas clave. Todos los triunfos y posteriores títulos conseguidos, se han cimentado a raíz de su gran visión y materializándose en extraordinarias asistencias.

No deja de ser curioso que, Xavi en sus inicios, comenzara jugando en la posición más adelantada sobre el campo, pero La Masía, reconvirtió su posición.

Xavi en La Masía | Foto: F.C.Barcelona

No destacaba por sus goles, tampoco por su velocidad ni complexión, pero gracias a eso, encontró la posición, en la cual, se encontraría más cómodo y su rendimiento crecería a velocidad galopante. La de centrocampista. Xavi ha sido un jugador que puede presumir de haber jugado en todas las categorías de la selección española, hasta que, un 15 de noviembre del año 2000 llegó su gran oportunidad debutando frente a Holanda en partido amistoso, partido que se jugó en el estadio de la Cartuja. A raíz de aquí, se fue forjando el jugador que, años más tarde, demostraría ser.

Xavi en el Mundial de Corea|Foto: UEFA

Su siguiente estación fue el Mundial de Corea y Japón celebrado en el año 2002. José Antonio Camacho -exjugador del Real Madrid y seleccionador español en ese momento- le fue dando protagonismo, comportando un juego dinámico a la selección. En el partido frente a Corea del Norte, no exento de controversia, y que se decidió a penaltis, Xavi, cabe destacar, que marcó el segundo de la tanda.

Tanto Iñaki Sáez, como frank Rijkaard, no exprimían al máximo el rendimiento del jugador español. Retrasaban a este unos metros, colocándole en una posición en la que Xavi tenía el rol de recuperador (faceta en la que no destaca), más que en la de creador- sector en el que sobresale-, ya que ambos entrenadores apostaban por un juego más incisivo, agresivo y rápido, abriendo a las bandas, con jugadores veloces y de gran potencia. Fue el seleccionador Luis Aragonés, en el Mundial de 2006, quien le dio absoluta confianza y tomó el mando de la selección y su centro del campo. Todos los balones debían de pasar por sus botas.

Después de ganar el Mundial sub-20 y ser medallista en los Juegos Olímpicos de Sídney, llegaría su siguiente triunfo, ahora con la absoluta en la Eurocopa de 2008, erigiéndose como el mejor jugador del torneo, y ganando la competición.

Una de las portadas en prensa deportiva tras la consecución de la Eurocopa de 2008| Foto: Federación Española

Su manera de jugar, su visión de juego, su inteligencia, la capacidad que denota en controlar las marchas del encuentro según las exigencias de este. Controles orientados, paredes, y amagos son sus mejores armas. Pero lo que mejor sabe hacer es dar pases y asistencias. Cortos, largos, cambios de juego… Xavi es un jugador infalible en esta faceta con una media de 90% de pases acertados. También es especialista en saques de esquina y, a su vez, un extraordinario lanzador de faltas. Pero no acabaría aquí su papel en la selección. En 2010 se proclamó campeón del mundo ostentando el privilegio de pertenecer al once ideal del torneo. Xavi consiguió las 100 internacionalidades el 25 de marzo de 2011, en un partido clasificatorio para la Eurocopa de 2012, torneo que posteriormente lograría. En este campeonato, volvió a destilar su clase, junto a sus compañeros.

En especial con Andrés Iniesta, también compañero en su club, el Barcelona, y que fue elegido el mejor jugador del torneo. Dos años después anuncia su retirada. Su último partido lo disputa frente a Chequia en el Nuevo los Cármenes. Con números a tener en cuenta con la Roja: 133 partidos con 12 goles y, todo esto, sumado a grandes actuaciones protagonizadas con asiduidad, son su bagaje con la selección.

El ingeniero del Barça

Desde que Xavi debutó en el Barcelona un 18 de agosto de 1998, partido en el que marcó frente al Real Mallorca en la Supercopa de España con Louis Van Gaal dirigiendo al conjunto azulgrana, no ha bajado su rendimiento. Pero su época dorada se le atribuye a partir de la Euro de 2008 y el inminente fichaje de Pep Guardiola, en ese mismo año, como técnico blaugrana.

A Guardiola, le gusta el fútbol de toque, tratar bien la pelota, moviéndola de un lugar a otro, elaborando las jugadas, con precisión, clase y paciencia. Por ello, le otorgó a Xavi todos los galones para que éste fuese el conductor del equipo, dándole absoluta libertad. Xavi ha sido indispensable en su equipo, tanto en las victorias aplastantes como el 2-6 o el 5-0 ante el Real Madrid, como en la consecución de: Ligas, Ligas de Campeones, Copas del Rey, Supercopas de España y de Europa respectivamente y es que el jugador, presume de tener en su palmarés estos títulos, al alcance de muy pocos y, simultáneamente, agrandando la grandeza de su club.

En el año 2010 quedó a las puertas de ganar el Balón de Oro, trofeo que se le otorga a los más grandes en la historia del fútbol, quedando en tercera posición por detrás de su compañero Leo Messi, que ese año ganó su segundo Balón de Oro. En la actualidad, su hegemonía es indiscutible, siendo el jugador que más ha ganado, cinco.

En mayo de 2015, Xavi emigró del fútbol español con lágrimas en sus ojos por dejar el club de su vida. Su equipo actual, el Al-Sadd SC en Catar, es donde continúa destilando su fútbol, elegancia y magia, haciendo las delicias de los cataríes a miles de kilómetros del país que disfrutó viéndole crecer y formándose como futbolista.

Xavi posa con su nueva elástica| Foto: UEFA
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