La Eurocopa femenina que se disputa este verano en los Países Bajos continúa evidenciando sorpresas y emociones fuertes. Con la finalización de una competitiva y equilibrada fase de grupos, tan solo las ocho mejores selecciones del continente mantienen su sueño en la batalla, una batalla que ya dilucida en el horizonte sus encontronazos más decisivos. A partir de ahora ya no hay lugar para las dudas; llega el todo o nada.

Con la salvedad de que España sufrió para amarrar su billete tras perder contra Escocia y observar de reojo el quehacer portugués, Inglaterra, Alemania y Suecia, aunque las nórdicas perdieron una oportunidad única de finalizar líderes, evidenciando su a priori superioridad en sus respectivos grupos. Más emoción se determinó en las otras dos ofensivas. En la primera de ellas, liderada claramente por Países Bajos, se confirmó la debacle de Noruega y la mejoría de Dinamarca, mientras que en la zona C se determinó finalmente la clasificación de una Francia lejos de su mejor nivel. Como si de una auténtica pesadilla se tratase, las galas sufrieron de lo lindo para acompañar a la sorprendente Austria a los cuartos de final. Un nuevo aviso a navegantes.

Con un día de descanso para reponer fuerzas, este fin de semana las ocho supervivientes de la primera fase volverán a medir fuerzas entre sí en cuatro enfrentamientos cada cual más interesante. Porque la batalla decisiva todavía no se ha librado. El fútbol femenino continental muestra su evolución y desea seguir creciendo para deleite de unos aficionados cada día más enganchados. ¿Quién ganará? El fútbol dirá.

Grupo A

- Noruega 0-1 Dinamarca: Katrine Veje (5´).

MVP: Pernille Harder (Dinamarca).

- Bélgica 1-2 Países Bajos: Tessa Wullaert (59´) | Sherida Spitse (27´), Lieke Martens (74´).

MVP: Lieke Martens (Países Bajos).

Con la anfitriona prácticamente pisando los cuartos de final y la vigente subcampeona buscando la heroica tras un torneo propiciatoriamente reflexivo, Dinamarca y Bélgica partían como las dos selecciones con más cosas en juego, concretamente un billete hacia la antepenúltima ronda del campeonato. Aunque no se enfrentaban entre sí. Las belgas se medían a las tulipanes y las danesas, a las escandinavas.

Bélgica cayó con dignidad ante una anfitriona que se adjudicó todos los puntos en juego

La primera en inaugurar el marcador fue Dinamarca. Y prontamente, concretamente a los cinco minutos, demostrando por enésima vez que éste no era el torneo de Noruega. Las danesas, de menos a más en la competición, se acercaban a los cuartos de final. Entretanto, Países Bajos, una vez más espoleado por su ardiente público, se adelantaba frente a la soñadora Bélgica, merced a un nuevo penalti convertido por Spitse. Neerlandesas y danesas rozaban la siguiente fase, más si cabe cuando Hansen errase una pena máxima… las vigentes subcampeonas, que precisaban una goleada como último clavo ardiendo, continuaban naufragando entre la fortuna y su propio juego.

La reanudación trajo consigo dos batallas tremendamente abiertas. Si por un lado Dinamarca atacaba la portería de una Hjelmseth pluriempleada, con Harder como factor diferencial, y Noruega no escatimaba en esfuerzos, haciéndose fiel amiga de una madera que complicaba cada vez más su faena; por el otro Bélgica equilibraba la contienda ante la hasta el momento intocable anfitriona gracias a un golazo de su estrella Wullaert. Entonces la sonrisa se borró por momentos en el confiado estadio Guillermo II, toda vez que Países Bajos tampoco distaba tanto de la eliminación. Pero ahí emergería Martens (¡vaya torneo el suyo!) para poner las cosas en su sitio y formalizar el pleno de unidades de las locales. Con Bélgica llorando ante un sueño al inicio lejano que cerca estuvo de convertirse en realidad, Dinamarca salía victoriosa en Deventer para repetir presencia entre las ocho mejores de Europa.

Lieke Martens, todo desequilibrio, una de las jugadoras más destacadas del presente Europeo. | Foto: UEFA.

Grupo B

- Suecia 2-3 Italia: Lotta Schelin (14´), Stina Blackstenius (47´) | Daniela Sabatino (4´, 37´), Cristiana Girelli (85´).

MVP: Daniela Stracchi (Italia).

- Rusia 0-2 Alemania: Babett Peter (10´), Dzsenifer Marzosán (56´).

MVP: Babett Peter (Alemania).

Alemania y Suecia sabían su objetivo: evitar a la anfitriona. Tras el previsto empate inaugural entre ambas, tanto teutonas como suecas dejaban en manos de la diferencia de goles su devenir en el torneo. Antes del inicio del tercer y definitivo asalto, eran las más norteñas las que partían con ventaja en la primera posición, gracias a su mayor victoria sobre Rusia que la lograda por la vigente campeona ante Italia. Precisamente las soviéticas eran las únicas que podían amargar el favoritismo de las finalistas olímpicas, aunque para ello debían mandar a la lona a la propia Alemania. Palabras mayores. Por otra parte, las transalpinas, ya eliminadas, afrontaban el encuentro con ganas de refrendar las buenas sensaciones dejadas ante Alemania.

Dicho y hecho. Con un doblete, la delantera Sabatino ponía por delante a las italianas en el primer tiempo ante una Suecia más fallona que de costumbre en defensa. Solo el riguroso penalti transformado por Schelin otorgó algo de vida a unas pupilas de Sundhage que rápidamente perderían su privilegiado puesto cuando Alemania conseguía abrir la lata ante Rusia. Y con otro penalti, de nuevo con la zaguera Peter como artillera.

Italia cerró el Europeo derrotando a una Suecia finalmente segunda de grupo

La segunda mitad se inició vibrante, con Blackstenius igualando rápidamente para confirmar que Suecia no bajaría los brazos en su intento por recuperar el primer escalafón grupal, y Marozsán materializando el tercer penalti favorable a Alemania en el torneo para certificar la imbatibilidad de las germanas. Rusia lo tenía prácticamente imposible. Lejos de incluso acercarse en el marcador, las teutonas solo debían mantener el decorado de la contienda para confirmar sus aspiraciones. Dicho y hecho. Entretanto, en Doetinchem la merecida sorpresa se convirtió en realidad cuando la atacante Girelli anotaba el 3-2 para euforia italiana. Las azules decían adiós al campeonato, pero venciendo a la subcampeona olímpica y dando la cara previamente ante la poderosa Alemania. Para tener muy en cuenta. Así las cosas, las germanas se instalaban primeras de grupo y evitarán a los Países Bajos en cuartos de final, principal objetivo antes de iniciarse la jornada. El “regalo” le caerá entonces a Suecia, que perdió su oportunidad de devolverlo pese a comenzar la tercera batalla en lo más alto de la cadena. Y es que el fútbol no es matemático.

Girelli decide la victoria transalpina ante una Suecia que no podrá evitar a Países Bajos. | Foto: UEFA.

Grupo C

- Islandia 0-3 Austria: Sarah Zadrazil (36´), Nina Burger (44´), Stefanie Enzinger (89´).

MVP: Nina Burger (Austria).

- Suiza 1-1 Francia: Ana-Maria Crnogorcevic (19´) | Camille Abily (76´).

MVP: Ramona Bachmann (Suiza).

Emoción hasta el final. Aunque Islandia ya llegaba eliminada al definitivo asalto y Austria demostró con prontitud y solidez que su billete rumbo a la siguiente estación europea estaba más que pagado, Francia y Suiza firmaron entre sí un encuentro no apto para cardíacos, batallando hasta el final por una segunda posición que, aún con todo en contra, finalmente se tiñó de azul. Entonces las galas respiraron tranquilas… la pesadilla se convertía solo en eso, en una cruel pesadilla.

La batalla pintaba dura ya desde el inicio. Con las galas jugándose el todo por el todo, Thalmann intervenía en un par de ocasiones con excelso acierto, impidiendo así la inauguración del electrónico. Pero, acto seguido, la suerte francesa daría un vuelco tan inesperado como cruento. Roja directa a Perisset por impedir el avance en solitario de Bachmann y, en la misma falta, Crnogorcevic cabeceaba inapelablemente para firmar la ventaja suiza. Corría apenas el minuto 19. Suiza estaba por delante; Francia debía remar contracorriente. Simultáneamente, Austria encarrilaba su inesperada y merecida primera posición grupal antes del descanso, con dos dianas ante una Islandia ya eliminada en la jornada precedente.

Con una menos y gol en contra desde el inicio, Francia se encomendó a Abily para pasar a cuartos

La reanudación trajo consigo a una Francia rondando la fina línea del fracaso. Sin apenas cambios con respecto al entramado inicial, la eterna aspirante veía correr los minutos a la par que las ocasiones brillaban por su ausencia. La derrota más sonada de la historia reciente gala tintineaba en el horizonte… hasta que emergió Camille Abily. La excelsa centrocampista del Olympique de Lyon conectó un lanzamiento de falta a un cuarto de hora de la finalización para, en colaboración con la guardameta helvética, establecer el definitivo y salvador empate. El oxígeno regresaba al seno francés. Aunque Suiza lo intentó hasta el final, con Bachmann desgastadísima tras su soberbio trabajo, Francia logró manejar el encuentro como éste requería para mantener la igualada. Y a buena fe que lo consiguió. La pesadilla fue solo eso, una pesadilla. Aunque para aprender. Donde la alegría se amplió a suprema fue en Austria. La a priori Cenicienta grupal estaba en los cuartos de final, invicta y con total merecimiento.

Enzinger celebra el gol que encaminaba definitivamente el liderato de Austria. | Foto: UEFA.

Grupo D

- Escocia 1-0 España: Caroline Weir (42´).

MVP: Caroline Weir (Escocia).

- Portugal 1-2 Inglaterra: Carolina Mendes (17´) | Toni Duggan (7´), Nikita Parris (48´).

MVP: Toni Duggan (Inglaterra).

Inglaterra y España debían confirmar en la decisiva jornada su clara superioridad sobre Escocia y Portugal, dos selecciones debutantes lejos de la primera plana continental. Pero, contra pronóstico y aunque las inglesas sí cumplieron con su deber, las españolas sufrieron hasta el final. Literal. La derrota ante una mermada Escocia precisaba observar de reojo el quehacer luso. Y pese a que las portuguesas tuvieron la clasificación hasta el último suspiro, finalmente la alegría se quedó en las favoritas. España estaba en cuartos de final.

El inicio de la jornada parecía resultar dilucidador para la clasificación definitiva del grupo D, toda vez que Duggan se aprovechaba de un error de bulto de la guardameta portuguesa para desnivelar la balanza. Pero Carolina Mendes no tardó en demasía para retomar las tablas en el marcador y regresar al pasado. Todo permaneció como empezó hasta el sorprendente tanto escocés, obra de Weir. España había acumulado ocasiones para abrir la lata, pero las isleñas aguantaron, con Fay con la capa de heroína, hasta ver recompensado su valiente planteamiento. España estaba fuera del Europeo. Y así tomaría el camino de los vestuarios tras el minuto 45. Toda una declaración de intenciones. Tocaba sufrir.

Portugal y Escocia lucharon hasta el final en un grupo en el que partían en clara desventaja

El nerviosismo se palió de nuevo prontamente, gracias a la diana de Parris apenas transcurridos unos minutos del segundo período. Ésto consolidaba a las británicas en la cúspide y ayudaba a las españolas a acoplarse de nuevo el traje de subcampeonas zonales. Aunque todo se movía en tan solo un gol. La calma era excesivamente leve, y así continuó hasta el final, convirtiendo en agonía la segunda mitad de españolas, escocesas y portuguesas. Las mejores ocasiones para conseguir la igualada fueron peninsulares… pero España terminaría pereciendo ante una Escocia que, pese a las bajas de sus estrellas Little y Ross, batalló con corazón para alcanzar la segunda diana de la noche. Con la finalización del primer envite, todos los ojos se centraron con nerviosismo en los instantes finales de un emocionante Inglaterra - Portugal que dictaminó dos interesante ocasiones lusas cuando la colegiada ya miraba el cronómetro. Por un pelo, pero España estaba en cuartos de final. También Inglaterra, aunque en su caso de un modo mucho más solvente. Este Europeo sigue sorprendiendo… ¡y lo que resta!

Las jugadoras españolas celebran una clasificación de lo más agónica. | Foto: UEFA.