La inspiración no lo abandona y sus goles guían el camino. Son lámpara a los pies de los bávaros y lumbreras en su trayecto hacia el título de Bundesliga. Robert Lewandowski volvió a firmar un doblete ante el Hoffenheim, para que el Bayern de Múnich venciera 2-0 a los azules, quienes se ven cada vez más hundidos en el abismo del descenso y comienzan a encender las alarmas en su interna. Con sus dos goles, Lewandowski ratificó un partido completamente dominado por el Bayern, en el que solo dos llegadas de Kramaric y un cabezazo de Vargas fueron lo más peligroso que Neuer vio en su portería. Por su parte, los bávaros dieron un recital ofensivo en el que solo las grandes apariciones de Oliver Baumann impidieron que se transformara en goleada. El Bayern es más líder cada fecha, pero la competencia entre bávaros y borusser sigue en pie todavía.
Monólogo en tiempos de improvisación
El partido arrancaba con el monólogo propio del Bayern ante su gente y en su campo. Con el balón en los pies, los bávaros comenzaron a movilizar sus líneas y a ejercer un control total que anuló la idea defensiva de los de Stevens y comenzó a romper poco a poco su cerrojo defensivo. Sin embargo, más allá del típico dominio bávaro, la novedad estaba dentro del once inicial de Guardiola. Con la baja de Boateng y algunas piezas todavía saliendo de sus lesiones, el catalán echó mano de Joshua Kimmich como defensa central, junto a Badstuber, dejando en zona media a Xabi Alonso y al abanico de atacantes con Coman, Costa, Müller y Robben acompañando a Lewandowski. La improvisación se hacía presente, pero Kimmich respondía con la capacidad de todo un jugador de basta experiencia.
La improvisación se hacía presente, pero Kimmich respondía con la capacidad de todo un jugador de basta experiencia
Dicha improvisación parecía no notarse cuando, al 7', la primera vez que Eduardo Vargas quería escaparse era cortado a la perfección por Kimmich, quien comenzaba a dejar en claro que toda demarcación defensiva parece quedarle a la perfección. Tras este intentó, el mismo Robben, al 8', desbordaba en diagonal hacia el centro y sacaba un zurdazo que se iba demasiado alto de la puerta de Baumann. Luego, al 10', el holandés volvería a romper a Kim en diagonal y dejar atrás a Sule en la marca, pero, nuevamente, su zurdazo se iba demasiado cruzado de portería. Sin embargo, los primeros avisos dejaban en claro que los costados serían el blanco ideal al que apuntaría la ofensiva bávara en este partido.
El partido calentaba emociones y el Bayern comenzaba a desplergar sus armas en velocidad. Coman y Costa, volcados ambos sobre costado izquierdo, comenzaron a colarse una y otra vez por la banda de Kaderabek, sacando un centro fino al 17', pero que Müller conectaba de volea con la zurda, pero su intento se iba demasiado alto. Al 21', era Coman quien perforaba a la espalda de Costa y desequilibraba hasta línea final, devolviendo a Costa sobre la línea del área, para enviar un centro que Lewandowski pescaba de cabeza, pero Baumann realizaba una tapada fenomenal y silenciaba el grito de gol en la grada. La era de 'CosMan', parece incrustarse partido a partido en el corazón del público bávaro, quien aplaudía cada intervención del francés y el brasileño por los costados.
El partido calentaba emociones y el Bayern comenzaba a desplergar sus armas en velocidad
Robben volvería a intentarlo con un disparo cruzado de zurda al 23', pero su intento se iba apenas por encima de la puerta del Hoffenheim. Luego, al 28', Costa rompía una vez más por izquierda y conectaba un centro al área que Lewandowski no pescaba, pero Müller tomaba de primera intensión para conectar un derechazo potente que Baumann tapaba con su cuerpo a dos tiempos. El Bayern empujaba una y otra vez hasta que, al 32', encontró la llave para romper el cerrojo azul que se erguía ante Baumann. La jugada la encabezó Douglas Costa, quien tomó el balón, enfiló en velocidad desde la izquierda hasta línea final y conectó un centro al área chica que Lewandowski anticipó a Bicakcic y venció la resistencia de Baumann empujando el esférico a la red sin problema alguno. Se rompía la barrera y se abría el marcador. El Bayern encontraba el gol de la ventaja y la tranquilidad para seguir manejando el partido a su ritmo.
Con la ventaja, el Bayern comenzó a controlar el balón y trabajar con la misma fórmula el segundo gol, no sin antes sufrir un susto peligroso al 41', cuando Vargas encontraba el espacio para irse de la marca de Badstuber, desbordaba a Lahm y enviaba el centro a Kramaric, quien quedaba mano a mano con Xabi Alonso. El recorte del atacante dejó sin opciones al volante ibérico, pero su disparo, fuerte y rasante, era bien tapado por Manuel Neuer y la acción acababa con el despeje de Alaba y la salida de Costa con balón dominado. Con esa jugada, el primer tiempo cerraba sus acciones, dejando en claro que, a pesar de su control absoluto, el Bayern debía firmar el segundo para no verse sorprendido por una sola acción del Hoffenheim en contragolpe.
Golpe final y a congelar las acciones
Para el segundo tiempo, el Bayern dejó atrás viejos pecados y entró enfocado y agresivo desde sus primeras acciones. Ya al 48', Lewandowski conectaba un disparo desde fuera del área que Baumann tapaba de gran forma. Luego, al 51', era Müller quien conectaba de cabeza un cobro de córner de Douglas Costa, pero, nuevamente, Baumann se estiraba y enviaba el balón lejos de la red. Alaba sacaba un zurdazo cruzado y potente al 55', pero el balón se abría sobre lo último y pasaba saludando la base del poste izquierdo de Baumann, quien ya se estiraba de forma aflictiva para mantener su portería con el menor daño posible. El partido encendía las revoluciones del Bayern y dejaba al Hoffenheim cada vez más lejos de una posible reacción.
El partido encendía las revoluciones del Bayern y dejaba al Hoffenheim cada vez más lejos de una posible reacción
Sin embargo, los sustos aislados seguían a la orden del día en favor del Hoffenheim, siendo así como, al 60', Eduardo Vargas encontraba un pase filtrado por la derecha para Kramaric, quien se sacaba a Xabi Alonso, nuevamente, de la marca personal y enviaba un disparo que Neuer mandaba a tiro de esquina. En esa jugada, Vargas se colaba por delante de la marca de Xabi Alonso y conectaba un frentazo apenas por encima de la puerta de Neuer. Tras estas jugadas, el Bayern apretó más la presión, movilizando sus piezas y llegando a asfixiar al Hoffenheim con Alaba y Kimmich más adelantados por los costados y con Xabi Alonso por delante del único hombre en defensa: Holger Badstuber. La misión bávara era siemple: atacar y nada más que atacar.
Y con esa premisa ofensiva fue que, al 64', el Bayern orquestó una jugada con todo el sello de la marca Guardiola para firmar el segundo gol del partido. La acción la inició Costa dándole toda la vuelta a la jugada sobre la derecha con Robben. El holandés quebró hacia el centro y conectó con Lahm sobre tres cuartos de cancha, quien hizo una pared exquisita con el recién ingresado Thiago Alcántara y tomó el balón para filtrar un pase milimétrico al área, donde Lewandowski corrió a la espalda de los centrales y definió con una vaselina quirúrgica por encima de la salida de Baumann y la barrida de Strobl. El segundo gol se hacía presente y el Bayern daba el golpe final, con un Lewandowski que sigue en éxtasis goleador con aura divina en esta Bundesliga.
El segundo gol se hacía presente y el Bayern daba el golpe final, con un Lewandowski que sigue en éxtasis goleador con aura divina en esta Bundesliga
Con el segundo en contra el Hoffenheim bajó los brazos y le entregó el absoluto mando de las acciones al Bayern, sin resistencia alguna. Con dicha señal de rendición, el Bayern comenzó a tocar y tocar el esférico y a mover el balón de lado a lado, pero con el mismo aire de peligrosidad sobre el área rival. Con estas acciones, Alaba era el primero que, al 71', sacaba un misil desde el costado izquierdo que se va apenas abierto del segundo poste de Baumann, colocando un nuevo susto en el corazón de Hubb Stevens y sus dirigidos. Luego, con el recién ingresado Arturo Vidal, el Bayern encontraba otra acción en los pies del chileno cuando, un pase largo de Lahm era bien controlado por Vidal de zurda y, en una media vuelta de primer nivel, sacaba un zurdazo que Baumann alcanzaba a rozar con su mano y enviaba el balón a impactar en el poste izquierdo, ahogándole el gol al chileno.
El Bayern seguía llegando y tocando puerta, mostrando con Robben una nueva llegada al 83', cuando el holandés quebraba el costado derecho con una fenomenal pared con Lahm, pero su zurdazo era bien tapado por Baumann, quien ya impedía una goleada de escándalo con sus paradas oportunas. Robben volvería a tener una nueva llegada al 88', pero su disparo era, una vez más, tapado por Baumann, dejando con solo dos goles en contra su portería. Con esta acción, el árbitro sancionaba el final del partido y dejaba el tablero con un 2-0 que solo Baumann pudo impedir que se convirtiera en un número mayor en contra del Hoffenheim.
Con este resultado, el Bayern de Múnich llega a 52 puntos y mantiene se ventaja de 8 por encima del Borussia Dortmund en la pelea por la Bundesliga. Los bávaros mantiene su hegemonía en liga y se perfilan a un cierre espectacular ante el Dortmund, donde todo parece indicar que queda limitado a lo que ambos equipos puedan hacer para definir al campeón de esta temporada. Por su parte, el Hoffenheim queda en la casilla 17º de la tabla general, con apenas 14 puntos y quedando a cinco unidades de distancia del Werder Bremen, quien ocupa la plaza de la promoción hasta el momento. Dos realidades distintas en un mismo torneo, donde la lucha comienza a tornarse más complicada para ambos equipos en sus diferentes intereses de la temporada.