En el Signal Iduna Park se presentaba, seguramente, el partido más igualado del grupo, en donde se enfrentaban el Borussia Dortmund y el Real Madrid. El equipo blanco se presentaba con la importante baja de Casemiro en el mediocampo, un jugador que aporta fortaleza y derroche físico tanto en la parcela defensiva como en el centro del campo. Por su parte, el conjunto alemán llegaba a la cita con las principales bajas de Marc Bartra y de Marco Reus, un jugador que esta temporada está encadenando una serie de lesiones que no le permiten rendir al máximo nivel y entrar en las convocatorias.

El Borussia Dortmund, sin Reus pero con velocidad arriba

Con la más que segura baja de Reus, Thomas Tuchel decidió (en su habitual 4-1-4-1) optar en la banda izquierda por Raphael Guerreiro, quien tomó la delantera en dicha banda sobre André Schürrle, que tendría minutos en la segunda parte. Con el sustituto de Marco Reus decidido, Tuchel siguió apostando por Weigl como 'ancla' en el mediocampo justo por delante de los centrales y Gonzalo Castro y Mario Götze como "interiores" (aunque este último se situaba más cerca del punta), además del joven Dembelé por la izquierda y Aubameyang en punta de lanza. La otra importante baja para Tuchel fue la de Marc Bartra, quien apuró plazos para estar en la cita pero finalmente no entró en la convocatoria y fue sustituido por Ginter.

El Madrid quería ganar en el mediocampo

XI RMA

Ante la baja de Casemiro, Zinedine Zidane optó por un mediocampo más ofensivo con la entrada de James Rodríguez, que actuaría como mediapunta y transformaría el 4-3-3 habitual para el técnico francés en un 4-2-3-1 con la 'BBC' arriba y el colombiano como mediapunta, desechando así la opción de Mateo Kovacic para continuar con el sistema habitual. Por otro lado, la baja de Marcelo por lesión obligó a 'Zizou' a colocar a Danilo a pierna cambiada por delante de la opción de situar a Nacho en ese lateral zurdo. La otra novedad en el once del Real Madrid fue la de Keylor Navas que, tras tres meses inactivo, volvió al once en detrimento de Kiko Casilla ante todo un Borussia Dortmund fuera de casa.

Los dos equipos, con intención de madurar las jugadas

El dominio en los primeros minutos del encuentro fue bastante repartido, aunque el Borussia Dortmund realizó desde el principio una gran presión a los centrales (tanto a Varane como a Ramos) para que lanzaran balones en largo y así tener más posibilidades de recuperar la posesión lo antes posible. Ambos equipos, queriendo tener el protagonismo en el partido, tenían la intención de mantener jugadas largas para poder controlar de mejor manera el ritmo del partido y así hacer correr al rival; en el caso del Borussia Dortmund esta estrategia era aún mas certera, pues Tuchel tenía en el once a jugadores veloces. La presión de los aurinegros hizo que el Real Madrid sufriera pérdidas innecesarias en tres cuartos de campo propio.

A pesar de la buena actuación de los hombres de Tuchel hasta el momento, fue Cristiano Ronaldo quien adelantó a los blancos en el marcador tras aprovechar los espacios que había dejado el Borussia Dortmund, que había ido con todo arriba. Una jugada entre Benzema, Kroos, James, Bale y Cristiano derribaron momentáneamente el plan de Tuchel.

Gonzalo Castro controla el balón ante Kroos | Foto: Borussia Dortmund
Gonzalo Castro controla el balón ante Kroos | Foto: Borussia Dortmund

El Madrid decide replegar atrás tras el gol

Con el tanto del portugués, los blancos deciden reunir a todos jugadores en campo propio para evitar fisura y fallos infantiles. A pesar de ello, Tuchel seguía confiando en la velocidad de sus jugadores y, por ello, Götze atraía a Varane para buscar el uno contra uno de Aubameyang, el hombre más rápido de los alemanes. No precisamente por este tipo de jugada llegó el empate del Dortmund, pues fue en una falta lateral sacada por Castro donde Keylor Navas decidió despejar con los puños con tan mala fortuna que el golpeo rebotó en Varane y salió disparado hacia la portería, donde Aubameyang sólo tuvo que empujar. Llegó el descanso, algo que vino muy bien a los de Tuchel tras el gol del delantero gabonés.

Tuchel busca más velocidad en la segunda mitad

Schmelzer presiona a Gareth Bale | Foto: Borussia Dortmund
Schmelzer presiona a Gareth Bale | Foto: Borussia Dortmund

Tras el inicio del segundo tiempo y las ocasiones de Dembelé y Aubameyang, el técnico alemán decidió dar entrada a Schürrle por Götze, lo que provocaría que Guerreiro ocupara el puesto de interior y Schürrle cayera a banda. Dada la pobre actuación del lateral portugués en banda, Tuchel decidió reforzar más esa parcela. Por su parte, Zidane recuperó el sistema habitual (4-3-3) tras la entrada de Kovacic por James Rodríguez.

Dos minutos después de esta sustitución, llegó el segundo gol del Madrid: Kroos pone un balón al área tras una falta lateral para Benzema, cuyo remate va al palo pero donde Varane remata en línea de gol para marcar. El balón parado y las contras (precisamente algunos de los puntos fuertes del Borussia Dortmund) fueron quebraderos de cabeza para los alemanes.

Los cambios, decisivos para el Dortmund

Thomas Tuchel hizo en cinco minutos dos sustituciones que cambiarían el devenir del encuentro: se retiraron Dembelé y Guerreiro por Pulisic y Emre Mor. La joven perla turca fue de lo más destacado en el tramo final de partido, pues fue un "dolor de muelas" tanto para los centrales blancos como para los laterales, haciendo gala de su "electricidad" en la conducción del balón y de su regate, algo que podría ser complementado con alguna que otra subida de Piszczek. Fue precisamente el turco quien aprovechó un error clamoroso de Sergio Ramos en un control tras un balón en largo de Sokratis y quien estuvo a punto de marcar de no ser por la aparición de un gran Carvajal en defensa, que despejó a córner.

El Dortmund aprovecha el exceso de confianza del Madrid atrás

Zinedine Zidane sólo había hecho un cambio hasta el momento, y era el de Kovacic por James. Sumando el gran cansancio de sus jugadores, el "encierro" en defensa ganando por la mínima y el empuje de los alemanes, Schürrle aprovechó en el 88' un gran centro de Pulisic para desatar la locura en el Signal Iduna Park. A la desesperada, para poder labrar este tanto, Tuchel decidió acumular a los hombres más creativos y veloces arriba (Emre Mor, Pulisic, Aubameyang, Castro y el propio Schürrle) para aprovechar la debilidad defensiva en los últimos minutos que estaba sufriendo el Madrid, quien obtuvo un empate pero donde perfectamente pudo perder debido a la fragilidad que mostró a balón parado.

Schürrle celebra el gol del empate | Foto: Bleacher Report
Schürrle celebra el gol del empate | Foto: Bleacher Report

En conclusión, Tuchel ganó la batalla táctica a Zidane, pues supo, con la ayuda de Weigl y Castro, superar la lucha en mediocampo al conjunto blanco, donde Kroos esuvo más fallón de lo habitual y donde Luka Modric no pudo llevar a su espalda todo el peso de esa parcela del campo. Finalmente no fueron los jugadores veloces los que decidieron el partido, ya que ambos goles  del Dortmund vinieron de centros al área y no de contraataques, un recurso más que distintivo en el juego de los hombres de Tuchel.