Hasta cuatro bajas ha sufrido el Dortmund debido a los encuentros de selecciones: concretamente son los casos de Guerreiro, Dembelé, Sokratis y Piszczek.

El primero de ellos tuvo que salir del terreno de juego en el minuto 52 por una molestia en el muslo en la victoria de Portugal ante Andorra. Aunque no se trata de una lesión grave, se descarta totalmente para el próximo partido y es duda para el choque de Liga de Campeones.

Algo parecida es la lesión de su compañero polaco, Lukasz Piszczek. Pese a jugar los 90 minutos ante Dinamarca, finalizó el encuentro con molestias en su rodilla derecha. Al igual que Guerreiro, parece que no estará mucho tiempo lejos de los terrenos de juego.

Miedo por Ousmane Dembelé

El problema de Dembelé preocupa más al míster Tuchel, donde no llegó a viajar con Francia Sub-21 a Bielorrusia: una lesión de tobillo, que todavía está pendiente de pruebas para saber concretamente el alcance de la lesión, es el origen del problema. En el Signal Iduna Park están rezando para que la joven promesa borusser no tenga nada de importancia.

Por último, encontramos al central griego Sokratis, que estará tres semanas en el dique seco debido a una distensión en el abductor, que no le imposibilitó para terminar el partido ante Estonia, pero que no le impedirá estar algo menos de un mes fuera.

Vuelve Marco Reus a los entrenamientos

Difícil futuro tienen los aurinegros en la zaga, ya que solo cuentan como jugador sano en dicha parcela: se trata del canterano Ginter. Habrá que estar atentos para saber que inventará el técnico teutón Thomas Tuchel en el próximo encuentro.

Pero no todo iban a ser malas noticias: en Dortmund han amanecido con la vuelta de Marco Reus. Tras la dura lesión de pubis, la estrella germana se ha vuelto a ejercitar junto a sus compañeros. Un calvario el que está viviendo el crack alemán, al que espera ponerle fin en una temporada que está llamado a ser importante.