En la jornada de Champions de hoy, se iba a vivir otro apasionante encuentro de la máxima competición europea en el Allianz-Arena, concretamente enfrentando a un Bayern que recibía al PSV de Phillip Cocu.

Los locales no llegaban en su mejor momento, ya que en Bundesliga llegan tras dos empates consecutivas con dos rivales, a priori, inferiores. Es el caso del Colonia y el Eintracht de Frankfurt. En Champions League, tampoco llegan en buen momento, tras caer en el Vicente Calderón. 

Por otra parte aparece el PSV, que llega como claro aspirante y cuyos números son prácticamente calcados al Bayern: al igual que los teutones, llegan tras dos empates en liga pero con la diferencia que también quedaron en tablas ante el Rostov en Champions. Mal comienzo del conjunto del Philips Stadion, que se sitúa cuartos a nueve puntos del líder en la Eredivisie.

Esperanza ante el asedio muniqués en la primera mitad

Desde el comienzo del encuentro, hubo un claro dominador e iba a ser el cuadro de Carlo Ancelotti. En el minuto ocho la iba a tener el ya recuperado Arjen Robben, tras un centro desde la izquierda, pero su remate se marcharía ligeramente desviado.

Thomas Müller, el "abrelatas" alemán

Sin embargo, tan solo tuvieron que esperar cinco minutos más para ponerse por delante en el marcador gracias al incansable goleador Thomas Müller. Todo tuvo origen con un potente disparo que envío el meta Zoet a córner. En ese mismo saque de esquina, la puso rápido al primer palo Robben hacia el internacional teutón y, tras un rechace propio que le paró abajo el cancerbero local, no iba a desaprovechar la segunda ocasión para anotar.

Continuaba el dominio local y esta vez el joven Kimmich iba a hacer el 2-0: una gran internada por banda de Alaba que iba a poner el centro al segundo palo, que iba a ser rematado a placer por el polivalente Kimmich. Este gol se convierte en su tanto número seis en siete choques oficiales.

En el minuto 31, tras un gran robo de un hiperactivo Robben, donde se marchó de dos futbolistas, su disparo iba a ser blocado por un desbordado Zoet.

Narsingh metería al PSV en el partido

Pero esto es fútbol y, en la única ocasión visitante, iba a estrechar distancias: sería Narsingh a falta de cuatro minutos para el descanso, quien iba a colocar el 2-1 en el marcador. Con un auténtico golazo a la escuadra de Manuel Neuer que, pese a tocarla con la yema de los dedos, no iba a poder evitar el tanto.

Sorprendente resultado con la que ambos equipos iban a afrontar la segunda mitad. Pese a que el Bayern hizo un monólogo en los primeros 45 minutos, este veía cómo el PSV se mantenía vivo con un gol que alimentaba la esperanza holandesa.

Narsingh hizo creer a los holandeses antes del descanso. Foto: PSV
Narsingh hizo creer a los holandeses antes del descanso. Foto: PSV

El Bayern acabaría sentenciando

La segunda mitad, iba a seguir con la misma tónica que en el primer prólogo. A los tres minutos, ya la iba a tener Robert Lewandowski, tras un pase espectacular de Thiago a la espalda de la zaga holandesa, donde el artillero polaco la iba a ajustar demasiado al palo izquierdo de la portería de Zoet y se iba a machar rozando la madera.

Dominio muniqués, que iba a sentenciar el choque a través de Lewandowski

Se sucedían las ocasiones con un dominio claro en el centro del campo alemán y con los "puñales" del Bayern, Robben y Lewandowski, acechando. Por medio de estos dos jugadores iban a anotar los locales el tercero. La jugada clásica por banda derecha de Robben, donde se zafó de Willems con facilidad y su posterior disparo iba a ser parado por Zoet. No obstante, iba a aparecer el que nunca falla, Robert Lewandowski, para empujar con la cabeza el rechace que quedó muerto en el área pequeña del conjunto de los Países Bajos.

En el minuto 61, viendo como se estaba desarrollando el encuentro, Cocu decidió hacer un cambio táctico para cambiar ese trascurso del juego que tanto le estaba perjudicando a su equipo. Por ello, le dio entrada al central Isimat-Mirin, en lugar de Guardado, con el objetivo de darle más solidez en la zona central del campo. 

Diez minutos después, Carlo Ancelotti decidió da un respiro al autor del primer gol, Müller, para que entrara en su lugar el habilidoso extremo Douglas Costa, que regresaba tras lesión.

En estos minutos, el PSV iba a tener mayor posesión, aunque sin crear peligro. Le costaba en exceso llegar al arco muniqués pese a gozar de la posesión del esférico. 

En el minuto 76, tras frenarse el encuentro en seco, el PSV iba a realizar su segundo cambio. Iba a dejar el terreno de juego Pereiro en lugar del joven extremo Steven Bergwijn.

Robben hizo una exhibición con un doblete

En el minuto 84 iba a llegar el cuarto de los locales. De nuevo Arjen Robben anotaría, gracias a una asistencia por alto de Thiago, el cuarto gol del Bayern, donde el extremo tulipán iba a adelantarse a Zoet y con la testa haría su doblete particular ante su ex equipo.

En el minuto 85, ya ambos equipos conscientes de que el partido estaba sentenciado, decidieron dar respiro a alguno de sus jugadores. Por parte de los locales, se marchó Kimmich en lugar de Javi Martínez; en cambio, el PSV dio entrada a Zinchenko por Schwaab. Dos minutos después, Ancelotti dio minutos a la promesa Renato Sanches por el goleador Arjen Robben, que fue despedido con una espectacular ovación por el respetable del Allianz.

Nada nuevo iba a pasar hasta el final e iba a confirmarse la goleada del Bayern en el Allianz, con el objetivo de seguir de cerca al Atlético de Madrid en la lucha por la primera posición.

Con esto, el Bayern suma una victoria tanto esperada como balsámica, ya que se encontraban inmersos en una mala racha, con el fin de garantizar esa fiabilidad que le corresponde a un equipo de su talla. Por otro lado, el PSV deberá seguir mejorando y centrarse en no perder más puntos en liga, ya que están realizando un comienzo de temporada desesperanzador.