Victoria muy sufrida y muy trabajada del Bayer Leverkusen ante el Tottenham. En un partido disputado en Wembley, el conjunto aspirinero consiguió arrebatarle la segunda plaza del grupo al equipo inglés, con el que comparte el mismo número de puntos. Al finalizar el encuentro, Roger Schmidt analizó lo que dio de si el choque, lo mismo que hizo un Kampl que anotó el tanto de la victoria y acabó lesionado.

Schmidt habló del partido de Kampl, autor del gol y al que le agradeció su trabajo y sacrificio sobre el verde: “Mostró un gran contraste con sus acciones, se movió arriba desde el primer minuto sin dejar de abandonar su presión en defensa”. Además, el técnico austríaco destacó el trabajo de todo su equipo ante un conjunto “muy bien organizado”.

En las últimas jornadas el Bayer pasó por algunos momentos en los que el ataque estuvo poco lúcido, algo que en Londres volvió a ocurrir. Sin embargo y, gracias al gol del Kampl, Schmidt quiso zanjar cualquier polémica sobre los problemas ofensivos: “Los de arriba estuvieron muy atentos, ganaron y generaron ocasiones y, gracias a Dios, consiguieron meter uno”. Gracias a estos tres puntos el Leverkusen se sitúa segundo, arrebatándole la plaza al Tottenham. Sin embargo, Schmidt se mostró cauto con la clasificación: “Lo tenemos en nuestras manos pero todavía no está nada decidido. Hasta la última jornada no se verá la solución”.

Kevin Kampl: “Ha sido un día que jamás olvidaré”

El jugador esloveno anotó el gol de la victoria en un estadio especial, un Wembley lleno y con un gran ambiente, algo que marcó a Kampl: “Soy muy afortunado de jugar en Wembley, más allá de la victoria, jugar aquí es algo único”. Además de disputar un partido en el mítico estadio londinense, Kampl también consiguió el gol de la victoria, una actuación que guardará en la memoria: “Es un día que jamás olvidaré”, concluyó el esloveno.

Sin embargo, el goleador tuvo que abandonar el terreno de juego al lesionarse en su tobillo. Un golpe duro para el jugador y para el equipo, ya que rompió un poco la buena dinámica de ambos. Roger Schmidt quiso analizar la lesión de Kampl y la contrastó con el gol, reconociendo que fue un golpe muy duro para la moral del propio jugador: “La felicidad se tiene que ganar, Kevin estaba exultante y de repente se quedó frío como el hielo”. Sin embargo, el propio Kampl se mostró feliz por el resultado del equipo, sin querer pensar demasiado en su lesión y destacando la alegría de los tres puntos.